Tres vías mapuches para la paz regional
Estamos conscientes que nuestra región de la Araucanía, innegablemente, vive un conflicto que se manifiesta explícitamente con hechos de violencia (física y simbólica) que nos impiden un ecosistema social de paz que facilite su desarrollo.
Debe tenerse presente que el Estado de Chile ha suscrito o ratificado, desde el año 1966 hasta la fecha, acuerdos internacionales que se han incorporado a la jurisprudencia nacional que dan base y sustento a las reivindicaciones y demandas del pueblo mapuche como son el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos de la ONU 1966; Convenio 169 de la OIT 1989; Derechos de los pueblos indígenas ONU 2007; Derechos de los Pueblos Indígenas OEA 2016. Contundente base de derechos y deberes que el Estado de Chile ha reconocido a sus pueblos indígenas sin que estos puedan ejercerlos, provocando el conflicto político que vivimos. Político, porque su ejercicio depende de la voluntad política de los gobiernos y del parlamento. Para nosotros, ellos son los responsables del conflicto que vivimos.
Nos hemos alegrado y felicitado la iniciativa liderada por los jóvenes estudiantes de periodismo y comunicación social de la Universidad de la Frontera, al convocar a un foro sobre "autonomía y autodeterminación: alcances y limitaciones" con la presentación de tres posturas - vías de solución al conflicto político - cultural que vivimos.
La CAM, representada por su vocero trabajador social, Héctor Lleitul Catrillanca, quien manifiesta que, ante el incumplimiento, mentiras y violencia del Estado chileno, optaron por salirse de la institucionalidad y, desde ese espacio, plantear sus reivindicaciones y demandas, legitimando la violencia física como instrumento de presión. Por su parte, ENAMA, corporación de profesionales mapuche, representada por su vocero, abogado Richard Caifal Piutrin, manifiesta hacer suya la declaración del alcalde de Tirua, Adolfo Millabur que señala no optar por la violencia porque "existen métodos más inteligentes y efectivos" legitimando el dialogo y la negociación como instrumento de lucha social, política y cultural. ENAMA, por tanto, dialoga con el Estado. Finalmente, pudimos apreciar una tercera vía representada por el político mapuche Francisco Huenchumilla Jaramillo, quien opta por incorporarse al sistema político del Estado y, desde dentro de la institucionalidad democrática, incidir para las transformaciones que aspira la sociedad mapuche y chilena.
El Foro de la Universidad de La Frontera permitió, por primera vez, en forma muy clara, transparentar las tres vías de solución en un auditórium repleto de personas de todas las edades y condiciones urbanas y rurales que, adscribiéndose a las distintas vías planteadas, escucharon con un cívico y ejemplar respeto comprobando que los líderes mapuche si están dispuestos y tienen cultura de diálogo y negociación política.