Grupo armado quema cuatro camiones con bombas molotov
ATENTADO. A cinco kilómetros de Temuco, encapuchados amenazaron, maniataron a un conductor y dejaron pancarta alusiva al conflicto.
Un nuevo atentado se registró en La Araucanía. A las 12:30 horas de ayer un grupo de encapuchados armados ingresó al aparcadero de la empresa transportista Cavalieri, ubicada a cinco kilómetros al norte del radio urbano de Temuco, para incendiar cuatro camiones y una rampa.
Esta vez los delincuentes atacaron vehículos en el kilómetro 659 de la Ruta 5 Sur, que trabajaban para empresas como CCU y Lider.
Los cuatro sujetos maniataron a un conductor, al que amenazaron con "armas de alto poder de fuego", según precisó el fiscal Juan Pablo Gerli. Luego, rociaron con acelerante las cabinas de los vehículos de carga y procedieron a arrojar bombas molotov en su interior, iniciando así el fuego.
"El conductor se encontraba en el lugar, en el camión, y de repente fue sorprendido por dos sujetos que lo apuntaron y así lo obligaron a bajarse y lo maniataron", relató el persecutor penal.
Con las máquinas en combustión, los hampones se retiraron de la escena abandonando una pancarta negra con distintas frases escritas en letras blancas. Al centro, la figura de un cultrún y una flecha ingresando de izquierda a derecha.
"Fuera la oligarquía terrateniente"; "¿Paz por represión? Justicia mapuche"; "Libertad a Celestino, Matías vive"; "No más políticos mafiosos interviniendo el proceso de lucha". Son las frases que se apreciaron en el manuscrito que fue levantado por la policía.
El prefecto de Cautín, coronel de Carabineros Óscar Oettinger, confirmó en el sitio del suceso que "hay una pancarta alusiva a la temática mapuche que también está siendo periciada por personal nuestro".
Al momento del ataque, el recinto privado no contaba con guardia de seguridad. "Vamos a hacer un análisis de todas las medidas de seguridad que tiene el recinto,", agregó el uniformado.
Pese a la intensa búsqueda que desató la policía, no se registraron detenidos.
Inseguridad
Carlos Ribet, de 54 años de edad, es conductor de acarreo de Transportes Cavalieri desde hace dos años, pero ha pasado toda su vida detrás de un volante. "Un colega nos dijo que rociaron otras máquinas con bencina y no prendieron", dijo nervioso en plena madrugada, rodeado de otros empleados que llegaron a solidarizar y saber qué pasaría con sus puestos de trabajo.
"Ya el hecho de pasar por la zona roja en la noche es complicado. Este año le dispararon a uno de los camiones de la empresa. La falta de seguridad es tremenda. Nosotros como conductores habíamos comentado que estábamos bastante expuestos al tema de los ataques porque estamos a orilla de carretera", manifestó Ribet.
El conductor cree que "hace tiempo que se perdió el control" y llamó a la Presidenta Michelle Bachelet a viajar a la Región para conocer en terreno los problemas de seguridad a los que se sienten expuestos.
Poder Judicial
Las críticas, tanto de los camioneros como de la Asociación de Víctimas de la Violencia Rural (Avvru), apuntan al Poder Judicial. Esto, ya que el jueves recién pasado dos comuneros mapuches fueron condenados a penas que cumplirán en libertad vigilada, precisamente por un atentado contra dos camiones ocurrido el 2 de octubre de 2014 en la Ruta 5 Sur, a la altura de la localidad de Pailahueque, en Ercilla.
"Los camioneros siempre hemos dicho que los jueces aquí no están haciendo su trabajo y ellos han mandado señales muy débiles, por lo tanto, ésta es una respuesta a esas señales", comentó el presidente de la Federación de Dueños de Camiones del Sur (Fedesur), José Villagrán.
El mismo dirigente confirmó que están solicitando una audiencia con el presidente de la Corte Suprema, Sergio Muñoz, para que las causas relacionadas a la violencia rural se trasladen de Región. Si esto no es posible, el transportista aseguró que "vamos a ver la forma de poder presionar y si es necesario vamos a llamar a todos los camioneros de Arica a Punta Arenas a que salgamos a las calles para manifestarnos".
Para el presidente de la Avvru, Alejo Apraiz, los hechos son "absolutamente repudiables".
"Con la capacidad que tienen los jueces de no poder sancionar con las penas que corresponden, están dando mano libre y abierta para que estos delincuentes o terroristas, hagan y cometan estos hechos de violencia", denunció el directivo.
Asimismo, agregó que las fuentes de trabajo se ven afectadas y son las secuelas sicológicas que deja un hecho de violencia en la víctima lo más complejo de la situación.
"Ese conductor va a pensarlo nuevamente si se sube a un camión o no. Están coartando su libertad de trabajo y al transportista su emprendimiento. Quemarle cuatro camiones es una pérdida millonaria. Hago un llamado a las autoridades a que finalmente se den cuenta que esto es terrorismo y atacar el problema de esa forma", subrayó Apraiz.
El ministro del Interior, Jorge Burgos, lamentó el ataque incendiario y calificó el hecho como "gravísimo". "Habíamos logrado, durante casi 60 días, controlar la quema de camiones, estábamos muy contentos por eso", dijo la autoridad.
A juicio de Burgos, los desconocidos que protagonizaron el incidente actuaron de manera organizada. "Los primeros datos hablan de un grupo operativo de cinco a seis personas, con rostros cubiertos y con un grado de sincronización bien delicado", aseveró el ministro a la radio Bío Bío.
Desde la Intendencia Regional se estudia la presentación de una querella.