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Comunidades de Boyeco pidieron ser tratadas como "zona de catástrofe"

petitorio. Dirigentes vecinales entregaron un documento con solicitudes y falencias, el que fue acogido por el Gobierno Regional para tener respuestas en próximo encuentro.

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Declarar a Boyeco como "zona de catástrofe" fue una de las sugerencias que las comunidades de este sector y que han convivido por más de dos décadas con el vertedero, incluyeron en un petitorio que fue presentado al Gobierno Regional, en el marco de la futura constitución de la mesa de trabajo con las autoridades.

"La verdad es que sin tener muchos antecedentes en la parte legal, decidimos incluir esta posibilidad, pues para nosotros es una zona de emergencia y requerimos que se integren todos los servicios y que se genere un plan de desarrollo integral en el territorio", apuntó Angélica Catrileo, presidenta del Consejo de Salud Territorial de Boyeco, quien agregó que "queremos que las políticas estén enfocadas absolutamente para nuestro territorio".

El encuentro entre vecinos de Boyeco y autoridades de Gobierno y del municipio, había quedado establecido hace un mes, cuando se había dado el primer acercamiento hacia una mesa de trabajo, en la reunión masiva realizada en el consultorio de esta zona rural de Temuco.

Así, los dirigentes y vecinos de las comunidades del sector de Boyeco llegaron hasta dependencias de la Intendencia para reunirse con el jefe de la división de Planificación y Desarrollo, Eduardo Abdala, en su calidad de representante del intendente en este proceso. Con un documento que resumía las peticiones en las distintas áreas, con las mitigaciones y las propuestas, los vecinos de Boyeco recurrieron nuevamente al diálogo, aunque mostraron abiertamente su molestia ante lo que consideran la negligencia de las autoridades tras 23 años de convivencia junto a un vertedero.

Diversos representantes de las seremis y reparticiones del Gobierno Regional, así como del municipio, formaron parte del encuentro, donde los boyequinos buscaban mejorar, a partir del rol del municipio, la fiscalización y los trabajos del plan de cierre del vertedero; las alternativas para mejorar las condiciones de evaluación del impacto, así como hacer hincapié en el deterioro, no sólo ambiental y social, sino también en requerimientos postergados según las comunidades.

"Ha sido acogida nuestra demanda y por ello es que hemos realizado este documento donde sintetizamos nuestras principales necesidades y falencias", señaló la dirigente.

Entre estas peticiones, los dirigentes de Boyeco señalaron la necesidad de contar con la información clara respecto del cierre del vertedero, con plazos definidos; el plan de mitigación social; el problema del agua potable, y una serie de requerimientos en las áreas de Salud, Educación, Vivienda, Fomento Productivo y Empleo, entre otras áreas.

El jefe de la división de Planificación y Desarrollo, Eduardo Abdala, señaló que haría de puente ante los seremis y representantes de cada área del Gobierno Regional que fueron requeridos en el petitorio.

Respecto de la sugerencia de declarar a Boyeco "zona de catástrofe", Abdala indicó que "no sé si es esa la condición jurídica, pero considero que efectivamente se requiere de un estado excepcional. La propuesta que se hace de lograr definir un territorio específico, creo que es clave para abordar el tema, por lo que vamos a conversar con nuestro departamento jurídico, tanto de la Intendencia como del Gobierno Regional, para ver si tenemos las atribuciones para hacer una definición específica de ese territorio. No me atrevo a poner nombre, pero claramente es una zona de afectación social, cultural y ambiental".

Tras las exposiciones de vecinos y dirigentes, así como de diversos representantes de seremías y organismos públicos, se definió que el lunes 17 de agosto -en primera instancia- se realizaría la reunión donde se entregarían las respuestas a estas peticiones, y que contaría con la presencia de los seremis o sus representantes oficiales.

Abdala se comprometió además a extender la invitación al intendente Huenchumilla, ya que las comunidades expresaron en reiteradas ocasiones su molestia por no contar con la presencia de la primera autoridad regional, así como del alcalde Miguel Backer.

"Es imprescindible y es impresentable que el alcalde de Temuco no haya estado presente", señaló Angélica Catrileo.

El consejero regional Alejandro Mondaca, presidente de la Comisión de Medio Ambiente del Core, provocó el desconcierto de los vecinos boyequinos cuando intervino, casi cerrando la reunión, para señalar que consideraba que no se cumplirían los plazos y que en diciembre del 2016, simplemente no se cerraría el vertedero.

"A menos de un año y medio de que se cumpla el plazo, todavía no existe por parte del municipio una solución concreta al tema de Boyeco", apuntó el core, quien agregó que "la gente lo ha dicho, el alcalde no ha estado presente, no existe por parte del municipio una solución concreta al tema de Boyeco. Veo el calendario y queda hacer una licitación para elegir un sistema, luego vienen otros procesos administrativos, viene la evaluación o declaración ambiental respecto de la tecnología que se decida utilizar y luego la construcción".

En la reunión estuvieron presentes representantes del Departamento de Aseo del municipio. Sin embargo, y pese al directo emplazamiento al alcalde y a la municipalidad, señalaron ante la consulta de cuánto había de cierto en los dichos del core Mondaca, que "cualquier información, deben remitirse a Relaciones Públicas del municipio".

La próxima reunión será decisiva. "Hoy Boyeco se está levantando", resumió Angélica Catrileo.

El proyecto "Construcción Obras Plan de Cierre Vertedero de Boyeco" -que fue exhibido por los equipos municipales en la reunión anterior en el consultorio de Boyeco- dejaba establecido como fecha de cierre definitivo del vertedero el 17 de diciembre del 2016, a cargo de la empresa Servimar Ltda., con el municipio como mandante y en una superficie a intervenir de 19, 57 hectáreas.

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años son los que las comunidades han tenido que vivir junto al vertedero, sufriendo las penurias de esta "vecindad".