Frases
"Yo lo invito (fiscal Abbot) a que venga a La Araucanía, si quiere le pago el pasaje".
"Necesitamos que se haga algo, pero lo más pronto posible".
— Mariela Calabrano,"Yo lo invito (fiscal Abbot) a que venga a La Araucanía, si quiere le pago el pasaje".
"Necesitamos que se haga algo, pero lo más pronto posible".
— Mariela Calabrano,Un interesante proyecto destinado a concretarse durante el primer trimestre de 1979 permitirá el tránsito mixto en el Túnel Las Raíces, tal como sucede con el Túnel Los Caracoles, en Los Andes.
La medida busca mejorar la conectividad desde y hacia la ciudad de Lonquimay, en la zona de cordillera.
Reveladoras estadísticas de la Brigada de Robos de la Policía de Investigaciones arrojó que el eje Balmaceda-Feria Pinto concentra el mayor porcentaje de robos con violencia de la capital regional.
Sólo ayer se registró un delito de estas características en este radio urbano, con dos detenidos.
A plena luz del día y a sólo metros de la Ruta 5 Sur, en Ercilla, una banda de encapuchados incendió cuatro camiones al interior del Fundo Arratia, en la localidad de Pidima, predio que no contaba con protección policial. El ataque se registró pasadas las 8 de la mañana. Los camiones eran de un transportista de Los Ángeles.
La irresponsabilidad al volante nuevamente cobra vidas en La Araucanía. En la madrugada del sábado, un conductor de 23 años que guiaba un vehículo en Angol, a exceso de velocidad, sin su licencia de conducir y bajo los efectos del alcohol, impactó contra un poste del alumbrado público y una reja. El choque, registrado a alta energía, tuvo consecuencias fatales y acabó con la vida de jóvenes (de 20 y 24 años).
Cuesta entender que a pesar de los constantes llamados de la autoridad, de las insistentes campañas de sensibilización sobre los peligros a que se exponen conductores, pasajeros y peatones irresponsables, y a las altas penas impuestas a quienes sean sorprendidos por Carabineros conduciendo un vehículo motorizado después de beber alcohol, siga habiendo personas que incurren en estas prácticas.
Esta vez la tragedia golpeó a Angol y dejó a cuatro familias sumidas en la desesperanza, ya que a las dos víctimas fatales, cuyas familias son de Angol y Santiago, se suma el conductor, que quedó con lesiones y será formalizado por su responsabilidad en el accidente, y una pasajera que también terminó con heridas de consideración tras el choque, y debió ser trasladada al hospital para su recuperación.
Surge la pregunta de cómo frenar la ocurrencia de tragedias como ésta, que a todas luces podría haberse evitado si hubiera mediado un poco más de responsabilidad por parte del conductor que tomó el volante tras haber consumido alcohol, y los mismos pasajeros, que se expusieron a viajar en esas condiciones.
La respuesta a esta interrogante es compleja, ya que existen campañas informativas, hay control policial y constantes llamados a conducir con precaución y en óptimas condiciones. Y aún así siguen ocurriendo tragedias y falleciendo personas en La Región.
Desafortunadamente el de Angol no será el único accidente que se registre durante el verano en La Araucanía. Por ello se debe extremar las medidas de precaución y a la vez generar una real toma de conciencia por parte de los conductores, a fin de evitar hechos como el ocurrido en la madrugada del sábado y que acabó con la vida de dos jóvenes.
Chile en materia de transporte ferroviario ha ido a la inversa de lo que hace el resto del mundo. El anuncio reciente del Gobierno respecto a restaurar para el país la recordada red ferroviaria que cubría de Santiago a Puerto Montt y ramales, a muchos nos hace recordar una movilidad que tenía hermosas historias.
Por ejemplo, nunca he olvidado un viaje en tren en España en el convoy conocido como AVE, Madrid-Sevilla, que tiene la misma distancia que de Temuco a Santiago. Nos demoramos dos horas con diez minutos, si dicho tren llegaba con cinco minutos de retraso se devolvía el boleto a los pasajeros.
En una segunda experiencia en China, uno de estos transportes me trasladó a una provincia a 574 kilómetros por hora, y en el interior de los vagones ningún movimiento brusco. Ahora Japón ha terminado y pondrá a la venta un tren que lo hará a 900 kilómetros por hora, igual que un avión comercial intercontinental.
Por razones de un golpe militar volví a tomar este medio terrestre en el año 1990. Al subir a los mismos carros, seguían las alfombras gastadas y las mismas ventanas filtrando viento e incluso algo de lluvia. Pero hay que contar la historia completa: los gobiernos democráticos de izquierda y derecha nada mejoraron en este tema. Al revés, uno de los gobiernos que apoyé compró en una dudosa operación trenes usados a España que cumplían el papel de alimentadores de la línea central ferroviaria, no más de 80 kilómetros de recorrido. Pues bien, nuestros técnicos los hicieron recorrer de Santiago a Puerto Montt, reventaron las máquinas y hoy son fierro arrumbados. Mi gobierno, desechó comprar trenes nuevos a China.
La puesta en marcha de un ferrocarril hará reaparecer las inmóviles estaciones que se repletaban de personas esperando a sus familias o simplemente como un paseo como ocurría en nuestra Región con la Estación de Victoria, en donde incluso se colocaban parlantes que irradiaban música, cientos de cabezas entusiasmadas asomadas en el tren al sur, Santiago-Puerto Montt-Santiago, gozando del espectáculo humano.
Volveríamos a bajarnos en Renaico a comprar las ricas tortillas de rescoldo, en Chillán a tomar el reponedor café con malicia, y en Curicó a comprar las afamadas tortillas dulces que eran apreciadas como regalos.
Si a Santiago, gran chupador de nuestros impuestos, se le llenará con buses eléctricos y con estaciones de Metro, a nosotros sería de justicia que se nos dotara de trenes modernos de alta velocidad... Como diría un creyente: amén.