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Desconocidos dejan lienzo contra el obispo Stegmeier tras atentado a capilla en Cañete

DECLARACIONES. Religioso descartó presentar una denuncia ante el Ministerio Público.
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Diego Ahumada

"Es claro que nuestras comunidades cristianas están sufriendo persecución religiosa a causa de Jesucristo". Fueron las palabras del obispo de la Diócesis de Villarrica, Francisco Javier Stegmeier, luego de ser aludido en un lienzo abandonado por desconocidos que atentaron contra una capilla en Cañete, Región del Biobío.

Y es que los ataques contra templos religiosos -que suman cinco en lo que va del año en La Araucanía- han superado la frontera y ayer se registró el primero en la región vecina.

"Obispo Stegmeier cómplice de la represión del Estado, responsable de la violencia hacia la Iglesia. Libertad a los presos P. (políticos) mapuche", decía el escrito.

El religioso no evitó referirse al tema y pese a lo directa de la mención, a su juicio, el lienzo "es expresión del pensamiento en relación a algunas instituciones, en este caso, el Estado de Chile y la Iglesia Católica. Estoy convencido que no es un ataque personal ni una amenaza hacia alguien en concreto", dijo.

La consigna no la interpretó como una amenaza y a su vez, descartó presentar una denuncia ante el Ministerio Público. "Hasta el momento, nunca he recibido amenazas de nadie. Y si las hubiese, cosa que estoy seguro nunca acontecerá, no presentaré denuncia", sostuvo monseñor.

Por último, lamentó las sucesivas quemas de templos en la Región, llamó a confiar en Jesucristo y orar por las víctimas y victimarios, además de "manifestar nuestra comunión en la caridad y en la cruz con nuestros hermanos que sufren la pérdida de su templo, signo de su fe".

"Podemos constatar que posiblemente en un par de meses han sufrido ataques incendiarios más templos que a lo largo de toda la historia de Chile (...) Jesucristo seguirá siendo nuestra fortaleza, alegría y esperanza. Él también nos capacita para siempre perdonar y responder con el bien al que nos hace daño", finalizó Stegmeier.

Gobierno

En medio de una reunión de intendentes que se desarrolló ayer en Puerto Montt, el intendente de La Araucanía, Andrés Jouannet, entregó a El Austral sus apreciaciones del hecho.

La autoridad aseguró que quienes atentan contra la Iglesia, a su entender, lo hacen contra "la fe, el corazón del pueblo mapuche y del mundo cristiano".

Asimismo, salió en defensa de monseñor Stegmeier, calificando de grave el testimonio hallado en Cañete.

"Esto de descalificar a un prelado nuestro, al obispo Stegmeier, nos parece extremadamente grave. La Iglesia Católica ha tenido un gran rol en la formación de la nación y ha tenido un valor muy importante en La Araucanía", expresó Jouannet.

En ese sentido, destacó el trabajo del aludido religioso con las comunidades religiosas y mapuches en la Región. "Es una persona muy querida porque regularmente está trabajando en todas las comunidades cristianas de base y también en el mundo mapuche y por tanto no sólo rechazar y condenar la quema de esta capilla sino también este rayado", enfatizó.

Por último, reiteró el compromiso del Gobierno, el sector privado y voluntarios de diversos credos por la reconstrucción de 12 iglesias destruidas en ataques incendiarios desde 2014 a la fecha.

"Vamos a reconstruir todas las capillas y templos que haya que reconstruir porque lo hacen las mismas comunidades, lo van a hacer los mismos jóvenes cristianos, católicos y por tanto a nosotros es muy difícil que nos puedan golpear quemando nuestros templos porque vamos a reconstruirlos", sentenció Jouannet.

El atentado

En Cañete, desconocidos quemaron el templo católico propiedad de la parroquia Nuestra Señora del Carmen de esa comuna, ubicada en el sector de Antiquina, en Arauco. Tras el ataque, abandonaron el lienzo contra el obispo de Villarrica.

La situación quedó al descubierto cerca de las 2 de la madrugada de ayer, cuando un voluntario de bomberos que reside en la zona se percató de las llamas.

Hay que consignar que la seguidilla de ataques incendiarios es posterior al desalojo del seminario San Fidel -ubicado en Padre Las Casas- el que fue ordenado desde la Diócesis de Villarrica; y la detención de 11 comuneros por el caso Luchsigner-Mackay.

"Esto de descalificar a un prelado nuestro, al obispo Stegmeier nos parece extremadamente grave".

Andrés Jouannet,, intendente

Gobierno presentó querella por atentado a forestal en Victoria

ESCRITO. Se ingresó por el delito de incendio común, pese a que se anunció invocar Ley de Seguridad del Estado.
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Pese a que el intendente regional Andrés Jouannet había anunciado invocar la Ley de Seguridad del Estado en la querella, finalmente el Gobierno presentó el escrito por el delito de incendio común, como respuesta al atentado incendiario que destruyó dos retroexcavadoras y un camión cargado con 4 mil litros de combustible.

La acción legal en contra quienes resulten responsables, fue presentada en el Juzgado de Garantía de Victoria.

El ataque

Pasadas las 21 horas de este domingo, un grupo de desconocidos ingresó al predio Santa Inés, donde la empresa forestal El Laurel explota un bosque de pino en 89 hectáreas propiedad de la forestal Masisa, a la altura del kilómetro 32 de la ruta CH-181, la que une Victoria con Curacautín.

Los hechores, aprovecharon el descuido del nochero para incendiar la maquinaria y luego darse a la fuga, no sin antes abandonar una caja con consignas por la liberación de los presos mapuches y la expulsión de las forestales.

Según la empresa afectada, las labores comenzaron el 1 de este mes y quedarían al menos 45 días de faena por lo cual, el fiscal jefe de Victoria, César Schibar, decretó una medida de protección policial permanente mientras terminan los trabajos.

El hecho fue repudiado por la Asociación de Contratistas Forestales, Acoforag, que invitaron a las autoridades a coordinarse con el gremio para evitar atentados.