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"Las universidades estatales deben ser gratis para todos"

MITO URBANO. "Dicen que el Cruch es un cartel económico y que ahí se cocinan los recursos de la educación superior en Chile, eso no es cierto, eso es un mito urbano", expresa Bravo.
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En los próximos días el Ejecutivo enviará al Congreso el proyecto de ley de la reforma a la educación superior. El ambiente está tenso, todos los actores del sector saben que será una discusión larga y muy difícil, ya que hay muchos intereses de diversos sectores en juego. De hecho los estudiantes ya lo vienen anunciando hace tiempo con movilizaciones y marchas, donde piden que también se incluyan sus propuestas.

Frente a este escenario el rector de la Universidad de La Frontera, Sergio Bravo, quien cumple su cuarto periodo consecutivo al mando de esa casa de estudios, entrega más antecedentes sobre los alcances de la nueva normativa. ¿Qué espera el Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas (Cruch) que agrupa a las instituciones estatales?. El financiamiento para las privadas y el nuevo trato que se pide para las públicas y también el tema de la gratuidad universal donde afirma que el mal momento económico que está pasando el país, le pasará factura a esta petición.

- El fin al lucro y la calidad de la educación, ¿Cómo se abordan en el proyecto?

- La reforma incluye conceptos bien básicos, uno de ellos tiene que ver con no más lucro a través de la Superintendencia específica de educación superior que va a controlar tanto las universidades como los institutos y se termina con esas mañas que habían para sacar recursos de algunas instituciones. Además está la acreditación obligatoria para asegurar la calidad y la creación de un Consejo de Calidad distinto al que tenemos actualmente.

- Hasta ahora ¿Están conformes con el proyecto de reforma?

- Participamos en la discusión pero no en la elaboración. Pero en lo que hay hasta ahora se reflejan peticiones que teníamos hace tiempo en el tema de la calidad. Ahora habrá alguna gente que quiere más libertad y que el mercado decida, yo no estoy de acuerdo con eso. Con la educación no se puede jugar es un bien estratégico del país, particularmente en una sociedad donde el conocimiento genera oportunidades en la vida. Lamentablemente Chile erró el camino en este ámbito, dejó demasiado libertinaje, y creo que el proyecto nos resguarda de tener una educación más seria en el futuro.

- ¿Qué pasa con el Consejo de Rectores en la nueva normativa?

- En el proyecto el Cruch no se acaba, y probablemente cumplirá otras responsabilidades y tendrá que abrirse a las universidades privadas. Lo que pasa es que hay instituciones que piensan que en el Cruch hay plata y por eso quieren entrar. Dicen que el Cruch es un cartel económico y que ahí se cocinan los recursos de la educación superior en Chile, eso no es cierto, eso es un mito urbano.

- Si bien el Gobierno le otorgó fondos a la Universidad Autónoma para la gratuidad, el Cruch rechazó su petición para integrar el proceso de selección vía PSU, ¿No es una contradicción?

- La Universidad Autónoma tiene un certificado del Ministerio de Educación, en términos que no lucra y está acreditada por 4 años, por lo que postuló y el Ministerio dijo que cumple con la ley y le otorgó la gratuidad. En cambio en el Consejo de Rectores se estimó que no hay claridad absoluta que eso sea así y el pleno de los integrantes votó y rechazó el ingreso de la UA. La desconfianza tiene que ver con el lucro ya que no fue suficiente para el Consejo que la Universidad Autónoma presentara un certificado que cumple con la ley.

- Esa fue la respuesta oficial del Cruch, pero ¿Usted qué opina?

- En lo personal yo no estoy de acuerdo con ese rechazo, porque nosotros definimos que si cumplía con la ley debían entrar al proceso de selección PSU. Ya que se critica que las universidades que están fuera del Cruch no pueden acreditar sus procesos de selección, siempre hubo desconfianza de eso, incluso entre las mismas universidades del Consejo, de hecho yo pedí una auditoría por ese tema.

- ¿Con la reforma eso cambia?

- La nueva ley trae un proceso de selección para todas las universidades y lo haría el Estado a través del Departamento de Evaluación, Medición y Registro Educacional (Demre) lo que ha tensionado las relaciones del Cruch con el Estado, pero eso se analizará y discutirá en el Congreso finalmente.

- ¿Hay separación entre estatales y privadas en la reforma?

- Se establece un capítulo especial para las estatales y eso generó el enojo de las que son privadas. Ya que hasta ahora el Estado les entregaba los mismos recursos sin ser servicios públicos y, por lo tanto, sin estar sometidas al control público que ejerce por ejemplo la Contraloría. Nosotros no pedimos que el Estado deje de entregar recursos a las privadas, sino que debe tener un trato distinto con las públicas, una conversación separada y que se fijen deberes y derechos. Lo que tenemos hoy en día es que estamos compitiendo en concursos nacionales o regionales por fondos para hacer funciones que deberían ser propias de nuestras universidades y entonces perdemos el foco de nuestra misión.

- ¿En la Región hubo universidades que perdieron ese foco que usted menciona?

