Triunfo del NO
El viernes 5 de octubre en Concepción se izó la bandera del Movimiento de Izquierda Revolucionario en torno a la conmemoración del triunfo del No hace 30 años, lo que no es más que una falta de respeto para todos quienes creemos en la democracia.
La organización en su grito de guerra ostenta con orgullo el fusil, organización que, de la mano de su personaje insignia Miguel Enríquez, no hacía más que propagar un discurso de odio entre los chilenos, lucha de clases y violencia, utilizando el mismo término que el diputado frente amplista Miguel Crispi con el que quedó en evidencia su falta de compromiso con la democracia.
Me tiene podrido toda la hipocresía y falsa retórica con que algunos cuentan sólo la historia que le es cómoda.
Eugenio González Flores
Triunfo del NO II
No obstante los temores, ansiedades y en un ambiente adverso en que muchos adherentes del NO fueron detenidos durante la campaña, los inscritos en los registros electorales llegaron masivamente a las urnas a marcar su preferencia en plebiscito del 5-10-1988.
Al triunfar el NO, miles de sus partidarios salieron a celebrar en calles y plazas, felicitándose unos a otros. Ante la derrota del SI, en un discurso con ocasión del aniversario de Cema-Chile, el general Pinochet comparó el plebiscito con la consulta que hizo Pilato al pueblo, para que eligieran entre Cristo y Barrabás. También aludió a la Iglesia Católica, junto con Rusia, Estados Unidos y los países europeos, con los cuales había tenido que luchar su gobierno.
A raíz de estos dichos, el entonces arzobispo de La Serena Bernardino Piñera, respondió: "La Iglesia no ha luchado contra el gobierno, ni contra el actual ni contra ningún otro. Ha luchado y luchará siempre por el respeto a los derechos humanos, la justicia social, la participación ciudadana, el diálogo, la reconciliación, el entendimiento y la paz".
Derico Cofré Catril
Descontaminar con recambios de leña por leña
Si se reemplaza un calefactor antiguo, con 50 % de eficiencia y 8 g/h de emisión (que es lo normal), por otro de 80% de eficiencia y emisiones de 1,5g/h obtenemos una disminución de la contaminación de un 82,5% y una reducción de leña de un 37,2%.
Un 7% de calefactores certificados tiene eficiencias sobre el 83% y emisiones menores a 1,5 g/h., muy similares a las de las estufas a pellet, con más de tres años en el mercado.
Es en estas estufas que se podría conciliar la alta disminución de la contaminación requerida por el PDA y el uso de leña. Todos los recambios de leña por leña que ha realizado el MMA (en todas las ciudades), han sido con calefactores ineficientes y altamente contaminantes.
En la última licitación el único equipo que paso las pruebas técnicas, fue un producto eficiente (84%) y de bajas emisiones (1,4 g/h) y fue desechado. El MMA ha malgastado los fondos públicos pudiendo haberlos aplicado efectivamente para producir una disminución de la contaminación de las ciudades del sur de Chile atacando así los efectos nocivos de la contaminación en la salud de los habitantes.
Finalmente debo declarar que todos los datos que confirman estas informaciones son públicos.
Abner Mella Aravena
Día Nacional de la Ciencia
Al celebrarse en nuestro país el primer "Día Nacional de la Ciencia", desde la Universidad de Santiago queremos hacer presente que la investigación científica debe ser una política de Estado transversal, proyectando el rol que la innovación tendrá en el país. Este desafío no es solo del nuevo Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, por lo que nuestro llamado a las autoridades políticas es a establecer una política pública clara que cambie el foco del gasto operativo y lo ponga en la inversión. Solo ese cambio de paradigma permitirá que el conocimiento cumpla su objetivo de estar al servicio de todo un país.
Pudiera creerse que esta posición es solo un discurso que responde al interés de los científicos, pero no es así. La investigación es el motor del desarrollo. En promedio, los países OCDE invierten 2,38% del PIB en investigación. En Chile, esta cifra alcanza apenas un 0,37%. Esta brecha se mantiene respecto del número de científicos. De no revertir esta pobre realidad, seguiremos condenados a ser meros espectadores del desarrollo y a tener que pagar a otros países por el valor agregado que entrega la ciencia en su relación con el sector privado.
Como directivo de una universidad del Estado que realiza investigación de excelencia y pertinente a los desafíos del país, entendemos que nosotros también tenemos una responsabilidad en acercar la ciencia, sus ámbitos de investigación y sus resultados a la población en general, así como a los tomadores de decisiones. Es por ello que el Día Nacional de la Ciencia, es una oportunidad para fortalecer actividades de difusión científica que se mantengan durante todo el año.
Julio Romero Figueroa, Universidad de Santiago