Frases
"Este operativo tiene un impacto importante en las listas de espera".
— René Lopetegui,"Sabemos que practicar deporte competitivo implica muchos gastos".
— Manuel Salas,"Este operativo tiene un impacto importante en las listas de espera".
— René Lopetegui,"Sabemos que practicar deporte competitivo implica muchos gastos".
— Manuel Salas,Con satisfacción y orgullo, la comuna de Lautaro festeja los 23 años de su Coro de Profesores, que nació por la inquietud de un grupo de docentes por cultivar las artes corales. Hoy, el coro se ha consolidado dentro y fuera de la Ciudad del Toqui, recorriendo escenarios y llevando el nombre de Lautaro a diversos escenarios.
La Araucanía cuenta con 28 casos confirmados de virus A H1N1, de evolución leve, de acuerdo con lo señalado a El Austral desde la Secretaría Regional Ministerial de Salud. La autoridad sanitaria informó que se intensificarán los controles sobre higiene en sitios de aglomeración de público, entre otras medidas.
Las intensas nevadas que en las últimas semanas han caído en la zona cordillerana de La Araucanía han permitido a los administradores de los Centros de Esquí de Corral, Las Araucarias y Pucón adelantar la temporada de nieve 2018. Inicia Corralco, abriendo sus puertas este viernes en la comuna de Curacacautín.
El pasado 6 de mayo se conmemoró el Día del Nutricionista, pero este año no es un año cualquiera, se cumplen 80 años de la creación de nuestra profesión, que desde sus inicios, se ha visto enfrentada a constantes desafíos.
Corría 1939, y producto de la situación bélica de Europa, arribaron a Chile varios profesionales destacados, entre ellos el doctor Esteban Kemeny, médico húngaro, quien fundó la escuela de Dietistas en el Hospital San Borja Arriarán en Santiago. En aquella época uno de los objetivos de la profesión era la recuperación de los pacientes hospitalizados por medio de la dietoterapia, pero además, debido a los altos índices de pobreza, falta de educación y condiciones precarias de vida, existía una alta prevalencia de desnutrición, en especial en la población materno infantil, traduciéndose ésta en una alta tasa de mortalidad y baja esperanza de vida. Este problema fue por décadas el gran desafío de nuestra profesión, e hizo sentir la necesidad de modificar la visión recuperativa que se tenía hasta entonces, por una mirada enfocada en la prevención, produciéndose a fines de la década del 60, un cambio de dietistas a nutricionistas. Este cambio de paradigma contribuyó a la creación de políticas públicas centradas en la prevención de la desnutrición, como la promoción de la lactancia materna y la creación de instituciones destinadas al apoyo de la alimentación de los escolares, políticas que permitieron ya en los años 90, erradicar la desnutrición.
Pero el país cambió y los chilenos mejoramos nuestras condiciones de vida: tenemos acceso a automóvil y electrodomésticos, y producto de la globalización, tenemos mayor acceso a alimentos principalmente foráneos. También nos hemos visto envueltos en los ritmos vertiginosos que caracterizan la vida actual. Sumando todo esto, nuestra situación nutricional cambió y nos trasladamos rápidamente al otro extremo, y de acuerdo a la cifras entregadas por la última Encuesta Nacional de Salud del año 2017, el 74,2% de los adultos chilenos presenta algún tipo de mal nutrición por exceso: sobrepeso, obesidad u obesidad mórbida, además, solo el 5,3% se alimenta de forma saludable y menos del 20% realiza actividad física.
¿Y cómo solucionamos esto? ¿Podemos revertir esta situación solos como gremio? El gran desafío que tenemos como profesión hoy en día, es precisamente hacer ver y concientizar a nuestro entorno, que los cambios no se logran solos, que no vienen de un solo sector. Debemos lograr en primer lugar, un compromiso por parte del Estado y las instituciones, para crear instancias de protección de la alimentación, que involucren desde la calidad, la accesibilidad a alimentos saludables, el costo, la inocuidad y la pertinencia cultural, y una concientización en la sociedad civil, ya que la alimentación, siendo un pilar tan importante en la salud, no puede ser relegada al último eslabón de prioridades en la vida de las personas.
Gloria Muñoz,
nutricionista y académica U. Autónoma de Chile
La donación de órganos es un acto de profundo afecto por el otro, un ejemplo a imitar. Son miles los pacientes que esperan la donación de órganos para trasplantarse y que jornada a jornada habitan con esa esperanza. El problema es que se revela la falta de conciencia acerca de la posibilidad de salvar vidas por esta vía. Es atendible que ante la muerte de un ser querido predomine el sentimiento de la aflicción, pero llama la atención que en muchos casos los familiares no respetan la determinación de las personas que en vida han decidido ser donantes.
En la actualidad, el Hospital Regional Hernán Henríquez Aravena de Temuco registra 80 pacientes en lista de espera de los cuales 60 son activos, es decir, que poseen las condiciones ideales para ser evaluados y se encuentran a la espera del llamado que les comunica la existencia de un órgano compatible.
En octubre de 2013 comenzó a regir en Chile la Ley del Donante Universal de Órganos, que establece que toda persona mayor de 18 años es donante potencial, a menos que formalice ante notario su voluntad contraria. El espíritu de esta norma es incrementar las posibilidades de trasplantes al contar con un universo más amplio de personas en condiciones de entregar órganos al fallecer.
Es cierto que la muerte significa un padecimiento para las familias de los donantes y quienes esperan los órganos en momentos de suma complejidad. Pero este procedimiento es la única posibilidad para dar vida a terceros.
Los procedimientos quirúrgicos para los trasplantes se han perfeccionado y la experiencia adquirida constituye en todo el mundo y en nuestro país una alternativa válida para enfrentar enfermedades que de otra forma no tendrían curación posible dado el deterioro del órgano y las condiciones del enfermo. La donación puede traer resignación e incluso conformidad, cuando las familias ven que los órganos de su ser querido están contribuyendo a la prolongación de la vida de otra persona.
Se trata de un acto de amor. No perdamos aquello.