Rodrigo Zamorano C.
Fiscales y analistas de la Unidad de Análisis Criminal y Focos Investigativos (SACFI) del Ministerio Público de La Araucanía indagan más de 20 casos reportados de robos y caza ilegal de ciervos en la comuna de Villarrica.
Los hechos delictuales han tenido lugar dentro de un área rural delimitada de la zona lacustre, donde están ubicados distintos fundos como El Dorado, San Cristóbal y Flor del Lago, los cuales se dedican a la crianza de ciervos.
Desde el Ministerio Público aseguran que la crianza de estos animales es maliciosamente aprovechada por cazadores furtivos, quienes sin la autorización de los propietarios de dichos predios ingresan a los recintos y utilizando armas de fuego, cazan los ciervos para luego apropiarse de su carne y cornamentas.
Los analistas de la Fiscalía detectaron 28 causas relacionadas, de cuya lectura se logró la asociación de 21 denuncias, las que fueron incorporadas al foco investigativo de la SACFI lo que dio cuenta explícita de la caza furtiva de ciervos o bien, de acciones ilícitas emprendidas en relación a este fenómeno delictual.
Cifras millonarias
El fiscal jefe de la Unidad de Análisis Criminal, Cristián Voullieme, afirmó que la indagatoria abarca un gran número de personas, entre ellas quienes cazan furtivamente los animales, como aquellas que compran la carne de ciervo, altamente apetecida por restaurantes de alta gama en la zona lacustre.
"Hemos detectado que existe todo un mercado que rodea esta matanza de animales en los campos de Villarrica, para posteriormente vender las cornamentas o las cabezas completas de los ciervos y la carne de las especies", dijo.
Voullieme precisó que "es habitual que en las denuncias se haga mención a cifras millonarias por los valores de los ciervos, por lo tanto efectivamente se trata de hechos que son altamente lucrativos para algunas personas".
El fiscal detalló que una pieza de ciervo completa puede llegar a los $ 20 millones.
"Lo que queremos atacar es el mercado completo, desde las personas que se dedican a matar y sustraer los animales, hasta las personas que comercializan los productos, vendiendo y comprando", señaló el persecutor.
Hurto y receptación
El fiscal comentó que los principales delitos que se investigan en la indagatoria corresponden al robo o hurto de los ciervos, así como también al ilícito de receptación por parte de quienes compran las piezas de los ciervos cazados furtivamente.
"Asimismo, está el delito de porte o tenencia ilegal de arma de fuego de las personas que están ingresando a cazar furtivamente o aquellas que piensan que están cazando en virtud de un contrato para realizar caza legalmente", aseveró Voullieme.
El fiscal indicó que dentro de la investigación se ha podido establecer además que hay sujetos que han estado vendiendo tour de caza al interior de los predios donde se crían ciervos, sin ser los dueños.
Cotos de caza
Cabe precisar que en ciertos predios de Villarrica existen zonas habilitadas como cotos privados de caza, donde los propietarios han introducido la especie del ciervo rojo con la finalidad de ofrecer el servicio de caza mayor, cumpliendo las exigencias descritas en la Ley.
Esta circunstancia, transforma a estos lugares en sitios deseados por quienes practican actividades de caza mayor, dando oportunidad a que ingresen sin autorización para capturar y matar dichos ejemplares.
Voullieme incluso señala que en determinados casos se ofrece irregularmente el desarrollo de la actividad como si se tratase de un predio con coto de caza liberado, lucrando irregularmente con la captura y faenamiento de ciervos.
Las actividades de caza furtiva, de acuerdo a lo relatado desde la Fiscalía de Villarrica, son acciones que se han prolongado en el tiempo durante los últimos años (ver recuadro) constituyendo un problema crónico, que se mantiene, no obstante los esfuerzos de las víctimas en reforzar las medidas de seguridad contratando cuidadores e instalando cámaras de vigilancia.
Incremento en las denuncias
En lo que se refiere a la distribución de los delitos analizados por la Fiscalía, los analistas observaron que a partir del año 2016, ha existido un incremento de denuncias, llegando a 10 para el año 2018, las que corresponden al 48% del total indagado. El informe por año del foco investigativo precisa que el 2016 se registraron dos denuncias, el 2017 las causas llegaron a 4, mientras que al año siguiente se dispararon a 10. Para el año 2019, en tanto, ya se registran cinco denuncias por el delito de robo de animales hasta el 20 de mayo.
"Hemos detectado que existe todo un mercado que rodea esta matanza de animales en los campos de Villarrica, para posteriormente robar la carne y cornamentas".
Cristian Voullieme,, fiscal jefe de la Unidad de, Análisis Criminal.