El Papa Francisco señaló en 2015 que el calentamiento global pone al mundo "al borde del suicidio" y consagró una encíclica en la que subrayó que la degradación climática provoca la de la vida de los más pobres, al producir contaminación, catástrofes naturales, enfermedades, guerras y migraciones. Para remediarlo, el Papa aboga por una forma de desacelerar el crecimiento económico y una revolución energética, abandonando por completo las de origen fósil.

Aquellas palabras del Papa revelan una realidad preocupante. La Tierra está enferma desde hace años por causas del hombre y su progreso industrial.

Nuestra Región, por ejemplo, y tal como se publicó ayer en un reportaje de El Austral, experimenta la disminución de hielo en el glaciar del volcán Villarrica, una evidente baja del caudal de los lagos Caburgua y Villarrica; escasez de agua en la Provincia de Malleco, sequía en verano y temporales de lluvia en invierno y un considerable aumento de incendios forestales. Todo estos episodios forman parte del escenario que debe enfrentar La Araucanía.

¿Qué podemos hacer nosotros para revertir esta dramática situación? Mucho. Cada esfuerzo individual por más pequeño que aparezca es un gran paso para transformar los hábitos de los demás y propiciar una defensa sin pausas del medio ambiente.

Las inundaciones y aumento de lluvias en el norte, la llegada de nuevas especies marinas, las variaciones de las temperaturas y el cambio migratorio de las aves, no parecen casualidad. Eso es algo que debemos tenerlo muy en cuenta.

Hay que cuidar el agua, la energía, proteger como un tesoro las áreas verdes y aprovechar el amplio campo que se abre con las energías renovables, además de reutilizar las materias primas y evitar aquellos elementos que dañen la capa de ozono, entre algunas medidas. Pero lo más importante es acuñar una cultura que entienda que el cambio climático es una realidad peligrosa y que aún hay mucho por hacer.

Hace 40 años | 12 de febrero 1978

Construyen defensas en el Parque Industrial

La empresa constructora de Nelson Aguilera tiene a su cargo los trabajos de construcción de las defensas del río Cautín en el sector correspondiente a los terrenos del Parque Industrial. Las obras ya se iniciaron y se financian en dos tercios por el presupuesto regional y un tercio por parte de la Asociación de Industriales de Malleco y Cautín.

Hace 10 años | 12 de febrero 2008

Aumenta el tamaño del río de lava en el volcán Llaima

La lava avanza por el volcán Llaima y las corridas ya han alcanzado longitudes que van de 2 a 2,5 kilómetros con un ancho de 2,5 metros cada una, según información emanada del Sernageomín. Se realiza una estricta vigilancia al macizo por parte de los especialistas del Observatorio Vulcanológico de Los Andes del Sur.

Hace 1 año | 12 de febrero 2017

Millonario proyecto busca remodelar La Poza de Pucón

En plena etapa de diseño por parte de la Municipalidad de Pucón está un millonario proyecto que busca remodelar por completo el sector de La Poza, embarcadero municipal que cada año se ve más exigido por la alta afluencia de propietarios que acceden a este espacio para ingresar sus naves a las aguas del lago Villarrica.

Nuestra Araucanía fue durante muchas décadas el granero de Chile gracias a la fertilidad de nuestras tierras. La Novena Región cuenta con 31.842 kilómetros cuadrados, sin embargo, esa bondad de la naturaleza ha cambiado por la invasión forestal de pinos y eucaliptos que cada día hacen disminuir el caudal de nuestros ríos y napas de agua siendo responsable de la emigración de la población rural a las ciudades, ello ha contribuido a que nuestro crecimiento económico sea el peor del país junto a la Región del Maule y que tengamos la media salarial más baja de $340.877 mientras que la nacional es de $ 473.351.

Si nos preocupamos de nuestra mirada hacia el futuro, y que debe sensibilizar al casi millón de habitantes de la Región, no debemos perder de vista, entre otras posibilidades a explorar, la actividad turística: Lonquimay aporta en forma muy interesante con su volcán de excelentes pistas de esquí, sus maravillosas termas y extensas lagunas; Capitán Pastenes con su turismo gastronómico gracias a su leal colonia italiana que no abandona esos lares, y qué decir de la zona de Villarrica y Pucón, con su inmenso lago y su apetecible volcán, atracción de deportistas y turistas europeos en nuestro largo invierno, a lo que se debe agregar la nutrida riqueza termal. Casi 60 mil habitantes y un comercio que nada debe envidiar al de las calles Manuel Montt, Bulnes y Rodríguez de la ciudad de Temuco convertidas en ferias ambulantes de vegetales dándole una gris presentación en esos lugares a nuestra capital araucana.

Por su parte, Pucón cada vez se parece más a lugares turísticos de Francia e Italia que he tenido la suerte de conocer y cuya población residente se acerca a los 30 mil habitantes que no tienen problemas en recibir y atender al casi millón de turistas que la acceden en nuestros veranos.

Pero como se trata de avanzar con aportes positivos no puedo dejar de señalar que la ruta que une Freire con estas dos ciudades dista de estar a la altura de ese potencial turístico. Su estrecha carretera solamente de dos vías obliga en la época veraniega a recorrer sus cerca de 80 kilómetros en días peak en casi tres horas. Un camión de carga o un grupo de ciclistas custodiados por un vehículo convierten ese acto de traslado en un irascible que cobra valiosas vidas y deja múltiples heridos.

Creo que es conveniente hacer un llamado a nuestras autoridades y parlamentarios para obtener los recursos que hagan posible construir una ruta no menor a las cuatro pistas.

Roberto Muñoz Barra, exsenador, presidente Institutos Estudios Públicos Social Demócrata