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AYER Y AHORA
- Felipe, ¿existe mucha diferencia entre tu candidatura de 2016 y la que presentas ahora?
- La diferencia tiene que ver con el instrumento en el cual hoy nos toca estar organizados. La vez anterior era un proceso de organizaciones que venían emergiendo desde el movimiento estudiantil y que terminan en el proyecto autonomista y otras organizaciones que fundan el Frente Amplio. Eso expresa nuestra intentona de construir un nuevo proyecto político para poner a disposición del país no solo ideas, sino un modelo de gobierno. A mi modo de ver, esta idea tuvo diferencias en el F.A., no fue bien tratada por este y eso ha implicado que en momentos históricos como el estallido social se expresen estas diferencias de proyecto. Ahí a nosotros nos toca dar un paso al costado debido a los principios políticos y éticos en el desarrollo del ejercicio de la política. Creemos que el Frente Amplio cometió un error de características históricas, prefirió estar en un Parlamento en la noche, limitando la expresión social y política que se estaba dando en las calles. Nuestra decisión fue mirar hacia las calles y mantenernos ahí. Hoy esto nos lleva a fundar Territorios en Red, que es una articulación de espacios locales que irá a la disputa del escenario electoral en distintas regiones, pero que le propone al país nuestra diferencia, que después de muchos años hemos logrado construir un modelo de gobierno, de justicia, de bienestar, de transparencia y de participación.
- Antes de tocar otros temas, el Pacto Unidos por el Cambio dice que intentó primarias para definir un candidato y que no aceptaste. Esto significa que la oposición irá con tres candidatos a las municipales en Temuco. ¿Podría esto atentar contra la opción real de una alternancia en el municipio?
- Creo que la estrategia de todos contra la derecha es una buena consigna, pero que en la práctica no ha traído resultados a la oposición. O sea, el error ahí es seguir entendiendo la política como el clivaje izquierda - derecha, cuando las mayorías sociales, ciudadanas, no están dentro de esa lógica. La ciudadanía hoy se organiza en función de lo común, de lo que la mueve, le interesa y le afecta inmediatamente, y eso no necesariamente se ordena en el clivaje en que se ordenan los partidos políticos. Por lo tanto, la oposición no logra entender eso, una cuestión que reventó el 18 de octubre de 2019. Creo que la conversación para avanzar en una oposición unida tiene que ver con lo programático primero, porque no tiene sentido asistir a una primaria donde no tenemos ningún tipo de acuerdo en lo político o de ideas. Además, tiene que ver con la forma en que se planean las cosas (…). Nuestra lectura hoy es que la decisión más importante este año tiene que ver con el plebiscito constituyente, ahí tenemos que poner nuestros esfuerzos y lo electoral se puede resolver de otras formas, que no están dentro de este clivaje, y ahí se tensionan y eso hace que la oposición llegue de forma desunida, pero también esto pasa porque no existe una sola oposición en Chile (…).
CRÍTICA Y PROPUESTA
- Han sido 12 años de gestión para la actual administración liderada por el alcalde Miguel Becker. ¿Cuál es tu opinión acerca de lo hecho y lo ausente hasta ahora?
- Lo primero es que Temuco no debió merecer por tanto tiempo un liderazgo como el de Miguel Becker, un liderazgo autoritario, racista, poco democrático, que imposibilitó que todas y todos pudiésemos avanzar al mismo tiempo. Eso conlleva a que su gestión ha dejado atrás a mucha gente; son esas personas las que buscan una alternativa porque no está resuelto, por ejemplo, el problema de la seguridad. En los barrios de Temuco la droga ha ganado espacio y también la oscuridad, eso implica cambiar el eje y entender que para resolver los problemas de seguridad hay que avanzar con un enfoque comunitario; no todo tiene que ser represión.
- ¿Qué más observas?
- El actual es un gobierno local que prometió terminar con la basura, la gestión de los residuos es el principal fracaso de esta administración. Es decir, son 12 años sin resolver y provocando un nivel de gastos elevadísimo que termina pagando la ciudadanía. Temuco tiene también el problema que ha privatizado los espacios públicos, lo que se expresa en dos contratos, el de parquímetros, que está al límite de la ley, genera pocos ingresos y hace que el centro de Temuco desde Andes a Barros Arana esté privatizado. Y lo otro es que no hay derecho a la utilización del espacio público porque también existe un descontrol del parque automotriz. Creo que el tema ambiental es otra de las grandes deudas de esta gestión donde lo único que ha ocurrido es el aumento de la contaminación ambiental y, si bien el municipio no es el actor protagónico, le faltó liderazgo. En el debate anterior planteamos la opción de declarar la leña como un combustible para regularizar su uso, pero se ha priorizado el negocio privado del pellet, que sabemos está anidado en familias que tienen sintonía política con la derecha.
- Has dicho que eres crítico también respecto de la vivienda en la comuna…
- Sí, ese es otro eje. La desigualdad en la comuna es evidente, hay una alta expresión de campamentos. En 2016, el alcalde junto a organizaciones sociales celebraba el no tener más campamentos y cuatro años después 2 mil familias viven en campamentos. ¿Dónde estaban estas personas? Estaban en el hacinamiento. A propósito de la fuerza del estallido social, hoy, emergen esos campamentos como una salida hacia la vivienda propia. Entonces, allí hay otro fracaso de la administración de Becker, y en cuanto a la infraestructura de los barrios, Temuco tampoco tiene identidad, o se le entregó al mercado. No puedo no mencionar la salud. Creo que el gobierno local ha puesto en riesgo la salud de los temuquenses en pandemia. La salud primaria viene abandonada hace bastante tiempo por la lógica del modelo.
