Un sorprendente y espectacular empate 4-4 protagonizaron ayer, en el Estadio Elías Figueroa Brander de Valparaíso, Coquimbo Unido y Deportes Temuco que, estando en los opuestos de la tabla de colocaciones, aquello no fue factor al momento de definir quién ganaba este duelo por la fecha 10 del torneo de Primera B, visto por 533 personas controladas.
Parecía jornada tranquila para los del técnico Luis Landeros, cuando en los 14' abrió la cuenta Sergio Comba, al empujar el balón al fondo del pórtico coquimbano, tras un estupendo descuelgue de Francisco Piña.
Sin embargo, el juego atildado de esos primeros instantes se fue diluyendo en el Histórico, afectados por un juego nada preciso, pero sí de mucho empuje de parte de los adiestrados por el temuquense DT, Juan José Ribera.
Así, en una fortuita acción dentro del área albiverde, la pelota rebotó en la mano de Orlando Gutiérrez, lo que llevó al juez Omar Oporto a sancionar penal, que tradujo en gol Ángel Rojas, en los 19' de la etapa inicial.
Desnivel local
Y para dicha de los "locales" porteños de Coquimbo, en los 29', Juan Manuel Tévez pilló desprotegida a la defensa temuquense, y por el flanco del marcador Jaime Soto se despachó un remate bajo que significó el parcial 2-1, cuando el reloj aún no marcaba los 30'.
El juego, si bien mostraba a un Temuco ordenado en sus líneas, también develaba que unos pocos estaban afinados en la onda ofensiva. Esos eran Piña y Comba, que en los 45'+3' del primer tiempo repitieron la fórmula de la apertura para irse al descanso 2-2.
Eso, en parte, le ponía justicia al marcador, aunque con la gran salvedad que los dueños de casa jugaban con diez hombres, desde el minuto 22', tras tarjeta roja de Rodrigo Araya, por un fuerte codazo a Cris Martínez, que ameritó expulsión.
Y si se creyó que esa diferencia numérica se ratificaría en el terreno, en el segundo tiempo el duelo tendría más sorpresas, cuando en los 58' -y con rebote en la defensa de Temuco de por medio-, Leonardo Monje se matriculó con el desnivel a favor de Coquimbo.
Como las intenciones ofensivas no estaban para finezas en el súper líder, un nuevo lanzamiento libre, esta vez del defensa albiverde, Miguel Aceval, se anidó en el pórtico defendido por Guillermo Orellana, en los 78', para el 3-3.
Cuando los cerca de 300 seguidores de Deportes Temuco festejaron a rabiar, en coordinación coreográfica con la banca del Histórico, la tercera anotación personal de Sergio Comba (llegó a 13 en el campeonato), rubricando en los 83' el 4-3 se creyó que el triunfo era fiel reflejo al peso específico del candidato número uno al ascenso a Primera, que -además- desde los 79' jugaban con dos más, debido a la expulsión directa de Franco Seida, a raíz de un puñetazo sobre un golpeado Cris Martínez.
Honor colista
No obstante, el pundonor y amor propio de los de Coquimbo llevó a una patriada a Juan Manuel Tévez, quien a 10 del final fue enganchado por Soto dentro del área, lo que significó un nuevo penal y la conversión, para el 4-4 final, de Ángel Rojas.
"Fue un premio a la entrega de este equipo. La semana ya fue rara, cuando cerca de 500 hinchas fueron al entrenamiento a alentarnos y eso se vio reflejado en este partido. Nunca bajamos los brazos y, jugando con nueve, terminamos empatándole al puntero", valoró lo hecho por sus dirigidos el DT de los coquimbanos, Juan José Ribera.
"Nos complicaron porque ellos juegan muy desordenados y eso nos incomodó en todo el partido. No jugamos bien, pero también nos complicaron con un juego muy a los pelotazos", comentó -del otro lado- el volante de quite de Deportes Temuco, Sebastián Díaz.
A tal punto caló hondo el empate, con superioridad numérica ante el colista (a pesar de la expulsión -en los 94'- de Miguel Aceval, por doble amarilla), en el camarín de Deportes Temuco se quedaron en un largo diálogo el técnico del equipo, Luis Landeros, con los máximos referentes directivos del club: Marcelo Salas y Raúl Jélvez.
Con caras largas y todo, Deportes Temuco, de todas formas quedó a 11 puntos de distancia del segundo, Curicó Unido, el que este lunes podría acortar esa diferencia a 8, siempre que supere (como local) a Magallanes.