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Donald Trump ofrece mandar al ejército para enfrentar los disturbios en Mineápolis

MENSAJE. El Presidente de EE.UU. acusó de pertenecer a la izquierda radical a los participantes de los graves incidentes desatados en la ciudad tras la muerte de un hombre afroamericano a manos de la policía.
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El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió ayer mano dura contra los manifestantes en Mineápolis (Minesota), a los que tachó de ser de "la izquierda radical", y expresó a las autoridades estatales su disposición de enviar al ejército para aplacar los disturbios durante las protestas contra la muerte de un hombre negro a manos de la policía.

"Tenemos el ejército preparado y dispuesto. Si (las autoridades de Minesota) quieren llamar al ejército, podemos tener las tropas sobre el terreno muy rápido", dijo Trump en declaraciones a periodistas en Washington, antes de partir hacia Florida para asistir al lanzamiento desde Cabo Cañaveral de la misión Demo-2 de la Nasa y SpaceX.

El Mandatario calificó a los manifestantes de antifascistas y de ser de la "izquierda radical", y consideró que las autoridades de Minesota deberían ser "más duras, más fuertes, porque siendo duros se honra la memoria de George Floyd".

La muerte de Floyd, un hombre de raza negra, a manos de policías en Mineápolis cuando era detenido el lunes pasado, desencadenó una ola de protestas y disturbios contra la brutalidad policial en esta ciudad y en otras partes del país, donde se han reproducido los altercados.

El gobernador de Minesota, Tim Walz, ordenó ayer la movilización completa de la Guardia Nacional (un cuerpo de reserva) del estado para hacer frente a la situación en Mineápolis, donde el viernes se declaró un toque de queda nocturno durante dos días que no ha logrado frenar los disturbios. "Lo de anoche fue una broma de que esto era acerca de la muerte de George Floyd. Va de atacar la sociedad civil, instigar el miedo y perturbar nuestras grandes ciudades", opinó Walz, que explicó que "la dinámica" ha cambiado desde el martes, cuando las manifestaciones eran pacíficas. "Hemos visto más gente de fuera de la ciudad, esto es inaceptable".

Minesota cuenta con 13.200 efectivos de la Guardia Nacional, pero no todos están preparados para el despliegue, por lo que las autoridades movilizaron ayer a 2.500, frente a los 1.700 informados inicialmente.

El general John Jensen, que comanda la Guardia Nacional en Minesota, reveló que han pedido asistencia al Pentágono y que ha mantenido conversaciones en las últimas 24 horas con el secretario de Defensa, Mark Esper. "Estamos mirando qué recursos podemos tener, si son de inteligencia o de otro tipo", destacó sin dar más detalles.

El ejército se prepara

El diario The New York Times, que citó a "funcionarios", apuntó que el Departamento de Defensa prepara el despliegue en Mineápolis de unidades en activo de la Policía Militar, a petición de Trump. De producirse, es posible que las primeras unidades en hacerlo serían las de Fort Bragg, de Carolina del Norte, y la de Fort Drum, en Nueva York, indicaron las fuentes consultadas por el periódico, que, no obstante, matizaron que la orden actual de "prepararse para desplegarse" no significa que vayan a ser activadas seguro, aunque se trata de un primer paso.

2.500 efectivos de la Guardia Nacional de Minesota fueron movilizados para enfrentar los disturbios.

Exitoso despegue de cohete de SpaceX

MISIÓN. La nave privada fue lanzada desde Cabo Cañaveral.
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Un cohete Falcon 9 de la compañía aeronáutica SpaceX con una nave en la que viajan dos astronautas de la Nasa despegó ayer desde Cabo Cañaveral (Florida) en el primer vuelo espacial con humanos a la Estación Espacial Internacional (EEI) desde suelo estadounidense en nueve años.

A las 15.22 hora local (19.22 GMT) el cohete despegó desde la plataforma 39A del Centro Espacial Kennedy ante la presencia del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, después de que el pasado miércoles se cancelara el lanzamiento por culpa de las malas condiciones meteorológicas.

A bordo de la cápsula Crew Dragon, situada en la punta del cohete, viajan Doug Harley y Bob Benhken, dos astronautas que participaron en las misiones de los transbordadores canceladas por la Nasa después del viaje del Atlantis en 2011.

"Es absolutamente un honor para nosotros formar parte de este gran esfuerzo de volver a poner a Estados Unidos en el mercado de los lanzamientos espaciales", dijo Behnken unos minutos antes de despegar.

"Gracias por todo el trabajo que han hecho y poner a Estados Unidos de nuevo en la órbita terrestre desde la costa de Florida", añadió Hurley ya desde el espacio.