Diego Ahumada
"¿Qué trabajador va a querer estar en una faena que está expuesta a algún atentado? ¿Qué empresario va a querer invertir a sabiendas que le van a quemar los equipos? Nadie. Este es un negocio que si no se le pone atajo tiene vida útil corta". Es la advertencia que hace el gerente de la Asociación de Contratistas Forestales AG (Acoforag), René Muñoz, luego que en menos de 48 horas la maquinaria de dos empresas socias resultaran destruidas por ataques incendiarios en la Región, dejando millonarias pérdidas.
La Acoforag cuenta con 80 asociados entre las regiones del Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos, las que generan trabajo para 8 mil personas. Sin embargo, tras la quema de cuatro máquinas de la empresa Metsakone en Los Sauces y ocho vehículos y un container de la forestal Corte Alto en Lautaro, evalúan no prestar servicios en la zona de conflicto.
Sólo en 2015, la merma patrimonial de los contratistas forestales por atentados en La Araucanía asciende a $2.480 millones concentrando el 62% de los ataques en la zona sur. Luego sigue el Biobío con un 23% y Los Ríos con un 15%. En Los Lagos no se han registrado atentados contra asociados este año.
En total, en las regiones donde se concentra el conflicto, el perjuicio alcanza los $2.990 millones, es decir, un aumento cercano al 500% en comparación al 2014 ($638 millones).
Si bien son conscientes que aislarse de la comunas en conflicto no es la solución al problema, desde la Acoforag aseguran que "el daño sicológico de la gente que trabaja en las faenas es total". Advierten que les preocupa que los trabajadores comiencen a "defender su puesto de trabajo y que enfrenten a estos terroristas" por lo que no pretenden esperar una muerte para reaccionar.
"Nosotros la verdad es que no queremos exponer a nuestros trabajadores, por lo tanto lo más probable es que nos alejemos de la zona en conflicto", dijo Muñoz junto con recomendar a las autoridades, como medida de seguridad, incorporar tecnología, por ejemplo "globos aerostáticos con cámaras térmicas que transmitan información en tiempo real", para la protección de las faenas ya que incluso han sufrido atentados en predios con resguardo policial.
Entre el atentado de Los Sauces y en Lautaro, la asociación estima que alrededor de 100 trabajadores vieron afectada su fuente laboral. "Nosotros prestamos servicios a las empresas principales que son las dueñas de los bosques y nos vemos involucrados en esta situación que nos tiene realmente complicados", reclamó el gerente de los contratistas.
Seguros
La Acoforag reclama falta de apoyo en materia de seguridad por parte de las empresas forestales que contratan servicios acusando que en general ni siquiera informan a Carabineros de los lugares donde están realizando faenas.
"Los carabineros llegan cuando está todo quemado, entonces, las empresas debieran avisarles. Las empresas en el fondo nos dejan a nosotros el tema de la seguridad y ahí hay un gran vacío", declaró Muñoz.
En este sentido, recordó que "las compañías de seguros no cubren los actos terroristas" y que por tanto necesitan ser apoyados por los dueños de los bosques.
El miércoles a las 15 horas, la Acoforag tiene en agenda una reunión con el intendente regional, Andrés Jouannet, ocasión en que darán a conocer a la autoridad de Gobierno sus preocupaciones.
Multigremial
La presidenta de la Multigremial de La Araucanía, Angélica Tepper, lamentó pero dijo entender que los contratistas evalúen no prestar más servicios en la zona de conflicto.
"La gente que está trabajando no tiene culpa. Aquí es culpa del Estado que no ha podido encausar a la Región y buscar a los culpables y encarcelarlos y que hayan buenas condenas. Se entiende, pero sería una pérdida para la Región. Cualquier ser humano entiende lo que están viviendo estos contratistas forestales", recalcó la dirigente gremial.
Asimismo, criticó los últimos hechos de violencia y solicitó a los organismos del Estado actuar para terminar con lo que denominó un "espiral de violencia". "Se ha perdido la capacidad de asombro y lo peor es que pensemos que esto es normal, eso es terrible. Esto no es normal. Aquí los organismos del Estado, las policías, la inteligencia tienen que actuar para salir de esta espiral de violencia en que estamos metidos", subrayó Tepper.