Las cifras del terremoto en el norte del país dicen mucho: fue de 8,4 grados Richter y movilizó alrededor de un millón de personas que debieron ser evacuadas de zonas costeras, sin embargo, frente a este tipo de hechos, las imágenes son más potentes que los números.

Es así como el grado de destrucción en ciertos lugares del norte del país evocan lo que han sido los terremotos más grandes que han azotado las costas chilenas. Especialmente afectados se han visto Coquimbo, Concón, Tongoy y muchas otras ciudades que han sufrido con la violenta sacudida y donde hoy sus habitantes realizan grandes esfuerzos para levantarse.