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Amadas y odiadas, las nuevas ciclobandas de Temuco otra vez son motivo de controversia. Ahora el alcalde de Temuco, Miguel Becker, aseguró que cuando se concrete el cambio de Gobierno pedirá eliminar las nuevas vías de circulación para bicicletas implementadas en las calles San Martín y Hochstetter.
Becker aseguró que la ciclobanda en construcción en calle San Martín provoca una serie de problemas que ellos, como municipio, "habían planteado hace mucho tiempo", pese a que un primer momento apoyaron los proyectos.
"Los vehículos, aunque no están autorizados, se estacionan al costado derecho, la ciclobanda bloquea el costado izquierdo y en definitiva quedan dos vías para circular (...) van a haber unos tacos fenomenales, como en calle Hochstetter", dijo.
La autoridad comunal sostuvo que "lamentablemente si esto continúa nosotros, con un nuevo gobierno, vamos a pedir que esto se elimine", manifestó, asegurando que apoya la idea de "construir ciclovías, por supuesto, pero no hay para qué construir una nueva ciclovía en San Martín si tenemos una que va paralela por el sector donde estaba la antigua línea férrea, camino a Labranza".
Posturas contrarias
El proyecto que de generar una red interconectada de ciclovías es parte de una meta presidencial, según explican desde el Minvu.
La seremi de dicho organismo, Romina Tuma, argumenta que la razón de la congestión vehicular no recae exclusivamente en las ciclovías, sino en el crecimiento anual de un 8% anual del parque automotor que hoy tiene 74 mil vehículos circulando por las calles de Temuco.
A juicio de Tuma, ante ese panorama, "lo que tenemos que hacer es generar medios de transporte sustentables, promoviendo el uso de las bicicletas a través de las ciclovías y mejorar el transporte público, porque si seguimos a este ritmo, de aquí a 10 años la ciudad no va a dar abasto".
"Si hoy no tomamos las medidas para promover otros medios de transporte limpios y sustentables, como la bicicleta, esta ciudad de aquí a diez años, va a estar colapsada", advirtió la seremi Tuma.
Lo mismo sostiene el académico e ingeniero en Tránsito y Transporte de la UTEM, Alvaro Miranda.
"Quizás no fue la mejor forma de construirse, pero de todas formas lo que hay que hacer es un plan integral que interconecte las ciclovías, para articularlas como un medio de transporte que es parte de la solución a un problema tan importante como es la contaminación. Lo que se tiene que hacer es dar el espacio y planificar mejor, pero en ningún caso oponerse", explicó el experto.
En tanto, Carlos Rojas, también ingeniero en Tránsito, tiene una postura totalmente opuesta, asegurando que las nuevas ciclobandas "no sirven para el sistema vial y no aportan a la conectividad, porque su construcción no se justifica en relación a la cantidad de personas que las usan y restan capacidad a calles muy transitadas", dijo sumándose a la opinión del alcalde Becker, quien sostiene que las vías entorpecen "la circulación de vehículos, que ya es un problema".
Ciclistas divididos
Entre ciclistas también hay opiniones divididas.
José Miguel Arancibia, del Club Noveno Piñón XC, defiende las ciclovías diciendo que "mientras no haya una cultura pedalera, saludable y amigable con el medioambiente, toda medida a favor de las bicicletas la van a encontrar perjudicial".
En tanto, el presidente de la agrupación UfroPedalea, Matías Soto, dice no estar de acuerdo con las ciclovías porque "son diseños mal hechos" en los que "hay una desprolijidad" que evidencia "que no hay una real preocupación por la bicicleta como medio de transporte.