Roberto Neira/ Ramón Tolosa
En la declaración que entregó a la Policía de Investigaciones (PDI) el pasado 17 de noviembre, el sargento segundo de Carabineros, Raúl Evaristo Ávila Morales, uno de los cuatro funcionarios detenidos por el crimen de Camilo Catrillanca -a la que tuvo acceso El Austral- asegura que cortó la tarjeta de memoria que usaba la cámara que portaba el día del procedimiento, porque tenía imágenes íntimas con su pareja y luego la tiró al desagüe en el baño.
Al ser consultado por la tarjeta de memoria de la cámara GoPro que utilizó en el operativo en Temucuicui, el integrante del Comando Jungla explica que "una vez que me retiré a mi domicilio y al ver la gravedad de la situación que se estaba investigando la verdad es que me asusté y por eso, por el temor de exponer a mi señora, debido a las imágenes que contenía la tarjeta, tomé la decisión de destruirla, cortándola con una tijera y luego arrojándola por el baño. Estoy consciente de la gravedad de este hecho y lo que estoy arriesgando. En ese momento no se lo conté a nadie más, menos a mis compañeros de equipo".
Grabación
El sargento segundo recalca en su declaración que "quiero precisar que esa cámara no estaba grabando. Pues antes de concurrir hasta ese sitio del suceso recuerdo haber encendido la cámara para revisar si tenía batería y me di cuenta que tampoco estaba la tarjeta de memoria por un mensaje que entrega la cámara. Fue en ese momento que recordé que esa tarjeta de memoria la había extraído, desde la cámara días atrás".
Error
El carabinero continúa explicando que "eso lo hice porque esta cámara la utilicé durante mis vacaciones, que tomé junto a mi familia y dentro de las imágenes que estaban en esa memoria habían imágenes y videos íntimos con mi señora, entonces mi idea fue respaldarlos y luego borrarlos desde la tarjeta, para que luego ésta fuera utilizada en el trabajo".
El sargento segundo, manifiesta a la PDI que "reconozco que eso fue un error, no debí utilizar esta cámara ni menos la memoria para cosas personales. Al momento de darme cuenta que la tarjeta no estaba pude recordar que la había dejado en mi casa".
Sobre los primeras versiones, en la declaración el integrante del Gope, comenta que "cuando declaré la primera vez, tuve que entregar la cámara GoPro que se me asignó, es la misma que aparece en las imágenes, sin embargo, yo no le dije al fiscal, ni tampoco a los funcionarios de la PDI que recibieron la cámara que ésta no tenía memoria".
En esta misma línea el investigado precisa que "al momento de declarar la primera vez, ni yo ni mis otros compañeros nos pusimos de acuerdo para dar esta versión en relación a las cámaras, en el sentido que ninguno de nosotros la portaba. Tampoco recibí ninguna instrucción de alguna jefatura o mando para referir dicha situación".
El integrante del Comando Jungla además aclara sobre lo ocurrido ese día que "efectivamente yo portaba mi cámara GoPro asignada como equipamiento. Estaba puesta en mi casco como lo hago cuando la ocupo. Quiero decir que en mi primera declaración efectivamente yo dije que ni yo ni mis compañeros y tampoco el vehículo institucional tenían cámara. No sé si mis compañeros mantenían la suya puesta y operativa".
ingresó al Grupo de Operaciones Policiales Especiales el sargento segundo Raúl Ávila. En 2014 llegó a La Araucanía a trabajar. 2005