Cinco comunas deben cerrar sus vertederos antes del 2018
RESIDUOS. Municipios ya trabajan en proyectos de rellenos sanitarios e incluso buscan asociaciones. Mientras tanto, algunos ya pidieron ampliación del permiso.
Este año tres comunas de La Araucanía deben cerrar sus vertederos, en tanto en 2018 dos más deben poner fin a la disposición de sus residuos en recintos propios.
Se trata de Gorbea, Curacautín y Lonquimay que están con sus fechas vencidas. A ellas se unen Teodoro Schmidt y Vilcún que tienen fecha de caducidad para el año que viene.
Esta situación viene a agravar, aún más, el manejo de la basura en la Región y los lugares autorizados donde puede ser trasladada.
Una de las comunas que está complicada con los residuos es Lonquimay, que es la única que aún mantiene un basurero, como es catalogado por los expertos en el tema, ya que los desechos no reciben ningún tipo de tratamiento.
Nibaldo Alegría, alcalde de la comuna, precisó que si bien tiene plazo para cerrar este 2017, ya pidió una extensión de esa fecha.
"Aún no tenemos algo concreto respecto a un nuevo relleno, por eso pedimos más plazo. El proyecto estuvo cuatro años dormido, ya que el municipio anterior compró el terreno de 150 hectáreas", aseveró.
Opciones
El edil explicó que con recursos del municipio se está realizando el perfil. "Esperamos tenerlo este año para que ojalá esté en ejecución en 2017 el diseño, es un proceso largo".
Consultado por las opciones que tienen mientras se construye el relleno sanitario, el alcalde fue enfático. "No tenemos alternativas. Tendremos que pedir más plazo para no cerrar el que tenemos ya que no tenemos los recursos para llevar nuestra basura a otras comunas, es un costo demasiado alto que no podemos solventar".
Una situación similar se vive en Gorbea donde están planificando unirse con otras comunas cercanas, para en conjunto buscar una solución a la disposición de la basura.
"Pitrufquén, Loncoche y Villarrica también están con problemas, por lo tanto nosotros esta semana tendremos una reunión para constituir una asociación, ya que es la forma más factible de poder tener un relleno sanitario de forma conjunta con el apoyo de la Subdere, para buscar un terreno", adelantó el alcalde de Gorbea, Guido Siegmund.
Respecto al término del permiso de vida útil de su vertedero para este 2017, Siegmund señaló que ya fue pedida una extensión del uso por una año más.
La Ley Orgánica de Municipalidades establece que la responsabilidad de los residuos domiciliarios en cuanto a su retiro y disposición final es de las entidades edilicias.
De las 32 comunas, hay 15 que tienen sus vertederos cerrados y disponen en otros puntos de la zona o de la Región del Biobío; mientras que las 17 restantes cuentan con sitios de disposición final de desechos donde gran parte de ellos tiene una vida útil próxima a expirar.
De estos sólo tres corresponden a rellenos sanitarios: Victoria, Villarrica y Freire. Uno es basural en Lonquimay y los 13 restantes son vertederos muy próximos al cierre en un rango de años que va desde 2018 a 2024, siendo este último el de Ercilla.
Ley de Reciclaje
En este sentido, el reducir la cantidad de desechos que deben ser trasladados finalmente a los vertederos, es uno de los caminos que están siendo impulsados.
"Está pronta a entrar en vigencia la Ley de Reciclaje, que nos permitirá pasar de un 10% de reutilización a un 30%, ya que la complejidad del tema tiene que ver con la cantidad de residuos que una persona genera al día y eso es lo que queremos abordar", aseveró el seremi del Medio Ambiente Marco Pichunman.
La normativa, cuyo reglamento se está preparando, "extiende la responsabilidad al productor de ciertos productos definidos como prioritarios, entre los que están los envases y embalajes, deben establecer metas anuales de recuperación de ese tipo de productos".
En Chile se estima que sólo se recicla el 5% de los residuos, y en La Araucanía no se alcanza ni al 1%, lo que está por debajo de resto de los países donde las cifras llegan al 30%.