Prepago de Chile
Al seguir los informes diarios del ministro de Salud, Jaime Mañalich, se percibe que hay en él, su equipo y el Comité de Expertos un conocimiento acabado y un cierto control de la evolución de los contagios en el país, y que se están tomando medidas oportunas, bien pensadas, no a tontas y a locas, en cada situación que requiere decisiones.
Ver esos informes diarios del ministro deja la sensación de estar en buenas manos. Gracias a la gestión de Mañalich los chilenos estamos cada día menos nerviosos frente a esta terrible amenaza pero, a la vez, muy conscientes de lo que debemos hacer para ayudar a detenerla. La mejor prueba de esa tranquilidad relativa es que hace un par de días un pequeño grupo esgrimía carteles, igual que antes de llegar la pandemia, con reclamos varios donde al final se leía : ¡Renuncia Mañalich!
José Luis Hernández Vidal
¿Culpa del neoliberalismo?
Ante el difícil momento económico proyectado para nuestro país, se ha vuelto costumbre que diversas opiniones expresadas a través de la prensa argumenten que esto es una nueva muestra de la debilidad del neoliberalismo para enfrentar cualquier crisis que le ponga freno a las operaciones del mercado.
En realidad, esto es un problema de cualquier economía globalizada y no responde a contenidos específicos del neoliberalismo. El primer argumento, que debería ser evidente, es que todos los países, sin distinción ideológica alguna, al dejar de producir deterioran gravemente su economía.
El segundo argumento es que ninguna economía que se erija gracias al comercio internacional se sostiene sin él. Solo por dar un ejemplo, muy anterior al neoliberalismo, la ciudad de Brujas, durante todo el siglo XIV, fue el centro financiero de Europa occidental gracias a sus privilegiadas rutas comerciales. Bastó una sola crisis de la naturaleza, a saber, la sedimentación del río Zwym, para que la ciudad decayera totalmente. Quizás abrir la mente nos permitiría apreciar que la mayoría de los males que nos aquejan han ocurrido y seguirán ocurriendo con o sin el neoliberalismo.
Pedro San Martín Ahumada
Propuesta bono para funcionarios de salud
Al leer la noticia de senadores de la Región de Los Ríos que proponen bono a funcionarios de la salud, sería bueno que incluyeran a recolectores de basura, trabajadores de supermercados, etcétera. Y también sería bueno que digan cuanto de sus sueldos van a donar. O sea, es fácil ofrecer bonos con plata ajena y llevar a lo menos desde el 18 de octubre sin bajar sus dietas.
Rodrigo Soto Vargas
Epidemia de demagogia
Ni la crisis de coronavirus pone en cuarentena la epidemia de demagogia y ausencia de ética de panelistas y políticos figurones en los matinales de TV y programas de radio.
Estos iluminados han escarnecido, con razón eso sí, a algunos pastores charlatanes y personas que violan las cuarentenas, pero no se atrevieron a abrir la boca contra las chicas súper-poderosas, incluyendo profesionales del sector salud, que marcharon el 8 de marzo, desafiando el brote que ya estaba en Santiago.
Tampoco fueron vehementes contra los marchantes del Día del Delincuente y poco dicen contra los insurgentes que siguen atacando los cuarteles policiales y quemando la propiedad privada.
Samuel Comte Jeria
Cambios en la economía por el coronavirus
La economía del covid-19, nos dejara varias enseñanzas. La primera es el aumento en la creación de empresas y servicios, que trabajan en función del aseo, desinfección y sanitización, ya que este virus, no desaparecerá de un día para otro, sino que tendremos que convivir con él por muchos años más.
Por otra parte, los servicios por básicos que sean, deberán ser solicitados por medio de aplicaciones y canales remotos, de una forma personalizada, con respuesta al hogar y llegando al cliente de una forma óptima y con bioseguridad.
La economía como ciencia social, que la realizan las personas, no será la misma luego de esta epidemia, todos y absolutamente todos nos deberemos reconvertir laboral y familiarmente, para adecuarnos a las nuevas reglas de este agente viral, que dejó de manifiesto brechas desde lo humano, político y científico, que modificarán para siempre nuestra conducta.
Gonzalo Valdés Lufi