La pilgua costera
Desde la zona costera de La Araucanía, las mujeres de la mesa de Saavedra trajeron hasta la plaza Aníbal Pinto la pilgua costera. Hecha de fibra trenzada, la pilgua nace tras una semana de trabajo desde el momento de la recolección del chupón, planta característica de la costa y que lamentablemente ha ido desapareciendo. La artesana Carmen Nahuelcoi señala que esta pilgua es originaria del lago Budi. En cuanto a los valores de las pilguas, van desde los 6 mil hasta los 10 mil pesos.
Murales de 40 x 35 centímetros para colgar en la pared, con hermosas representaciones de paisajes, flora y aves acuáticas de la zona, hechas primorosamente en lanas de vellón, forman parte de la oferta de las mujeres de la mesa de Gorbea. Miriam Obreque, artesana de la comuna del salto Dónguil, señaló que "los murales de lanas de vellón cuestan 10 mil pesos y son representaciones de la zona de ríos y lagos, y de la costa de La Araucanía". A ello suman licores de los más diversos sabores, así como agroelaborados nacidos de las manos de las emprendedoras de esta parte de la provincia de Cautín.
Desde la bella localidad de Puerto Domínguez sus mujeres emprendedoras trajeron hasta Temuco jabones naturales elaborados con aceites esenciales, con aromas basados en la avena, cúrcuma, carbón, que funcionan tanto como suavizantes como también de exfoliantes, por valor de mil y 2 mil pesos. Mónica Herrera, artesana en cuero, también suma sus creaciones en cuero de vacuno, principalmente monederos. Además hay artículos de fieltro, lanas naturales, calcetines y gorros", apuntó Mónica Herrera.