Desde el estado de Illinois, en la zona sur de Chicago, inició hace unas semanas un largo viaje hasta Temuco, un carro bomba "de especialidad", armado para el control de emergencias con sustancias peligrosas, además de una pequeña oficina de comando y radiocomunicaciones en su interior. ¿El destino? la Segunda Compañía de Bomberos, a los pies del cerro Ñielol.
La historia de cómo se gestó este episodio se inició a inicios de año, cuando uno de los 2 carros que posee la Segunda Compañía, fue impactado por una furgoneta en pleno centro de Temuco cuando se dirigía a un incendio en Padre Las Casas. Ante la dificultad para lograr la reposición, desde el seno de la Segunda Compañía se optó por buscar una solución a corto plazo. Para ello, se decidió utilizar los fondos recaudados en los últimos años, reunidos a través de pequeños beneficios internos -bingos y venta de modestas rifas- además de las cuotas que sagradamente entregan los voluntarios.
Con este dinero bajo el brazo -más de 30 millones de pesos- sumado al aporte de la empresaria local Laura Muñoz, que aportó con otros 30 millones, los bomberos segundinos hicieron los contactos con sus pares de Estados Unidos, logrando cerrar un trato por un carro año 2002 marca International, que al momento de la compra se encontraba prestando servicios en la estación 51 de East Joliet, al sur de Chicago.
"Estoy muy orgulloso de que los segundinos hayan contemplado la compra de este carro, que estaba fuera del alcance del Cuerpo de Bomberos de Temuco por su costo", señaló Leonel Nualart, superintendente del Cuerpo de Bomberos de Temuco, quien agregó que "me siento muy orgulloso por el sacrificio y el esfuerzo realizado por años por la Segunda Compañía, que ahorró y decidió destinar el dinero a esta máquina".
Aportes
Héctor Basualto, director de la Segunda Compañía, señaló que "surgió la idea de comprar una máquina usada en Estados Unidos o en otra parte y nos dimos a la tarea -fundamentalmente el capitán Felipe Véliz y el bombero Mario Altamirano- de buscar una máquina".
Tras mucho buscar, los bomberos temuquenses llegaron hasta la bella máquina International año 2002, con un costo era de 62 millones de pesos.
"Era un costo mayor, sin duda, pero surgió la idea de pedir el apoyo de una amiga empresaria local, Laura Muñoz, a quien contacté y que generosamente nos donó 30 millones de pesos", apunta Basualto, quien agrega que "el resto corresponde a recursos propios, felizmente somos una compañía ordenada".
Felipe Véliz, capitán de la Segunda, señaló que "si bien hay muchos carros de bomberos con cuerpo de bomba enfocados al incendio, aprovechamos la oportunidad para estructurarnos de una forma definitiva con una máquina especializada. Fueron cerca de 5 meses de búsqueda, hasta que la encontramos".
"Desde la Superintendencia estamos muy felices", señaló Leonel Nualart, quien agregó que "queremos destacar a la empresaria Laura Muñoz por su donación, que es un ejemplo para las empresas locales".
El arribo de la máquina está programado para las 16 horas de hoy por el acceso norte de Temuco, donde será recibida por Bomberos y escoltada hasta su nueva casa, a los pies del Ñielol.
"joyita" estadounidense para
combate de sustancias peligrosas
