¿Y cuándo la interpelación a los diputados?
Así como los diputados hoy pueden interpelar a cualquier ministro de Estado, para interrogarlo por sus actuaciones y toma de decisiones en temas propios de su cartera, sería muy interesante que también los electores tuvieran la misma facultad de llamar a sus diputados para ser interpelados.
Lo anterior, para que respondieran por lo que prometieron en la campaña electoral y no han cumplido, por lo que dejaron de hacer al privilegiar sus intereses personales, familiares o grupales político partidistas frente a los de sus electores que los eligieron para que los representen y para lo cual les otorgaron un mandato.
Muchos dirán que "para eso existen las elecciones, para que el elector los vuelva a elegir o los deseche, dependiendo de sus actuaciones en el ejercicio de su cargo". Pero considerando que los chilenos tenemos tan mala memoria en lo referente a recordar nombres y caras de candidatos y relacionarlos con colusiones, corrupciones, nepotismos, informaciones privilegiadas, dietas, días de la brisca, etcétera, existen numerosísimos ejemplos de ello, lo ideal es que durante el período de la gestión de un diputado o de un senador (no después, porque ya no sirve) pudiera ser interpelado por sus electores, en vivo y en directo, en cadena de TV para todo Chile. De seguro las caras del Congreso cambiarían drásticamente.
Raya para la suma:
No puede ser posible que una vez elegidos diputados y senadores, no tengan que rendir cuentas a sus electores en pleno ejercicio de sus cargos. Su elección no debe ser un cheque en blanco y después si te he visto en la feria del domingo o me saqué una foto con usted o le regalé un calendario, ni me acuerdo.
"Con la misma vara que interpelan, deberían ser interpelados".
Luis Enrique Soler Milla
Economía
A este paso los constituyentes y los congresistas no necesitarán mesas ni sillas ni pupitres para realizar su trabajo, pues deberán legislar de rodillas.
Rodrigo Hernando Díaz
Analfabetismo financiero
Es alarmante constatar que la deuda de los hogares continúa en los máximos históricos, según confirmó el Banco Central al cierre de 2019.
Según el informe, la deuda de los hogares en Chile llegó a un 75%, lo que representa un alza de 2,9% en comparación con el tercer trimestre de 2018.
Sin desconocer que parte de este endeudamiento obedece a un sinnúmero de causales, es preocupante comprobar el bajo interés que tienen los colegios en Chile por integrar la educación financiera de forma permanente en sus programas de estudio.
La escasa preocupación por tratar estos temas al interior de las aulas ha generado graves consecuencias, como el sobreendeudamiento, la ausencia de ahorro o la ineficiencia en el manejo de las finanzas personales, lo que explica el analfabetismo financiero que impera hoy en nuestra sociedad.
Ante la falta de una política gubernamental que promueva los compromisos financieros desde temprana edad, se hace indispensable que la educación pública y privada tome un rol más protagónico y que asuma un compromiso real por educar a los niños en el valor del dinero y en habilidades que les permitan disfrutar de una mejor calidad de vida en su adultez.
Víctor Barahona, gerente general Red Educacional Cognita Chile
Interpelación por pensiones
Luego de ver la interpelación a la ministra del Trabajo sobre pensiones, mi visión es más bien pesimista respecto al nivel de parlamentarios de la centro izquierda y que, al ser mayoría, posiblemente explique la dificultad de avanzar en distintas políticas públicas para mejorar la calidad de vida de los más vulnerables.
En Chile, de los 3 millones de adultos mayores existentes, solo el 4% vive bajo la línea de la pobreza. Este grupo etario es, de hecho, menos pobre que el promedio de la población, en la cual quienes viven bajo la línea de la pobreza es superior, alcanzando el 7%.
El interpelador de la ministra parece no entender que un Estado funciona como un sistema, sumando una serie de programas sociales que ayudan a las personas más vulnerables de Chile. Exigir que un cambio al Sistema de Pensiones supla la acción coordinada de varios Ministerios y varios programas sociales para superar la pobreza es simplemente renunciar a hacer políticas públicas y legislar basados en la buena "cuña".
Soledad Rodríguez