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Deportes Temuco sufre una injusta derrota ante la UC

FÚTBOL. El cuadro albiverde creció y le creó problemas a los cruzados. El duelo se desequilibró con un autogol.
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Hizo un esfuerzo grande y creció en lo futbolístico. Pese al alza que exhibió y a la lucha que dio en el Estadio San Carlos de Apoquindo, Deportes Temuco cayó anoche por 1-2 ante Universidad Católica.

El resultado dolió por la forma en que se dio y por lo que significó en lo estadístico. La derrota instaló al cuadro albiverde en el decimocuarto puesto de la tabla acumulada de Primera División con 24 puntos y lo dejó a cuatro unidades del colista Cobresal (20).

La diferencia entre albiverdes y nortinos se acortó en un punto (hasta antes de la octava fecha del Clausura estaban separados por cinco unidades) y mantuvo al Pije en zona de peligro de descenso.

Planteamiento

En su partido de ayer, Deportes Temuco creció con respecto a sus partidos anteriores. Con marca, despliegue físico y con la conducción de Cristián Canío se las ingenió para complicar a Universidad Católica.

Tantos problemas le creó que ya a los 16' tuvo la oportunidad de abrir la cuenta a través de Francisco Piña. El extremo derecho enfrentó solo a Toselli y falló en su remate.

En su segunda chance de marcar, la visita se cobró revancha y no perdonó. A los 19' Canío atrapó un mal rechazo de la defensa cruzada y con un zurdazo impecable anotó el 1-0.

El gol le puso justicia a la cuenta y le permitió al cuadro albiverde manejar con mayor comodidad el partido.

El compromiso lo tenía bajo control hasta que Enzo Kalinski anotó el 1-1 al inicio del segundo lapso. El argentino avanzó por el centro de la cancha y con un remate de fuera del área batió al arquero Luis Marín.

Con la igualdad, con el cansancio que sintió Canío y la lesión que sufrió Cris Martínez, el panorama cambió y el Pije empezó a tener inconvenientes en el césped capitalino.

Esos factores y la presión que ejerció el cuadro cruzado se convirtieron en obstáculos serios y que complicaron su pasar en el césped.

Pese a todo sacaba adelante un resultado conveniente para sus pretensiones. Eso hasta el minuto 75 cuando llegó el infortunio para la visita. Tras un córner, Lucas Campana envió la pelota al arco de Marín y desequilibró un encuentro que, a la luz de lo que ocurrió en la cancha, merecía otro resultado.

"Nos costó caro una jugada fortuita. Si el partido hubiera terminado en empate o en un triunfo nuestro, nadie habría dicho nada", expresó el volante Cristián Canío tras el compromiso.

"Lamentablemente nos quedamos con las manos vacías", agregó Canío.

Los albiverdes volverán a salir a la cancha el domingo 9 de abril. Ese día recibirán a O'Higgins de Rancagua.

El compromiso se disputará a las 12 horas en el Estadio Germán Becker y será válido por la novena fecha del Campeonato de Clausura.