Reino Unido: ciudadanos pidieron en las calles otro referendo para el Brexit
ECONOMÍA. Miles de británicos marcharon ayer por el centro de Londres.
Miles de personas protestaron ayer en el centro de Londres pidiendo al Gobierno de Theresa May la realización de un nuevo referendum para decidir si Gran Bretaña continúa o no en la Unión Europea (UE), tras meses de negociaciones inconclusas con las 28 economías que forman el bloque.
La "Marcha Electoral del Pueblo" convergió frente al Parlamento, donde los manifestantes agitaron banderas de la UE y carteles elogiando las viejas relaciones entre Gran Bretaña y el continente.
El líder liberal demócrata Vince Cable, invitado a encabezar la manifestación, escribió en su cuenta de Twitter que "ha venido mucha gente de todo tipo, de todas las edades y de todo el país. Somos un país que ahora prefiere el 'quedarse', con 60% en favor de detener el caos del Brexit".
La policía no informó el número de asistentes, pero el legislador independiente Chuka Umunna y otras personas a favor del referendum calcularon alrededor de un millón de personas.
En paralelo, más de cuatro millones de personas apoyaron una petición electrónica esta semana para revocar el Artículo 50, que desató formalmente el proceso de Brexit.
Dudas
La marcha ocurrió mientras May se opone a una nueva elección sobre su golpeado plan de divorcio, que el Parlamento ha rechazado dos veces. La líder británica, según Associated Press, escribió a los legisladores el viernes en la noche, diciendo que tal vez no llevará su plan de retiro a votación en el Parlamento la próxima semana. May, anteriormente, señaló que solo presentaría su plan de nuevo si ve que hay suficientes votos para aprobarlo.
"Parece que no hay suficiente apoyo para volver a presentar el acuerdo la próxima semana. Si la Cámara la rechaza de nuevo, podemos pedir otra extensión antes del 12 de abril, pero eso no incluirá tener elecciones parlamentarias europeas", señaló la primera ministra.
Casi tres años después de que los británicos votaron a favor de retirar a Gran Bretaña del bloque, los líderes de la UE asumieron el control del programa de Brexit para evitar una salida caótica el 29 de marzo, que podría desestabilizar al grupo comercial más grande del mundo y tener un efecto negativo sobre Gran Bretaña.