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Suman un fiscal de alta complejidad al caso de trabajadora asesinada en Angol

BÚSQUEDA. La Fiscalía Regional difundió la fotografía e identidad de la principal sospechosa, la que se encuentra prófuga. Se indaga posible crimen pasional.
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Diego Ahumada

Con órdenes de detención vigentes tanto en la Policía de Investigaciones (PDI) como en Carabineros y ahora, con dos fiscales en la investigación, intentan cercar a las principales sospechosas del brutal asesinato de la trabajadora angolina, Nubia Lorena Astudillo Sáez (35).

La Fiscalía Regional optó por una medida nunca antes vista y difundió para conocimiento de la comunidad la fotografía de Nancy Susana Baeza Alarcón (43) y entregó las iniciales de su hija, M.A.C.B. (17) ambas requeridas por la justicia desde el martes por su presunta responsabilidad en los hechos.

Una de las líneas investigativas avanza por un posible crimen pasional, ya que la víctima habría tenido una relación con la ex pareja de la sospechosa, según confirmaron desde el Ministerio Público.

La noche del miércoles, la policía encontró la camioneta roja que supuestamente utilizaron las victimarias y que pertenece a la actual pareja de Baeza Alarcón, cuya orden de incautación se había emanado el martes. Precisamente, el vehículo fue encontrado en el domicilio del hijo del conviviente de la sospechosa, en el sector Barrio Industrial de Angol.

El caso produjo gran conmoción luego que el miércoles, en una quebrada en el sector San Luis a 20 kilómetros de Angol, un familiar encontró el cuerpo sin vida de Lorena, dejando al descubierto una escabrosa escena: la mujer estaba calcinada y amarrada.

Pasadas las 17 horas del día de ayer, el Servicio Médico Legal (SML) de Angol -que gracias a un peritaje dactiloscópico logró confirmar la identidad de la víctima- entregó el cuerpo a los familiares.

En la sede social de la junta vecinal de Huequén, el cuerpo fue velado. A las 18 horas de ayer más de 200 vecinos se aglomeraron en las afueras para despedir a la víctima y dar apoyo a los deudos.

Identidades

En tanto, el fiscal regional, Cristian Paredes, sumó a la Fiscalía de Alta Complejidad (Fiac) a la investigación. El fiscal adjunto jefe de Victoria, Luis Espinoza, liderará las indagatorias, trabajando en conjunto con la fiscal de Angol, Pamela Contreras, que hasta el miércoles dirigió sola la causa.

Fue ayer que el Ministerio Público dio a conocer las identidades de las sospechosas. Nancy Baeza y su hija, quienes desde el martes tienen una orden de detención en su contra por el delito de secuestro, figura que podría cambiar a secuestro con homicidio u homicidio calificado, de acuerdo a los antecedentes que entregue el pre informe de autopsia.

"La orden de detención tiene un alcance nacional y esperamos a la brevedad dar con el paradero de ellas y aprehenderlas y ponerlas a disposición de tribunales. Hacemos al mismo tiempo un llamado a la comunidad, para que en el evento que personas tengan alguna noticia del paradero de estas personas, los pongan a disposición directamente de la Fiscalía o de cualquiera de las policías", dijo el fiscal.

Paredes especificó que el equipo de fiscales "deberá abocarse a establecer a la brevedad posible cómo acontecieron estos hechos y desde luego la participación de él o los responsables de este ilícito. Esperamos en breve plazo poner a los responsables de estos hechos a disposición de tribunales para formalización y hacer la petición de cautelares que el caso amerita".

Cabe recordar que la orden de investigar de parte de la Fiscalía está en manos de la Policía de Investigaciones.

Familiares

"Espero que todos paguen", así de claro se refirió Juan Astudillo, uno los familiares de Lorena, al sentimiento de impotencia que afloró tras el macabro hallazgo.

Si bien la familia siente más tranquilidad ya que le podrán dar sepultura a su ser querido, esperan que caiga todo el peso de la ley sobre los responsables. "Con lo que le den (a los asesinos) no van a devolver a mi hermana pero yo creo en una justicia, algún día Dios, él va a hacer justicia", comentó el familiar de la víctima.

Por su parte, el padre de la malograda trabajadora, que comparte el mismo nombre que su hijo Juan, exigió justicia. "Pido justicia, ojalá que se haga justicia y paguen", dijo con profundo dolor.

El día de ayer, los familiares quisieron vivir el duelo tranquilos y evitaron entregar declaraciones durante el velatorio.

El caso

El día miércoles 28 de octubre, Lorena Astudillo Sáez, madre de dos hijos, salió de su hogar ubicado en la Villa Millaray de Angol, para recolectar y trozar leña en una faena de la Forestal Mininco. La mujer recibía los restos de los trabajos para luego venderlos y llevar el sustento a casa. Sin embargo, no volvió más.

Al día siguiente, los familiares interpusieron una denuncia por presunta desgracia en la Primera Comisaría de Carabineros de Angol. La joven madre había dejado su teléfono celular en casa.

No fue hasta el viernes 30 de octubre que la Fiscalía local de Angol, decidió derivar la causa a la Policía de Investigaciones. El Ministerio Público, manejaba antecedentes de denuncias por amenazas y agresiones que había realizado la víctima en contra de una mujer.

El domingo de esa misma semana, con un helicóptero la policía sobrevoló las comunas de Angol y Collipulli con la esperanza de dar con algunas pistas para esclarecer el caso, diligencias que en ese minuto no arrojaron resultados positivos.

Sin embargo, el día martes de esta semana en el sector San Luis, un lugareño encontró el camión compacto que conducía la víctima el día de su desaparición. El hallazgo fue pieza clave en la investigación ya que permitió acotar el rango de la búsqueda. Desde el vehículo la PDI levantó muestras de sangre y cabello.

El miércoles y a cuatro kilómetros del hallazgo del vehículo de carga de Lorena, familiares que apoyan la búsqueda liderada por el Ejército y el Gope de Carabineros, encontraron una huella de vidrios, la que siguieron hasta encontrar el cuerpo calcinado en una quebrada.

Siete días estuvo desaparecida la vecina angolina hasta ser encontrada por sus propios familiares,