Camilo Garrido
La Presidenta Michelle Bachelet firmó en enero de este año el proyecto de ley para crear el Ministerio de Ciencia y Tecnología que, entre otras cosas, creará la Agencia de Investigación y Desarrollo que reemplaza a la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt). Su presidente y asesor científico de la Presidencia, Mario Hamuy, se encuentra recorriendo el país para explicar qué implica lo anterior para las regiones del país en materia de investigación e inversión.
-¿Qué inversión ha aplicado Conicyt en esta Región?
-En el año 2016 hay 171 proyectos de Conicyt que financia a la Región de La Araucanía. En cuanto a los montos, eso corresponde a $12.500 millones, para el año 2016.
-Y en materia de desarrollo académico, ¿cómo se ha desempeñado la Región?
-Es una Región que viene emergiendo. Todas las regiones en general vienen emergiendo porque la ciencia y la tecnología estaban muy concentradas en Santiago, pero esa proporción ha ido disminuyendo en favor de todas las regiones. Hoy La Araucanía está recibiendo, según las cifras (de inversión) un 4,2% del presupuesto total de Conicyt el año 2016. Ahora, si uno lo compara con la población de La Araucanía, abarca a un 5,8%. Todavía las regiones están un poco rezagadas respecto de la población, pero es un problema no sólo en La Araucanía, sino nacional, que tradicionalmente la investigación se hace en la Región Metropolitana, pero eso se está revirtiendo.
-¿Qué debería ocurrir con la creación del Ministerio de Ciencias y Tecnología?
-Va a ocurrir algo paradigmático, porque hoy Conicyt no tiene representación regional institucionalmente hablando, y en el proyecto de ley estamos planteando que existan cuatro grandes Seremis en el país, y por lo tanto ese va a ser un instrumento potente para ir cada vez desconcentrando la actividad científica hacia las regiones.
-¿Cómo va a tocar a La Araucanía la creación de este ministerio?
-Del momento en que tienen seremis trabajando en la Región y estamos pidiendo en la ley que estén involucrados en todos los procesos de elaboración de las estrategias de desarrollo regionales. Hay un proyecto de descentralización que incluye la elección de los intendentes, futuros gobernadores, pero también allí se traspasan a la Región en distintos ámbitos. Hay uno que ya está traspasado, que se llama el Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC), que lo administran los gobiernos regionales. Entonces queremos que este futuro seremi se involucre en apoyar a la Región para hacer el mejor uso posible de los recursos que van a todas las regiones (...) El seremi tradicionalmente baja las políticas nacionales a las regiones, pero queremos que estos seremis también eleven las preocupaciones y las necesidades de la Región al nivel ministerial.
-¿Cómo evalúa el vínculo entre la academia y la tecnología?
-La academia tiende a tener su propia cultura, su manera de hacer las cosas, escribir papers, investigar por curiosidad, investigar ciencia fundamental, que no necesariamente sale de las paredes de las universidades, de los campus hacia el sector productivo o los mercados, entonces esa es una brecha gigantesca y no es un desafío solo de Chile, es a nivel mundial. Entonces, hay toda una discusión que tenemos que dar, pero en el futuro Ministerio de Ciencias y Tecnologías estamos dando los espacios para que esas brechas se cierren vía coordinación entre lo que hace el futuro Conicyt, que pasa a llamarse Agencia de Investigación y Desarrollo, con Corfo y el Ministerio de Educación.
-¿En qué nivel estamos?
-Estamos lejos y por lo pronto eso se manifiesta a través de la inversión que hace el sector productivo en investigación. De lo que invierte Chile en investigación y desarrollo, que son cerca de mil millones de dólares al año, sólo un tercio viene de mundo productivo y eso en otros países del mundo es dos tercios. Entonces el Estado está haciendo un esfuerzo más grande que el sector productivo. Eso es lo que hay que revertir.
-¿Y La Araucanía?
-No es la excepción. Centros regionales como el CGNA, Centro de Genómica y Nutrición Alimentaria, es un centro regional financiado parcialmente por el Gobierno Regional y por Conicyt y que justamente está como en el medio: haciendo investigación, pero apuntando hacia lo aplicado y hacia las necesidades que tiene la población en temas alimentarios. Cómo generar conocimiento para generar productos más saludables para la población. Allí hay una diferencia con respecto a lo que hacen las universidades.
"La Araucanía es una Región que viene emergiendo. Todas las regiones en general vienen emergiendo porque la ciencia y la tecnología estaban muy concentradas en Santiago". "Hoy Conicyt no tiene representación regional institucionalmente hablando, y en el proyecto de ley estamos planteando que existan cuatro grandes Seremis". "La academia tiende a tener su propia manera de hacer las cosas (...) no necesariamente sale de las universidades de los campus hacia el sector productivo"."
del presupuesto 4,2%
total de Conicyt en el país corresponde a la inversión para La Araucanía este año. $ 12.500