- ¿Son estos los temas que quisieras asumir y mejorar?
- Sí. Están estos temas que nombré, pero hay también una visión general. Hay un problema estructural en esta comuna que tiene que ver con la participación, y en particular con el trato al pueblo mapuche, que tiene más de 60 mil personas viviendo en la comuna. Aquí lo que planteamos es que se necesita un gobierno local que entienda el momento histórico que vive el país y cuando decimos estado plurinacional, lo que hemos hecho y queremos desarrollar acá es la municipalización del convenio 169, que tiene dos grandes ámbitos, uno es la creación de la ordenanza de participación indígena en base a ese estándar, que por ejemplo nos permitiría resolver el conflicto con las ñañas. Y lo segundo tiene que ver con los derechos colectivos, porque el convenio garantiza derechos para los habitantes del territorio donde se aplica. Por lo tanto, podríamos avanzar en el derecho a la participación, a la salud y garantizarlos con recursos.
- De llegar a la alcaldía, ¿qué asuntos abordarías primero?
- Creo que hay que acabar con la privatización del espacio público, permitiendo pensar modelos de movilidad urbana que prioricen al peatón, a la bicicleta, al transporte público y al auto privado. Eso implica que el modelo de estacionamientos en la superficie tenga fines sociales y no privados, por lo tanto, la empresa que administra los estacionamientos es un contrato a revisar. En segundo lugar, el medio ambiente, la contaminación es uno de los grandes temas y el manejo de los residuos, esta lógica de recoger la basura para enviarla a Los Ángeles tiene que terminar y eso implica cambiar la estrategia; ahí hemos recogido planes y programas que permitan avanzar en reciclaje en los tiempos que se demore. Lo tercero tiene que ver con los campamentos y las ollas comunes que alimentan a muchas personas y no reciben ni un tipo de ayuda, eso es fundamental para resistir el próximo invierno con covid, que también implicará fortalecer la atención primaria. Y cuarto, creo que la participación es clave para poder desarrollar las políticas del municipio, una participación, más que vinculante, obligatoria.
- ¿De verdad consideras que los candidatos de derecha como el concejal de oposición Roberto Neira cargan con la "mochila de un mal gobierno" y una "pésima gestión en pandemia"?
- Sí, absolutamente. La concertación no tuvo la capacidad en el concejo municipal de demostrar que tiene una propuesta de administración diferente a la de Becker, y terminaron siendo lo mismo en el contrato de la basura, el fracaso de la incineradora, el contrato de los parquímetros, la entrega de concesión gratuita por 30 años a empresa que tiene los estacionamientos subterráneos. Ellos cargan esa mochila. En cuatro años, Temuco no ha presentado al Ministerio de Vivienda un proyecto nuevo de vivienda, solo de mejoramiento y cambio de techumbres. Y los concejales también son responsables de la existencia de los campamentos. Hay allí una mimetización y ese es un conflicto.
CIUDAD SOÑADA
- ¿Qué opinas sobre la relación entre Temuco y Padre Las Casas?
- Está definido en la estrategia del gobierno que Temuco y Padre Las Casas son una metrópolis. De hecho, la creación del tercer puente va en la lógica de unir esta metrópolis. Allí hay dos problemas en términos de herramientas. Padre Las Casas no cuenta con un instrumento planificación, por lo tanto, los padrelascasinos y padrelascasinas tendrían que presionar para resolver esa falta. Y segundo, hay que conversar una política de planificación urbana y rural para la intercomuna, no se le puede dar la espalda con el nivel de movilidad que hay entre ambas ciudades. Eso tiene que ver con armonizar la relación y también con avanzar a mirar una metrópolis que permita entregar bienestar a la ciudadanía.
- Desde la libertad de soñar ¿cómo es el Temuco que te gustaría ver en desarrollo?
- Con un transporte público de calidad. Es un sueño realizable avanzar hacia un metrotrén. Nosotros imaginamos una comuna en un marco de un gobierno local plurinacional que haya resuelto o proponga formas para mejorar la convivencia entre quienes viven aquí. La herramienta municipal es capaz de producir formas de vida y escenarios en la ciudad. Nuestra disposición es a que esta herramienta promueva una relación armónica basada en los estándares internacionales que le abra la participación obligatoria a los actores sociales. Eso en término de principios. Y en términos de lo concreto creo que necesitamos que Temuco resuelva el tema de la contaminación con liderazgo, que lidere el cambio constitucional porque Temuco, al ser una de capital regional no puede ser un observador de lo que está pasando; eso implica mejorar el sistema de atención primaria en salud, mejorar la movilidad y planificación urbana. Y necesitamos resolver la identidad y la infraestructura de Temuco.
"La gestión de los residuos es el principal fracaso de esta administración. Es decir, son 12 años sin resolver y provocando un nivel de gastos elevadísimo que termina pagando la ciudadanía".
"Lo que queremos desarrollar es la municipalización del convenio 169, que tiene dos grandes ámbitos, uno es la creación de la ordenanza de participación indígena en base a ese estándar… Y lo segundo tiene que ver con los derechos colectivos".
"La desigualdad en la comuna es evidente, hay una alta expresión de campamentos. En 2016, el alcalde junto a organizaciones sociales celebraba el no tener más campamentos y cuatro años después 2 mil familias viven en campamentos. ¿Dónde estaban estas personas? Estaban en el hacinamiento".