En qué consiste la acusación y por qué Albania también acusó el golpe
El primer ministro albanés, Edi Rama, considera un golpe contra "Kosovo y todos los albaneses" la acusación de crímenes de guerra y lesa humanidad contra el presidente kosovar, Hashim Thaci, y el expresidente Kadri Veseli, por parte de la Fiscalía de las Salas de Justicia Especializadas de Kosovo.
"El espíritu desacreditador de la acusación destruye la misma presunción de inocencia. Esto la convierte en un rayo que golpea más allá de dos nombres, arroja lodo no simplemente sobre Thaci y Veseli, ni sobre el Ejército de Liberación de Kosovo (UCK), sino sobre Kosovo y todos los albaneses", afirmó Rama en una intervención parlamentaria.
En la acusación presentada hoy en La Haya y que debe ser aún confirmada por un juez del Tribunal Especial, el fiscal acusa a Thaci y a otras nueve personas de estar involucrados en la muerte de un centenar de albanokosovares, serbios, romaníes y opositores políticos, así como en supuestas torturas, persecuciones y desapariciones forzadas presuntamente cometidas entre 1998 y 2000 por el UCK.
El jefe del Gobierno albanés aseguró que, como todos los albaneses, se sentía afligido ante la idea de que Thaci y Veseli sean sospechosos de unos crímenes que "desafían los límites de la imaginación".
Según Rama, esta acusación forma parte de "un experimento internacional" y una "justicia selectiva", ya que otros líderes de Kosovo, exguerrilleros del UCK, se han sometido a investigaciones desde hace dos décadas mientras en Serbia esto no ha sucedido y, sin embargo, este país sigue abriendo capítulos en las negociaciones de adhesión a la Unión Europea (UE).
Para el primer ministro albanés, esta acusación equipara "abierta, indigna e implícitamente" a "víctimas y verdugos", en referencia a los albaneses de kosovo y los serbios que entre 1998 y 1999 se enfrentaron en un conflicto armado que derivó en la independencia de Kosovo.
Durante los años de la resistencia contra la entonces Yugoslavia (ahora Serbia), Thaci fue el principal líder político del UCK, encargado de recaudar dinero y conseguir armas para la lucha.
Rama recalcó en el Parlamento albanés que Thaci y Veseli sacrificaron su vida por la liberación del régimen nacional-comunista de Slobodan Milosevic, al que responsabilizó de la muerte de 10.000 albaneses, 20.000 violaciones a mujeres y el desplazamiento forzado de un millón de albaneses.
Esta acusación se produce cuando se espera para julio en Bruselas la reanudación del estancado diálogo entre Belgrado y Pristina para normalizar sus relaciones, auspiciado por la Unión Europea.