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Niño guatemalteco muere estando bajo custodia de en EE.UU.

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Un niño guatemalteco de 8 años de edad murió estando detenido por las autoridades de inmigración estadounidenses. Se trata del segundo caso de un niño migrante que muere este mes bajo custodia estadounidense. El Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza dijo que el menor de edad "mostraba síntomas de una potencial enfermedad" el lunes y fue llevado junto con su padre a un hospital en Alamogordo, Nuevo Mexico. Ahí, agregó la agencia, se diagnosticó que el niño estaba resfriado y tenía fiebre. Se le dieron las medicinas amoxicilina e Ibuprofeno y fue dado de alta el lunes. La agencia dijo que esa misma noche el niño fue llevado de vuelta al hospital con náuseas y vómitos y que falleció poco después. La agencia dijo que no se ha determinado la causa de fallecimiento, y que avisó tanto a la inspectoría interna del Departamento de Seguridad Nacional como al gobierno de Guatemala.

Tsunami: aumentan muertos mientras buscan sobrevivientes

INDONESIA. El número de víctimas fatales llegó a 429, mientras que los desaparecidos iban en 154. La lluvia ha dificultado las labores de los equipos de rescate.
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Carolina Collins/Agencias

Una sombría Navidad pasaron los sobrevivientes del tsunami que azotó el pasado sábado el litoral del estrecho de Sonda, en Indonesia, cuyo último balance de víctimas aumentó ayer hasta los 429 muertos.

El portavoz de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB), Sutopo Purwo Nugroho, informó además en una conferencia de prensa que hay al menos 154 personas desaparecidas a causa del desastre que causó además unos 1.500 heridos.

El tsunami golpeó sin previo aviso y sin que se activaran las alertas para ese tipo de emergencias la costa oeste de la isla de Java y del extremo sur de la isla de Sumatra, donde las fuertes lluvias dificultan las tareas de los equipos de rescate, que a tres días de la tragedia aún buscaban entre los escombros a lo largo de unos 100 kilómetros de litoral.

Pero la situación no es fácil. Algunos poblados quedaron aislados debido a carreteras y puentes dañados, lo que dificulta el suministro de asistencia y la ayuda para las personas que podrían estar lesionadas o atrapadas.

Las fuerzas militares, el personal del gobierno y voluntarios buscaban entre las playas llenas de escombros. Donde encontraban víctimas, se colocaban bolsas para cadáveres amarillas, naranjas y negras. Y los familiares lloraban mientras identificaban a los muertos. Pedazos de hormigón roto y madera astillada cubrían la costa donde antes había cientos de casas y hoteles.

El tsunami llegó a las playas sin activar las alarmas tras el desplome de parte de la isla que forma el volcán Anak Krakatau, ubicado en el estrecho de Sonda, a causa de una fuerte erupción. Dicha isla se formó a principios del siglo XX cerca del sitio de la catastrófica erupción de Krakatoa en 1883, que causó más de 36 mil muertos.

La Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB) señaló que Indonesia no cuenta con sistemas de alerta de tsunamis provocados por un volcán y que las boyas colocadas para detectar una repentina subida de las olas no funcionan desde 2012 por culpa del vandalismo, la falta de mantenimiento y de fondos.

El Presidente indonesio Joko Widodo, que enfrentará una dura campaña de reelección el próximo año, prometió reemplazar o reparar todos los equipos de detección de tsunamis. Nugroho reconoció en Twitter que la red de boyas de detección del país había estado fuera de servicio por el vandalismo y déficit presupuestario.

Sin embargo, la directora de la Agencia de Meteorología, Climatología y Geofísica del país, Dwikorita Karnawati, dijo que el tsunami no pudo haber sido detectado por los sensores de la agencia, los cuales monitorean sismos convencionales que son responsables por más del 90% de los tsunamis de Indonesia.

Se mantienen evacuaciones

Más de 16 mil personas han sido trasladadas a campamentos temporales en lugares elevados ante la amenaza de que una nueva explosión del volcán provoque un segundo maremoto. Por la estrecha carretera que bordea los más de 100 kilómetros de la costa javanesa es incesante el tránsito de ambulancias, furgonetas de los organismos de emergencias, camiones militares, coches de policía y vehículos cargados con provisiones. Indonesia se asienta sobre el "Anillo de Fuego del Pacífico", una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida cada año por unos siete temblores, la mayoría moderados.