Rodrigo Zamorano C.
A través de una declaración pública, el Ministerio de Salud (Minsal) aclaró que el joven de Lonquimay, Carlos Parra Lizana, quien manifestó sus deseos de donar sus órganos y cuyo procuramiento no se llevó a cabo, "fue evaluado, estableciéndose que no cumplía con los criterios para certificación de muerte encefálica".
Lo anterior, precisó el Minsal, significó que "la condición de gravedad y de daño no permitió avanzar a adquirir la condición de donante".
Pese a ello, desde el Ministerio indicaron que valoran "la disposición de su familia de cumplir con la intención del joven de ser donante de órganos".
Asimismo el ministerio comunicó que "lamentamos el fallecimiento del joven Carlos Parra Lizama (27 años) y extendemos nuestro pésame a la familia".
El caso se conoció ayer tras la denuncia que hicieron llegar familiares de Parra, asegurando que se trataba de un caso similar al ocurrido con el kinesiólogo Joaquín Bustos.
Junto a la declaración pública, el médico Juan Eduardo Sánchez, coordinador nacional de trasplantes, añadió que "el joven nunca llegó a la condición de candidato a ser donante. Tuvo un importante politraumatismo grave, cuyas lesiones fueron evaluadas efectivamente en el Hospital de Temuco".
Sánchez aseveró que allí "se estableció que esas lesiones eran muy graves y que no reunió la estabilización que se necesita para poder llevar adelante un proceso que lo llevara a ser donante. Para eso tiene que existir muerte encefálica y en este caso no reunía las condiciones para poder diagnosticarlo como tal".
VOLUTAD
El coordinador nacional comentó además que "por supuesto que entendemos y es muy bueno que las personas quieran donar sus órganos porque efectivamente representa una alternativa terapéutica para otros y comprendemos que ese gesto altruista resulta ser súper relevante y es lo que nosotros necesitamos exista a nivel del país".
Sánchez indicó que "sin perjuicio de ello, el diagnóstico de muerte encefálica es un proceso que está claramente establecido y entretanto no se cumplan las condiciones que permitan hacerlo, no existe ninguna posibilidad que la persona sea donante".
Consultado por una comunicación de tal protocolo a la familia, Sánchez aseveró que "en tanto un paciente no reúna las condiciones para ser donante, nosotros no tenemos las condiciones para plantearle a la familia la donación de órganos".
El médico precisó que "la familia podrá plantear el deseo y uno le podrá expresar que no reúne las condiciones. Aquí, al no morir por criterio de muerte encefálica, no existe la posibilidad que nosotros les solicitemos los órganos a la familia"