Más de 36 mil llamadas inoficiosas recibió durante el año 2019 el fono de emergencias 131 del Servicio de Atención Médica de Urgencia (Samu) en la Región de La Araucanía.

De acuerdo a lo informado desde el organismo sanitario a El Austral, durante todo el año pasado se recepcionaron poco más de 70 mil llamadas al centro regulador que atiende el teléfono de emergencias 131.

De esas llamadas, el 52% son calificadas como "impertinentes", es decir, que no conllevan a la atención de ninguna urgencia y solo atochan el sistema: pitanzas, acoso al personal de atención telefónica, insultos y solicitudes que no corresponden.

"La mitad de esas llamadas inoficiosas son para pedir información de temas de salud, como si está abierto el consultorio, cuál es la farmacia de turno o qué puede hacer porque tiene un determinado malestar físico. Hay un 17%, es decir 11 mil 900 llamados, que son insultos, garabatos, personas que llaman y cortan y otros que constantemente están acosando a las operadoras y los operadores. El resto son equivocaciones o personas que marcan el 131 pensando que es de Carabineros o de Bomberos", detalla el doctor Pablo Cantú, director regional del Samu Araucanía.

El samu araucanía

En La Araucanía, el Samu está formado por trece bases con profesionales en toda la Región, con una ambulancia avanzada -con implementos para atender emergencias complejas- en cada una de las bases, distribuidas en las comunas de Angol, Victoria y Collipulli, además de Lautaro, Pitrufquén, Villarrica, Nueva Imperial y la conurbación de Temuco-Padre Las Casas. A esa distribución se suma la inclusión de un móvil básico de cada comuna a la red del sistema de despacho del Samu en caso de emergencias mayores.

Todas las llamadas desde teléfonos fijos y celulares recaen en el centro regulador, ubicado en una base emplazada en el sector de la salida norte de Temuco. Allí trabajaban técnicos de enfermería en nivel superior como operadores, por lo que pueden entregar asistencia sanitaria apenas se detecta una emergencia real, como accidentes, atropellos, problemas respitorios, paros cardíacos, dificultades motoras severas, pérdidas de conciencia y otras situaciones de urgencia.

Atochamiento telefónico

El problema, según explica el doctor Cantú, recae en que hay un gran porcentaje de la población que "no tiene educación" en cuanto a distinguir si está frente a una emergencia médica que requiere la asistencia de una ambulancia o si se trata solo de un problema de salud que puede ser derivado en un taxi o un automóvil particular hacia un centro asistencial cercano, para recibir atención.

"Cuando recibimos una llamada por una urgencia no vital, es atendida y se explica que va a tener una espera y que si tiene algún tipo de transporte a la mano, lo tome y se dirija a un centro asistencial. Por mientras, el paciente queda registrado y el centro regulador tiene la orden de continuar efectuando llamadas al solicitante para verificar si el traslado por medios particulares se hizo y si no, se verifica si hay disponibilidad de que un móvil se desplace al lugar a prestar la asistencia y el traslado al centro asistencial", explica Cantú.

"Creo que esto ya tiene que ver con que nunca hemos podido realizar una buena campaña educacional e informativa para hacerle saber a las personas cuando no y cuando sí llamar al Samu. Hay mucha gente que llama creyendo que lo que tiene es una urgencia cuando en realidad es un cuadro de diarrea, un dolor de guata o fiebre, cosas que no son una emergencia vital y que la gente se preocupa y llama pidiendo asistencia a su domicilio, cuando aquello no corresponde. Pero nuestro personal que es profesional capacitado tiene paciencia para explicar con consejos médicos y calmar aquello, entregando orientación y consejos", agrega el jefe regional del Samu.

Cantú insistió en cuanto a hacer un buen uso del teléfono de emergencias y pidió a la población que no cuelgue una vez que llama al 131, ya que en medio de ese atochamiento telefónico "quien corta y vuelve a llamar, vuelve a quedar al final de una fila". "El 131 puede salvar vidas y hay que saberlo usar", cerró.

El jefe regional del Samu también corroboró que también hay casos de quienes "agrandan la emergencia o la situación" para que vaya personal paramédico a un domicilio cuando, en realidad, se trata de un malestar menor o de un control médico para el cual no era necesaria una movilización de un móvil. "Son pocos, pero hay casos donde solo requerían una atención de personal sanitario para corroborar un malestar o verificar un índice como la presión o un control", dijo.

70 mil llamadas recibió durante todo el año pasado el teléfono de emergencias 131 del Samu Araucanía.

13 bases tiene el Samu en comunas de Malleco y Cautín.