Modernización laboral
En el marco del Día del Trabajo, el Presidente Piñera firmó un proyecto de modernización laboral que busca compatibilizar de mejor manera el trabajo con la familia y con la inclusión. El proyecto se basa en tres grandes ejes: jornadas laborales más flexibles para una mejor calidad de vida; normas de protección a los trabajadores; inclusión, respeto y dignidad en el mundo laboral. Si bien es un proyecto extenso que vale la pena revisar, quisiera destacar algunas medidas.
Para aumentar la adaptabilidad de la jornada laboral, en vez de lo establecido actualmente -que no puede exceder las 45 horas semanales y debe distribuirse entre 5 y 6 días a la semana- el proyecto propone una jornada de 180 horas mensuales, distribuida de forma igual o diferente cada semana, entre 4 y 6 días semanales. Además, se crearán "bolsas" de horas extraordinarias cuyo límite será semanal o mensual, y no por día como es actualmente, las que podrán compensarse con días adicionales de vacaciones. También se busca promover la formalización del trabajo en eventos no permanentes que actualmente se pagan indebidamente mediante boleta de honorarios, reforzar la normativa en materia de acoso sexual y laboral, y con el fin de fomentar la educación y capacitación, otorgar facilidades para que los trabajadores puedan finalizar sus estudios escolares y eliminar el tope de edad máxima para postular a programas Sence en caso de que el trabajador, voluntariamente, quiera seguir trabajando, entre otras medidas destacables.
Andrés Molina Magofke, diputado Evópoli distrito 23
Potenciemos el talento
Según cifras de la Ocde, Chile es el país con más emprendedores per cápita del mundo y hoy está muy bien posicionado como un importante HUB de innovación en la Región. Somos testigos de cómo el emprendimiento se ha ido tomando la agenda: programas especializados, secciones en los medios de comunicación y proyectos de ley, son algunas muestras de su relevancia. Incluso, según el estudio Emprendo en Chile, realizado por Sodexo Beneficios e Incentivos, un 81% de los encuestados señala que el emprendimiento es fundamental para el país y un 51% tiene ganas de emprender en un futuro.
Estamos avanzando, pero falta muchísimo: solo 9 de cada 10 emprendimientos sobreviven al quinto año y, de éstos, un 60% es de niveles socioeconómico medio-alto. ¿Por qué? Un 64% de los chilenos señala que es por falta de capital y un 57% considera que es difícil emprender.
Sabemos que no basta con el financiamiento para surgir, más importante aún es contar con consejos oportunos y redes de contactos. Es por esto que nace el G100, un grupo de emprendedores que busca fomentar e incentivar esta práctica, contribuyendo con recursos, experiencia y contactos, porque estamos convencidos de que el emprendimiento puede y debe democratizarse.
Hemos puesto nuestras energías en la producción de "Nada te detiene", un programa de talentos para emprendedores que próximamente será transmitido por TVN. En un mes postularon casi 2.500 emprendedores y los 100 finalistas están siendo mentoreados por miembros del G100 entre los que se encuentran emprendedores de la talla de Víctor Moller de Hortifrut, Sergio Cardone de Falabella y Arístides Benavente de Komax, quienes apoyarán a los emprendedores durante el proceso, y seguramente más allá de finalizado el programa.
El talento se distribuye de manera normal. Pero el acceso al capital, consejos/mentorías y contactos, no. Esta "falla", terriblemente injusta, solo se puede corregir con un Estado moderno, un mercado competitivo y una sociedad civil involucrada. Nuestro sueño es que en un futuro cercano, nadie en Chile pueda decir que su origen fue el único condicionante de su destino, sino que éste fue consecuencia de la audacia, la ética, el esfuerzo y el talento que desplegó durante el camino..
Nicolás Shea, fundador de Cumplo Presidente del G100
Diálogo de necesitados
Más allá de las sonrisas de cortesía y la foto de rigor, la rueda de conversaciones entre el presidente de la República y los líderes de los partidos políticos representados en el Parlamento constituye una maniobra de salvataje en términos de comunicación política. Y ello vale para ambas partes.
El gobierno alcanzó, al cabo de un año, su nivel máximo de rechazo en las encuestas. Su aprobación, no es en todo caso despreciable. Ello le permite un margen de acción para intentar revertir la tendencia a la baja.
Y este es el momento. Si en el presente año no se logran avances sustantivos y perceptibles ante la ciudadanía en materia de reformas que la beneficien, será probablemente muy tarde para su intento de mantener la coalición gobernante en el poder. La oposición, en tanto, cuenta con mayoría numérica en el Congreso, pero durante un año no ha logrado concertar un frente común.
A ambos extremos del espectro político están quienes se restaron al diálogo y solo esperan que este fracase y así poder justificar su intransigencia.
Jorge Gillies, Facultad de Humanidades y Tecnología Comunicación Social, UTEM