La Conferencia Episcopal de Chile (CeCh) aceptó ayer la renuncia del obispo de Rancagua, Alejandro Goic, a la presidencia del Consejo Nacional de Prevención de Abusos a Menores de Edad, tras suspender esta semana a 14 sacerdotes de la diócesis de esa ciudad, uno de ellos presuntamente implicado en delitos de abuso sexual. El episcopado anunció que el panel ahora será presidido por el obispo de San Bernardo, monseñor Juan Ignacio González.
"Luego de deliberar sobre las razones aducidas y dialogar con él (Goic), se ha procedido a aceptar (su renuncia). Comprendemos que las actuales necesidades y dificultades ocurridas en la diócesis que pastorea han hecho necesaria esta determinación", señaló en un comunicado el comité permanente de la CeCh.
La entidad aseguró que recibió la solicitud de dimisión de Goic el 25 de mayo.
Un reportaje emitido por T13 esta semana dio cuenta de denuncias por abusos sexuales y conductas impropias por parte de un grupo de sacerdotes de Rancagua.
La investigación acusó que más de una decena de presbíteros integraban un clan autodenominado "La Familia", que en los últimos años había cometido actuaciones de presunta connotación sexual. Destapado el caso, la diócesis de Rancagua dio inicio a medidas "pastorales y judiciales".
Versión de goic
"Me duele mucho, y muy sinceramente, abandonar el Consejo, pero creo que ellos comprenderán esta decisión y me ayudarán, para hacerme cargo de lo que me corresponde en este momento", sostuvo Goic ayer a La Tercera. "Se ha constituido un equipo sólido, muy profesional y competente, que sin duda continuará aportando su idoneidad para acoger y acompañar a las víctimas de este horrible mal", agregó.
La decisión se dio a conocer el martes pasado, horas después de que el presidente de la Conferencia Episcopal, Santiago Silva, reiterara su pedido de perdón a la ciudadanía por los casos de abuso sexual cometidos durante décadas por Fernando Karadima. El tema torpedeó aún más la imagen de la Iglesia, justo cuando todos los obispos venían llegando de El Vaticano de una reunión donde el Papa Francisco les enrostró su lejanía con los feligreses y su mal manejo en el tratamiento de denuncias de abuso.
Los obispos chilenos fueron citados por el Papa Francisco a la Santa Sede para abordar el silencio de la Iglesia frente a los delitos de Karadima, que habrían sido silenciados por algunos de ellos, como el acusado obispo de Osorno, Juan Barros, a quien apuntan algunas de las víctimas del ex párroco de El Bosque.
En esta reunión, los 34 obispos que asistieron a Roma reconocieron "graves errores y omisiones" al encarar esta problemática, y decidieron poner sus cargos a disposición del Papa, lo que será evaluado durante las próximas semanas.
El nuevo nombre
La Conferencia Episcopal informó que el Consejo Nacional de prevención de abuso será presidido por el obispo de San Bernardo, Juan Ignacio González Errázuriz, quien ha trabajado en él desde su creación.
El Comité Permanente del episcopado envió "un particular agradecimiento a monseñor Alejandro Goic que, desde la creación del Consejo en 2011, ha trabajado incansablemente, junto a un selecto equipo de profesionales, para adoptar todas las medidas necesarias que permitan erradicar de la vida de la Iglesia el abuso sexual de menores y todo tipo de abuso de poder". El organismo agradeció asimismo el "esfuerzo y dedicación a la escucha y acogida de las víctimas de estos delitos y pecados de algunos ministros de la Iglesia". Según el comunicado, bajo la conducción de Goic "se establecieron las normas 'Cuidado y Esperanza', promulgadas en todas las diócesis del país, como líneas guías con principios y procedimientos para evitar este mal en la Iglesia".
Laicos del Maule: "Es un ejemplo"
El vocero de la agrupación "Laicos del Maule, Gustavo Madrid, resaltó que tienen "una buena impresión de Goic, dentro de todos los obispos me parece una persona correcta, pero si siente en su conciencia que no actuó bien, tiene que hacerlo (renunciar)". "Eso es un ejemplo para que los demás obispos vayan siguiendo ese ejemplo de ponerse a disposición", destacó, recordando que "el Papa los mandó con dos misiones, reparar los daños y pedir perdón, y esto no se ha hecho", agregó Madrid sobre la salida de Goic de la instancia.