Hace 40 años | 29 de noviembre 1977

Preparan infraestructura deportiva regional

Más de 10 millones de pesos se han invertido en obras de infraestructura y equipamiento deportivo en la Novena Región. Junto a Temuco fueron favorecidos Freire, Villarrica, Pucón, Pitrufquén, Gorbea, Loncoche Vilcún, Lautaro, Nueva Imperial, Victoria, Curacautín, Collipulli y Angol.

Hace 10 años | 29 de noviembre 2007

Hinchada despidió al estadio Germán Becker

Con una ceremonia que estuvo cargada de recuerdos y emociones la hinchada de Deportivo Temuco despidió al estadio Germán Becker, recinto que entrará en un completo proceso de remodelación. En lo futbolístico, el equipo local perdió por 0 a 2 ante Estudiantes de La Plata.

Hace 1 año | 29 de noviembre 2016

140 operaciones realizará el hospital de campaña

Pacientes en lista de espera en centros de salud correspondientes al Servicio de Salud Araucanía Sur serán atendidos hasta la primera semana de diciembre por profesionales castrenses. Las intervenciones quirúrgicas se están realizando hasta el 16 de diciembre en el hospital de campaña de Pitrufquén.

J. P. Sartre dijo alguna vez: "Seguramente habrán tiempos mejores, pero este es el nuestro". Esta frase que inspiró a muchos a trabajar el presente y sacar lo mejor de cada día; hoy en el escenario político chileno tiene otro significado.

Mientras un candidato anuncia tiempos mejores, solamente si él gana, de lo contrario el país irá por un barranco sin fondo, su adversario, en cambio indica que si gana el de los tiempos mejores, volveremos a los tiempos de los pelucones y pipiolos, siendo toda nuestra historia republicana nada más que un paréntesis.

Si ambos dicen la verdad, lo que implica que son políticos respetables y que no mienten a su gente, el futuro es terrible. Si ambos afirman algo a conciencia de no ser cierto, estamos frente a líderes que dirán cualquier cosa por ganar, por lo tanto, el futuro en manos de personas así también es desesperanzador.

Frente a este escenario pesimista, me niego a caer en el nihilismo y aceptar aquella máxima liberal del siglo XIX, que afirmaba: todo problema que no tiene solución deja de ser problema. En consecuencia, cada cual arrégleselas como pueda.

La actitud como ciudadanos responsables e involucrados con nuestra Región es exigir a quienes pretenden ser las autoridades nacionales algo más que un slogan o frases bien construidas por publicistas. Es exigir aquellos espacios donde transversalmente se convocan todas nuestra voluntades.

Una demanda social transversal de nuestra Región y quizás de todas en el país (pero que en La Araucanía se hace más necesaria y urgente) es entregar poder político a los Gobiernos Regionales. No estar sujetos a negociaciones de cúpulas directivas en Santiago que terminan en el inaceptable indicador de una autoridad regional por año en periodo de cuatro.

¡Intendentes electos y con atribuciones reales ahora!

Esa debe ser nuestra exigencia hoy, porque hoy es nuestro tiempo. Somos nosotros los llamados a ejercer activamente nuestros derechos, sin importar quién resulte electo.

Mauricio Partarrieu,

Universidad de La Frontera

La mayoría de los chilenos se define y se identifica con la clase media. Las encuestas revelan que esas familias se sienten el sector que ha quedado más desprotegido por décadas. Los gobiernos priorizan programas sociales para ayudar a los más pobres, pero el estrato medio se siente postergado y vulnerable ante imprevistos, como los altos costos de la salud, de la educación -sobre todo universitaria- e incluso la cesantía.

La clase media ha llegado a esa ubicación socioeconómica gracias a su esfuerzo. Son familias que hacen ingentes sacrificios, ahorran o se endeudan, para llevar a sus hijos a un mejor colegio, para mantener una cobertura de salud a través de una Isapre o pagar la universidad. Pugnan por renovar la casa o el auto. Es la fuerza emprendedora del país, pero a la vez es muy sensible a las crisis económicas, a las alzas de los impuestos, de aranceles universitarios, planes de salud, de los combustibles, los alimentos, etcétera.

Es usual que frente a la cesantía, un subsidio sea de gran ayuda para una familia pobre, pero para la clase media puede ser una gota de agua frente a su nivel de compromisos.

Larga es la lista de las inquietudes, pero tal vez los temas más recurrentes son la delincuencia que se ha instalado en el país; el endeudamiento excesivo, con el fin de conseguir pagar sus compromisos; los problemas de financiamiento de la educación universitaria de sus hijos, y las dificultades para solventar los gastos de salud, sobre todo cuando alguno de los integrantes debe hacer frente a alguna intervención quirúrgica e internación en alguna clínica. Esas familias sienten que van perdiendo el estatus que tanto les costó alcanzar, aun a costa de endeudamiento.

En el fondo, esto refleja su paulatino empobrecimiento y, con suerte, sólo les queda trabajar para pagar, volver al sistema público de salud y sacar a sus hijos de colegios particulares. Ese segmento sigue esperando que las autoridades no olviden que constituyen la gran mayoría de los chilenos y el sector tradicionalmente olvidado por los gobiernos.