Secciones

SAG instalará 31 mil emisores para prevenir plaga de polilla de la vid

en zonas urbanas de la araucanía. Las medidas suman una inversión que supera los 60 millones de pesos.
E-mail Compartir

Desde el año 2008, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), aplica medidas fitosanitarias en la Región de La Araucanía para evitar el establecimiento de la polilla del racimo de la vid, también conocida como lobesia botrana.

Es por ello que desde el mes de agosto, el Programa Nacional de Lobesia botrana, instalará 31 mil emisores de confusión sexual en La Araucanía, lo que representa un 277 % más que en el año 2014.

Todas las capturas de la polilla del racimo de la vid se han localizado en zonas urbanas de la Región. Por esta razón, el director regional del SAG, Eduardo Figueroa, indicó que "se hace necesario controlar la plaga en estos lugares para evitar o disminuir la presión del insecto desde estas zonas urbanas a predios aledaños susceptibles".

"El director regional hizo un llamado a los vecinos a contribuir con esta medida fitosanitaria, ya que sólo a través de su apoyo los funcionarios podrán instalar estos dispositivos en los parrones de las casas. Asimismo agradeció a las familias que ya lo hicieron y a los respectivos municipios.

Los dispositivos se ubicarán en casas con parrones caseros, ciruelos y hospederos bibliográficos, abarcando una superficie de 631 hectáreas.

EMISORES

Los emisores de confusión sexual son dispositivos que no provocan problemas a la salud de las personas y tampoco a los animales. Su objetivo es producir una nube de feromonas para confundir a los machos, evitando que el insecto encuentre a la hembra para la reproducción, disminuyendo así las posibilidades de multiplicación de la plaga.

Temuquense innova con crema para la psoriasis hecha con plantas nativas

cosmética natural. A fines de este año y en conjunto con una multinacional, se lanzará al mercado una crema, un jabón y una loción libre de corticoides para tratar esta enfermedad dérmica.

E-mail Compartir

En el mundo, una de cada cuatro personas sufre de psoriasis, enfermedad a la piel de carácter autoinmune, que provoca irritación y enrojecimiento.

Esta enfermedad, cuyo origen es genético o producido por el estrés, actualmente se trata con medicamentos de uso tópico, con cremas y lociones con corticoides, hormonas que son usadas como medicinas potentes, que de prolongarse su uso, tienen efectos secundarios.

Sin embargo, la realidad de cientos de chilenos puede cambiar gracias al ingenio de un temuquense, quien a partir de plantas nativas de La Araucanía creó una fórmula capaz de combatir las manchas y escamas que deja esta afección sobre la piel, mejorando la apariencia de ésta y, por supuesto, la calidad de vida de quienes la padecen.

Luego de ocho años de investigaciones, búsqueda de fondos y mejoras en la formulación, Víctor Melinao comenzará a vender este producto a fines de este año de la mano de una empresa de cosmética multinacional (la que por asuntos contractuales prefiere mantener aún en el anonimato).

Así, este emprendedor, quien además de su faceta farmacológica se desarrolla como contratista de la construcción, lanzará al mercado tres productos: una crema, un jabón y una loción para la psoriasis, cuyo valor se estima no superará los $10 mil por unidad.

HISTORIA

"Me tocó ver cómo a una persona cercana se quemó el rostro, le hicieron injertos en la cara de su propio cuerpo, sin embargo, quedó como un puzzle. Gracias a un remedio local, casero, el hombre sanó en menos de seis meses. Esto me llevó a investigar sobre las propiedades de esta mezcla natural, sacar una patente y buscar aliados", recuerda Víctor Melinao.

Este "científico amateur" comenzó a tocar puertas junto a este ungüento, que hecho con el principio activo de una planta natural -secreto básico de esta receta-, logra la regeneración de células.

Dado que Melinao no se desempeña en el ámbito de las ciencias, sino que es especialista en ingeniería sanitaria y se desarrolla en el rubro de la construcción, el camino se le hizo un poco más difícil. "Comencé acercándome a los médicos, los que vieron empíricamente que esto funcionaba. Luego trabajé con la Universidad Mayor, hasta que me apadrinó un capital ángel".

Ese capital ángel fue nada menos que el empresario y ex dueño de supermercados Santa Isabel, Eduardo Elberg, a quien Melinao conoció mientras realizaba unas reparaciones en su casa de veraneo.

"Conversé con él sobre el proyecto y me invitó a su casa en Viña del Mar. Me apoyó durante años con recursos para poder avanzar, ya que este camino ha sido largo e implica mucho dinero. La biomedicina tiene su tiempo, desarrollo, validación y finalmente la parte comercial", explica Melinao.

Actualmente este emprendedor cuenta con un fondo Prae (Programa Regional de Apoyo al Emprendimiento) de Corfo, y se encuentra desarrollando su marca con una multinacional cosmética, el buffet de abogados Albagli Zaliasnik, y dermatólogos especializados.

"Los laboratorios gastan millones de dólares en crear productos, y nosotros desde La Araucanía, estamos logrando levantar un producto que puede romper la medicina, sanando heridas complejas", afirma Melinao.

Este "biotecnólogo ad honorem" señala que la crema que ha creado, llamada originalmente Egae, "logra atenuar la apariencia de la psoriasis, haciendo mucho más amigable la vida de las personas".

Melinao cuenta que "una ejecutiva de Santiago que testeó el producto nos confesó que quedó feliz, porque pudo volver a usar falda y polera, ya que antes se tapaba los brazos para no mostrar sus escaras. Ahora, sus brazos brillan".

PROYECCIONES

Sin duda esta "planta milagrosa" que este investigador ha descubierto, tiene una serie de potenciales funciones, y luego del lanzamiento de la línea cosmética para mejorar la apariencia de las ronchas de psoriasis, Melinao espera continuar con las investigaciones para lograr un fármaco que ayude a la disminución de las heridas diabéticas.

"La Araucanía tiene un gran potencial biotecnológico. En el caso de este fármaco, la idea es trabajar con el principio activo de esta planta", dice.

Uno de los plus de esta crema es que es elaborada en el único laboratorio cosmético ubicado fuera de la Región Metropolitana: se trata de Avellina, laboratorio ubicado en el centro de la ciudad de Temuco, donde alrededor de 6 empresas del sur de Chile, todas con base en compuestos orgánicos y naturales, fabrican una serie de productos, tales como champú, alcohol gel y mucho más.