"Temuco era uno de los sitios que más nos gustaba por el uso que se le dará y su madera"
El arquitecto ejecutivo de la obra "El amor de Chile", el argentino Sebastián Mallea, quien colaboró con el creador de la escultura, Cristián Undurraga, explica cómo fue el proceso de creación de la escultura que llegará a Temuco y cuánto tiempo tomó tanto la elaboración como su desarme y posterior armado.
El profesional también indicó que Temuco era una de las ciudades preferidas para instalar la obra, pero que por su naturaleza lluviosa deberán realizar algunas modificaciones a este proyecto.
-¿Qué le parece que se lo adjudicó Temuco?
-Nos parece muy bueno. Era uno de los sitios que más nos gustaba como arquitectos, uno por el significado que tiene que esté en Temuco, por el tema de la industria de la madera. También por el uso que se le quiere dar, que es para las comunidades precolombinas actuales y creíamos que era un lindo símbolo ponerlo en Temuco y además tenían un sitio muy bueno, un terreno muy bueno al lado del cerro (Ñielol) junto a otros edificios de carácter público que, creemos, pueden armar un espacio urbano interesante para la ciudad.
-¿Cuánto tiempo tomó crear el diseño y fabricarlo?
-Esto fue un concurso público abierto, tuvimos la suerte de ganar el concurso y a partir de eso desarrollamos el proyecto, pero ya estábamos bastante encima de la fecha de inauguración, así que nos llevó en total, entre proyecto y construcción, un año y medio. (...) Tuvimos que hacer un sistema de ir entregando por etapas, entonces a medida que iban construyendo las fundaciones, nosotros le íbamos diseñando los detalles.
-¿Cómo se inspiraron para crear esta obra?
-La expo hablaba de los alimentos en el mundo en general y cada país tenía que hacer una interpretación de la situación de los alimentos en su lugar. Acá en el pabellón de Chile lo que quisimos mostrar un poco es toda la cadena de afectos que hay detrás de la producción de alimentos y cómo distintos individuos intervienen en esa cadena. Y, cuando hay más amor o más voluntad de hacer las cosas bien, al final los frutos son mejores (...) Sobre todo se trató de hacer hincapié en los pequeños emprendedores y productores (...) Y por otra parte, el amor de Chile estaba plasmado en cómo Chile le abría los brazos al mundo ofreciéndole una sola larga mesa donde la gente podía degustar sus productos.
-¿Qué tan difícil es su desarme y rearmado?
-Construir un edificio que durara 6 meses y después botarlo, como la mayoría de los edificios de la Expo, nos parecía que era poco sustentable. Desde el primer día pensamos en un edificio que se pudiera armar y desarmar, como un Mecano, y que está muy relacionado incluso a las casas del sur que muchas veces las trasladan en las mingas, en Chiloé.
-¿Cuánto se demora en armar?
-Desde que terminó la Expo hasta el mes pasado, que terminaron de demoler las fundaciones. Desde octubre hasta mayo. Yo creo que armar va a demorar un poco más. Primero vamos a tener que diseñar unas fundaciones específicas para ese suelo y vamos a tener que hacer algunas adaptaciones para cumplir con todas las normativas.
-¿Qué modificaciones se tendrían que hacer?
-Por ejemplo allá el edificio tenía que estar seis meses nada más, entonces el tema de la lluvia no era tan importante. Acá vamos a tener que estudiar bien una techumbre para que no venga a dar problemas en el largo plazo. Después hay que hacer una revisión de la estructura por el tema sísmico. Si bien el proyecto, cuando arrancó en Chile, lo revisó un calculista chileno, al final todas las aprobaciones legales se tenían que hacer en Italia, entonces la última parte del diseño de estructura lo vieron ingenieros italianos. Ahora hay que hacer que esto lo revise un ingeniero local.
-¿Cuánta madera requirió la construcción?
-Tengo entendido que son unos 800 metros cúbicos en la estructura y después se sumaron pisos, revestimiento de paredes. Eso debe estar entre 800 y 1.000 m3. La madera de la estructura principal es de (Forestal) Arauco. Ellos al principio del proyecto colaboraron activamente, hicieron algunas donaciones para poder financiarlo y conseguimos que colaboraran con madera. Eso nos ayudó muchísimo a reducir los costos.
"El "Amor de Chile" estaba plasmado en cómo Chile le abría los brazos al mundo ofreciéndole una sola larga mesa donde la gente podía degustar sus productos". "Creíamos que era un lindo símbolo ponerlo en Temuco y además tenían un sitio muy bueno, un terreno muy bueno al lado del cerro (Ñielol)".
Otras obras chilenas de los creadores
La empresa Undurraga Devés Arquitectos, donde colabora Sebastián Mallea, ha sido responsable de otros trabajos destacados a lo largo del país, como el Centro Cultural Palacio La Moneda, ubicado en la parte posterior a la fachada de la casa presidencial chilena. También crearon el Museo de Artes Visuales y el Centro Histórico Violeta Parra, ambas de la capital nacional. En el sur, este equipo de profesionales ideó el Museo de Arte Contemporáneo de Valdivia, que depende de la Universidad Austral de Chile, uno de sus trabajos más antiguos, y en La Araucanía fueron los creadores de un proyecto la Casa del Lago, construida en 2004 a orillas del lago Colico.
1.000 metros cúbicos
de madera se utilizaron en esta creación, gracias al aporte de la Forestal Arauco. 7 meses
puede demorar el armado de la obra "El amor de Chile" en Temuco, a lo que se añadirá un techo.
Un año y medio
tomó el diseño y luego la construcción de esta obra hecha un 80% de madera.