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Los perros practican actos de generosidad entre ellos

EXPERIMENTO. Científicos encontraron que los canes tienen un comportamiento prosocial con sus pares.
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Mabel González

En comparación con gran parte del reino animal, la capacidad humana para cooperar es algo bastante especial. Colaborar con otros requiere de cierto nivel de comportamiento prosocial. Esto significa que la ayuda se entrega a otros a cambio de ningún beneficio personal directo.

Ahora, científicos austriacos observaron este tipo de acciones entre los perros.

La llamada "prosocialidad" ya se había demostrado en animales estrechamente relacionados con los seres humanos, como los primates. En otras especies, el fenómeno hasta ahora solo se había estudiado de forma experimental en ratas y urracas.

Otros trabajos encontraron rasgos de comportamiento prosocial en los perros hacia los humanos. Sin embargo, no quedó claro si los canes estaban simplemente reaccionando a la comunicación de los humanos y siendo "obedientes", o si estaban realmente exhibiendo una conducta prosocial.

"Los perros y sus parientes más cercanos, los lobos, presentan un comportamiento social y cooperativo, por lo que hay motivos para suponer que estos animales también se comportan prosocialmente con sus congéneres", explicó el director de la investigación, Friederike Range, del Instituto de Investigación Messerli.

Range y sus colegas Mylene Quervel-Chaumette, Rachel Dale y Sarah Marshall-Pescini examinaron 16 perros para probar su voluntad de beneficiar a otros canes, fueran congéneres cercanos o lejanos.

Los académicos indagaron el comportamiento prosocial de los canes con un experimento en que dos perros fueron puestos en unas jaulas ubicadas una al lado de la otra. Uno de los animales, llamado el "perro donante", tenía la capacidad de extender una bandeja al "perro receptor", empleando su boca para tirar de una cadena.

Se usaron dos bandejas. Una de ellas contenía un premio, mientras que la otra estaba vacía. Los perros habían sido entrenados durante varias semanas para entender cómo funcionaba este sistema. Asimismo, el animal donante sabía que no recibiría nada a cambio si le daba el premio a su compañero canino.

Los profesionales encontraron que los perros, en ausencia de cualquier motivo ulterior, efectivamente presentan un comportamiento prosocial, al dar voluntariamente alimentos a otros pares. Sin embargo, se detectó un trato preferente al donar a sus compañeros más conocidos.

2 bandejas utilizaron los científicos para realizar sus pruebas: una contenía un premio y la otra estaba vacía.