Dos barcos piratas y sus esqueletos recorren a diario el lago Villarrica
LA POZA DE PUCÓN. El "Perla Negra" y el "Holandés Errante" se suman al vapor "Chucao" en entretenidos paseos diarios.
Desde el 2002 que el conocido vapor "Chucao" navega por el lago Villarrica y desde el 2010 que está en manos de sus actuales dueños, el puconino Cristian Vega Castillo y su familia. Los buenos resultados del emprendimiento -es imposible llevar la cuenta de la cantidad de visitantes que navega cada verano en el vapor con nombre de pájaro- movió a este emprendedor a sumar otras dos embarcaciones. La primera de ellas -el "Perla Negra"- es una pintoresca reproducción del barco que comanda Jack Sparrow en "Piratas del Caribe", con esqueletos incluidos, y que inició su navegación en 2016. Un año después -el 2017- se sumaría su hermano gemelo, el "Holandés Errante", ambos con capacidad para 100 pasajeros cada uno y que han hecho las delicias de los turistas amantes de la navegación y del mundo de los bucaneros.
Las tres embarcaciones hoy forman parte del verano puconino. Apenas el "Chucao" inicia su navegación por el lago, saliendo desde La Poza, comienzan las maniobras del "Perla Negra" para subir a sus pasajeros. Una hora después, será el zarpe del "Holandés Errante". Un intenso día para los encargados de tener a punto estas embarcaciones, donde además deben preparar cada salida de las dos naves piratas un show de bucaneros con combate y abordaje incluidos.
"Nuestra tripulación de los barcos piratas hace un espectáculo en la Playa Grande, que es bien entretenido, especialmente para los niños", señala Cristian Vega, al timón del "Chucao", quien agrega que "estamos saliendo con nuestras embarcaciones cada una hora, todos los días, con partida y llegada desde La Poza. Los precios son los mismos para las tres embarcaciones, esto es 5 mil pesos los adultos y 3 mil niños".
Los piratas
El "Perla Negra" y el "Holandés Errante" fueron construidos en Valdivia, en un astillero casero. El primero en salir a navegar por el lago Villarrica fue la réplica del barco de Jack Sparrow, que en 2016 sin duda que impresionó a los turistas con sus velas al viento y algunos esqueletos de cuerpo entero amarrados al bauprés.
"A la gente le atrae mucho el tema de los barcos piratas, por la película", señala Vega, quien agrega que "como ya estábamos con el Chucao funcionando y queríamos invertir en nuevas embarcaciones, escuchamos a mi sobrino que me sugirió hacer algo diferente. Apenas tuvimos el barco, buscamos redes, cuerdas, un timón y conseguimos esqueletos en tiendas, una vez pasado Halloween. Y lo mismo hicimos luego con el Holandés Errante".
Cada uno de estos barcos gemelos puede navegar cómodamente con cien personas a bordo, sin contar la tripulación.
"Enero fue un buen mes, mucha gente ha salido a navegar en los barcos, y es especialmente a los niños a los que más les interesa repetirse el viaje en los barcos piratas", señaló Cristian Vega, cerrando la conversación con una vuelta de timón que alejó al "Chucao" del muelle de La Poza.
Y un vapor con nombre de pájaro...
En 1905 salió el vapor "Chucao" desde los astilleros alemanes de Hamburgo. Con sala de máquinas y calderas ardiendo, la embarcación de 17,5 metros de eslora recorrió el lago Villarrica durante el siglo pasado, para transformarse luego en un atractivo turístico. En 2010, la embarcación pasó a la administración del emprendedor turístico local Cristian Vega. Hoy, el vapor tiene salidas diarias a las 14, 17 y 19 horas, en una navegación de una hora y 10 minutos por el lago.