- Por ejemplo instituciones que generaron 100 cursos conducentes a títulos para ingresar recursos, pero egresaron profesionales que probablemente no estaban de acuerdo a los estándares que debiera tener una universidad. Aquí se dio con la formación de profesores, en esta Región ocurrió eso porque aprovecharon una oportunidad de mercado, no queremos que eso se vuelva a repetir. No se puede formar un profesor con clases los viernes en la tarde y el sábado en la mañana, muchas universidades cometieron ese error, que ahora se está pagando caro porque esos docentes están formando generaciones de estudiantes, entonces con la educación no se puede jugar.

- ¿En ese sentido las universidades estatales de regiones están consideradas?

- En el país el 70 por ciento de la población está en Santiago y el 30 por ciento en el resto del país, por lo que no podemos competir con las universidades de la Región Metropolitana. Entonces uno desearía que el Estado nos entregue ciertos recursos para atender algunas labores propias de nuestros territorios. A veces se critica que la Ufro no se preocupa de los problemas de La Araucanía, bueno porque no nos proporcionan los recursos. Sería deseable un trato diferente y esperamos que en el Congreso esto cambie con alguna indicación

- ¿Qué opina de la gratuidad?

- Las universidades estatales deben ser gratis para todos, como existe en cualquier parte del mundo y eso es lo que hemos estado pidiendo hace muchos años. Sin embargo instalar una ley, cuando ha existido financiamiento para públicas y privadas, será muy difícil separar esas instituciones. Yo tengo claridad absoluta que a Chile le va a costar mucho tener gratuidad universal, porque no tiene recursos. Me explico, en el mundo existe gratuidad pero para los alumnos que estudian en universidades estatales con diferentes porcentajes según la realidad de cada país. En Chile los estudiantes en instituciones públicas son el 15%, y el 85% es privado. En ese sentido yo creo que la reforma traerá un proceso paulatino de crecimiento de la gratuidad y espero que en un corto plazo lleguemos al séptimo decil, pero seamos sensatos con un cobre a 2 dólares la libra, no se puede salir a pedir lo que no existe, estoy convencido que Chile necesita esta reforma pero no para hacer pedazos al país.

- ¿Qué espera usted de la reforma, considerando que falta la discusión en el Congreso?

- Si nos vamos a gastar una fortuna y no se hacen los cambios, es sólo un gastadero de plata. Por ejemplo todos sabemos que la formación profesional en Chile está fuera de contexto, es rígida en un mundo que es flexible. Por eso espero que la reforma traiga el Marco Nacional de Cualitativo como elemento de calidad o de pertinencia de la formación profesional. Ahora la discusión en el Congreso de la reforma será difícil porque hay muchos intereses privados, además de ideologías de todo tipo.

- ¿Cuáles podrían ser los puntos que generan más discusión en el Congreso?

- El tema de la acreditación obligatoria, ahí habrá mucha controversia. Sobre el lucro, espero que salga una muy buena Superintendencia, además de la Subsecretaría y el Consejo de Calidad como pilares. Ahora que las universidades deban ser complejas también generara discusión, en el sentido que deben tener docencia, investigación y vincularse con su entorno.

- ¿Actualmente la Ufro está tomada, qué sucederá con el semestre?

- El Consejo Académico tiene el mandato que las clases se deben terminar el 1 de julio, y eso se mantiene y habrá que evaluarlo ese día. No queremos atrasar el semestre ni el año. Y en ese sentido digo que la toma de espacios es irracional ya que por primera vez tenemos el 70 por ciento de los jóvenes de primero estudiando con gratuidad por 5 años, si a ellos producto de las tomas y paros se les alarga la carrera más allá de ese plazo tendrán que pagar. Si no aprovechan la ventaja de salir profesionales y no endeudados con el Estado, es porque no se dan cuenta y no reflexionan sobre esta situación.

- A través de la Federación de Estudiantes los jóvenes pidieron participación, ¿Cuál es la respuesta a ese documento?

- Entregaron un pliego de peticiones que lo di a conocer a toda la comunidad académica, pero que no hemos tenido tiempo de discutir los puntos ya que la universidad está tomada. La reforma contempla participación de los estudiantes en los distintos órganos colegiados de la universidad. Y las instituciones tendremos que rehacer nuestros estatutos y darle cabida a lo que establezca la nueva ley, no se puede ir en contra de eso, por eso no tienen sentido estas movilizaciones. Además hay una gran cantidad de estudiantes que están tratando de hacer actividad académica normal a pesar de las tomas.

- ¿Habrá sanciones por la ocupación?

- La Federación validó la toma, a pesar que ellos mismos firmaron un cuadro normativo donde se definen normas y derechos de los estudiantes, allí se aprobó el derecho a huelga bajo ciertas circunstancias y también se votó que la toma se sanciona, si existen daños materiales al mobiliario público, lo anterior a través del respectivo sumario que se deberá instruir de ocurrir esta situación.

"Nosotros no pedimos que el Estado deje de entregar recursos a las privadas, sino que debe tener un trato distinto con las públicas, una conversación separada". "Yo tengo claridad absoluta que a Chile le va a costar mucho tener gratuidad universal, porque no tiene recursos".