Juan Carlos Poblete G.
La impotencia, la rabia y el deseo de justicia fueron los sentimientos que motivaron una marcha por Yini Sandoval, la joven que murió junto a sus tres hijos en el incendio de su casa, en el sector San Antonio de Temuco.
En la manifestación, familiares y amigos recordaron que a pesar de que han transcurrido más de tres meses del crimen, todavía no se ha identificado responsables por el crimen. Aquello es calificado como una negligencia por parte de los organismos de la justicia y las policías, más aún considerando que el Servicio Médico Legal (SML) confirmó que la mujer murió apuñalada, antes de fallecer producto de la acción del fuego.
"Esta marcha es por la poca claridad que hay en la investigación y por el atraso que hay respecto a los avances. Creemos que si la víctima hubiese sido una mujer de otra clase social, que viviera en otro sector, la policía y la justicia habrían llegado más rápido a ubicar a quienes fueron los culpables", apuntó Matilde González, integrante de la coordinadora "Ni Una Menos" en la capital regional.
Injusticia social
La marcha fue convocada por familiares e integrantes de la coordinadora Ni Una Menos y la organización Casa Autogestionada de Mujeres del Ngulumapu.
El punto de partida fue la plaza Dagoberto Godoy, próxima al Hospital Regional. Allí se reunió alrededor de un centenar de personas que marchó por distintas calles céntricas de Temuco, hasta llegar al domicilio donde murieron Yini y sus hijos.
El hermano de Yini, Erick Sandoval, dijo que como familia no han recibido información sobre la investigación, por lo que sienten que no hay igualdad ante la ley. "Somos seres humanos igual que todos y queremos la misma justicia, como la tiene la familia Luchsinger u otras familias adineradas", dijo.
"En Chile toda la gente sabe que la gente que tiene poder, adinerada, tiene todos los beneficios para una justicia más rápida. Nosotros como somos de una familia humilde, de un "barrio bajo", como le llaman, no nos dan la justicia que queremos y esta investigación va muy lenta", declaró.
Un crimen sin resolver
El caso comienza en la madrugada del 29 de diciembre pasado. A las 03:08 de la madrugada, se alertó de fuego violento en una vivienda ubicada en calle Malvoa, llegando a León Gallo. Tras extinguir el incendio, Bomberos encontró los cuerpos sin vida de Yini Paola Paz Sandoval Reyes (28), y sus pequeños hijos Daniel Tolosa Sandoval (2) y Valentín Acuña Sandoval (5).
El tercer hijo, Ignacio Sánchez Sandoval (10), fue rescatado desde las llamas y murió en el Hospital San Borja Arriarán de Santiago en la noche del miércoles 6 de enero, luego de estar varios días luchando por recuperarse de quemaduras que afectaron el 90% de su cuerpo.
Fue el examen tanatológico realizado por el Servicio Médico Legal lo que provocó un vuelco en el caso, al revelar que Yini había muerto antes del incendio, tras recibir puñaladas en la zona del tórax y la tráquea.
"Lo que ocurrió es un femicidio, por la brutalidad con la que se efectuó, y por eso exigimos que se agilicen las diligencias investigación. No puede quedar impune la muerte de una mujer y sus tres hijos", argumentó Silvia Alarcón, integrante de la coordinadora feminista de Temuco.
"La gente que tiene poder y dinero obtiene justicia más rápido que nosotros, la gente humilde".
Erick Sandoval,, hermano de la víctima"
"Sabemos que las investigaciones son complejas, pero aquí hay diligencias que no se han agilizado".
Silvia Alarcón,, coordinadora feminista Temuco"
