Atacantes de California tenían 1.600 balas cuando fueron abatidos
EE.UU. Viajes a Medio Oriente y contactos con extremistas hacen sospechar de terrorismo.
El matrimonio que masacró a 14 personas en un centro de discapacitados de San Bernardino, California (EE.UU.), disparó hasta 75 cartuchos de fusil en el ataque, dejó tres bombas caseras vinculadas con un dispositivo de control remoto que aparentemente falló, y tenía más de 1.600 balas cuando fue abatido en su camioneta deportiva, detalló la policía.
En su vivienda había 12 bombas caseras, herramientas para hacer más explosivos de ese tipo, y más de tres mil cartuchos adicionales de municiones, dijo Jarrod Burguan, jefe policial, en un lúgubre inventario a la mañana siguiente de la matanza que dejó entrever que el baño de sangre del miércoles podría haber sido mucho peor.
Vestidos con ropa negra para ataques estratégicos y blandiendo fusiles de asalto, Syed Rizwan Farook, un inspector de restaurantes de 28 años, y su esposa, Tashfin Malik, de 27, abrieron fuego en el recinto poco después de que él se fue de un banquete en el que había estado participando.
Cuatro horas después y a algunos kilómetros de distancia, la pareja fue acribillada de muerte en una intensa balacera con la policía. Durante el tiroteo ambos hicieron 76 disparos, mientras que los agentes les arrojaron unas 380 balas.