Hoy se cumplen seis días de la segunda administración de Sebastián Piñera. Seis días que, en el caso de nuestra Región, han estado marcados por la incertidumbre en servicios y en las secretarías regionales ministeriales ante la ausencia de las nuevas jefaturas.
Y es que al cumplirse casi una semana de la llegada del nuevo Gobierno, La Araucanía sigue sin conocer el nombre de las autoridades que acompañarán al intendente Luis Mayol, lo que de alguna manera genera un trastorno y un clima de duda en las diversas reparticiones del Gobierno Regional.
Lo preocupante, como ya lo hemos señalado en esta misma tribuna, es que habiendo transcurrido tres meses del triunfo de Piñera aún no se formalice al equipo de autoridades, todo esto debido a la falta de acuerdos y los mezquinos intereses partidistas. En estricto rigor, se están perdiendo días valiosos para avanzar en las urgencias y en la toma de decisiones que requiere la Región.
En ese sentido, el mismo intendente ha tenido, casi todos los días, que ir postergando su propio proceso de instalación.
En su primera entrevista amplia a El Austral, publicada el domingo 4 de marzo, señaló que el nombramiento de gobernadores y seremis se confirmaría entre el lunes 5 y martes 6 de marzo. Sólo se cumplió la designación de los gobernadores. El viernes 9 de marzo dijo que la información se daría en "cosa de horas o a lo más un día".
El domingo 11 Mayol fijó una vez más un nuevo plazo: "Entre el lunes 12 y el martes 13 el Presidente anunciará a los seremis". El martes 13, ante las reiteradas preguntas de la prensa, dijo que el nombramiento se concretaría a más tardar el miércoles 14. Hoy es viernes 16 y, hasta anoche, aún no había novedades sobre las nuevas autoridades.
¿Improvisación? ¿falta de acuerdos entre los partidos? ¿displicencia? La respuesta la tiene el propio Presidente, sin embargo, lo concreto es que esta indefinición ha generado una pérdida de tiempo. Justamente, lo que menos necesita una Región con nuestro nivel de problemas y dificultades.