Si bien la erupción del 3 de marzo no es más que un recuerdo en la mente de los habitantes de la zona lacustre, específicamente en las ciudades de Pucón y Villarrica, que son las que vivieron más de cerca el fenómeno natural, aún persiste la restricción de ascenso al cráter del macizo. Se trata de una decisión técnica del Servicio Nacional de Geología y Minería, Sernageomin, que a través de su instrumental aún registra actividad interna en el cono, lo que ha sido percibido por quienes habitan en la zona a simple vista durante las tardes, cuando el volcán muestra cierta incandescencia.
Esta restricción en torno al cráter generó que este año el Centro de Esquí de Pucón mantuviera sus puertas cerradas, generando ello una serie de efectos que terminaron en una importante merma en la llegada de turistas durante la temporada invernal, baja que los gremios del turismo cuantifican en torno al 22,2 por ciento para las pernoctaciones en agosto de este año, en relación al mismo mes del año pasado; o en un 8,4 por ciento en la llegada de pasajeros a recintos hoteleros durante este 2015.
Es por ello que ante la fuerte disminución de turistas durante el invierno, principalmente esquiadores y andinistas, el Consejo Regional del Turismo (Coretur) junto con los gremios del comercio y el turismo lacustre, que ven en la ausencia de los esquiadores la causa de esta merma, quieren gestionar la eliminación de la restricción al volcán para reactivar la economía local. Esto ya que consideran que el volcán no reviste peligrosidad y temen que -de no revertirse la prohibición- el próximo invierno pueda repetirse este adverso escenario.
Ahora bien, es entendible la ansiedad de los empresarios y emprendedores que ven en el turismo la principal fuente de ingresos, sin embargo, la eliminación de la alerta amarilla que pesa sobre el volcán es una decisión que debe analizarse con información científica a la mano, trabajo que realizan los especialistas y técnicos del Sernageomin. Sólo de esa forma se garantizará la seguridad de los mismos turistas y emprendedores que quieren volver a disfrutar de la nieve en el Villarrica.