Era enero del año 2009 y Espacio Didaskalia (Quillahue 01450), un pequeño Centro Cultural ubicado al frente del Teatro Municipal de Temuco, abría por primera vez sus puertas al público con una temporada de la obra de teatro "Tartufo o el impostor", la cual fue financiada por esos años a través de un Fondart. Así comenzaba una historia liderada por el actor temuquense Álvaro Escalona, y que durante diez años ha albergado a distintas agrupaciones de teatro, danza y circo, entre otras expresiones escénicas, que han encontrado en Didaskalia un oasis cultural en el, a ratos, apático Temuco.
-¿Cómo comenzó este proyecto que hoy conocemos como Didaskalia?
-Este fue un proyecto familiar, acá había una casa que era de la familia Escalona, de mis tías, y se me cedió este espacio para poder desarmarlo, con aportes familiares y personales fuimos juntando para construir esta casa de a poco, que empezó a funcionar el 2009 y se terminó de construir ese mismo año. Todo esto fue una apuesta, pero no solo la casa, sino el atreverse a estudiar una carrera tan autogestionada como es las artes, y más encima en Temuco, quedándose aquí.
-¿Cómo ha sido la experiencia de crear un lugar físico para la creación cultural en la capital regional?
-Yo funcioné dos años con este sistema de sala de ensayos, funciones teatrales, talleres artísticos; luego de eso me fui a estudiar a Buenos Aires y la casa quedó en arriendo con la Academia de Baile Temuco Mambo y ellos se dedicaron durante cuatro años a fomentar esa área, hasta que volví y retomé el 2016 el tema de talleres de teatro de circo para adultos y niños, formación actoral, danza, funciones y salas de ensayo para distintas compañías. Han pasado cerca de siete compañías, hasta ahora, que han estado durante meses creando obras, creaciones que están circulando por muchas parte de Chile.
-¿Qué ha sido lo más complejo de mantener un espacio cultural en Temuco?
-La visión primordial de esta casa es la formación de audiencias, entonces estamos haciendo un trabajo en todos estos años enfocado a que la gente se acostumbre a que el arte es muy necesario para todo ser humano, hace bien venir a talleres artísticos, a ver obras, magia, circo, pero claro, en cuanto a lo económico a veces es difícil llevar el buque, pero la voluntad es lo que nos ha movido, esa convicción, porque mientras el arte esté en Temuco, esta casa va a seguir funcionando.
-Imagino que hay mucha gente detrás de este proyecto, que ha creído y sostenido este lugar de forma independiente...
-Por supuesto, por eso nuestro eslogan es "Espacio Didaskalia, el espacio lo haces tú", porque sin artistas no somos nada, sin artistas la casa no funciona, sin movimiento, sin el talento, sin el compromiso de los artistas de diferentes índoles, no habría Didaskalia, ellos permiten que sigamos potenciándonos, y hemos crecido mucho, nos proyectamos para más.
-¿Qué ha permitido que Espacio Didaskalia se mantenga en el tiempo, a diferencia de otras iniciativas culturales similares, que no han corrido la misma suerte?
-La voluntad, porque esto es propio y no me lo va a quitar nadie (risas), cuando empezamos no teníamos para nada, pero hay alternativas y ahora estamos bien, funcionando y visualizándonos para muchos años más. Queremos que existan más espacios como éste y con más apoyo desde el municipio, para fomentar y potenciar el trabajo artístico de la Región, porque hay creaciones imponentes que se están haciendo en Temuco, todos los años hay 3 o 4 montajes nuevos en las distintas compañías que están circulando.
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"Todo esto fue una apuesta, pero no solo la casa, sino el atreverse a estudiar una carrera tan autogestionada como es las artes, y más encima en Temuco"."
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"Han pasado cerca de siete compañías, hasta ahora, que han estado durante meses creando obras, creaciones que están circulando por muchas partes de Chile"."
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"El arte es muy necesario para todo ser humano, hace bien venir a talleres artísticos, a ver obras, magia, circo"."
