Está de moda el turismo de naturaleza y todavía hay mucho por descubrir
DURANTE TODO EL AÑO. Los paisajes fluviales de las rutas de Carahue y Toltén, alrededor de los ríos navegables Imperial, Moncul, Toltén, Queule, Boroa y Boldo, entregan una excelente alternativa para quienes valoran el turismo de naturaleza.
El turismo rural o de naturaleza cada vez más cautiva a las personas y a turistas que buscan combinar la tranquilidad enmarcada por la belleza de los paisajes campestres, únicos del sur de Chile. Estos atributos de lugares apacibles, ideales para descansar, y observar la flora y fauna, son los elementos con los que apostaron dos mujeres ligadas al turismo fluvial. Es así como la visión femenina de desarrollar una actividad ligada al turismo llevó a Isolina Huenulao y a Práxedes Zapata a crear sus proyectos, aprovechando el paisaje fluvial. Es así como ambas mujeres levantaron sus emprendimientos: Viña Wuampuhue de la Ruta Carahue Navegable y Cabañas Peumayen Toltén de la Ruta Toltén Navegable.
La pandemia generada por el covid-19 congeló muchos planes y programas relacionados con el turismo a toda escala, de tal manera que ya casi terminando el año, las cuarentenas, los cordones sanitarios y las distintas fases internas, han generado grandes pérdidas al turismo y al comercio. Por ello, para apoyar a los emprendedores que están detrás de estas actividades económicas a nivel local, CMPC creó el programa Arriba Todos Juntos, iniciativa que contempla una serie de acciones, entre ellas, capacitaciones, entrega de kits sanitarios y respaldo para posicionar distintas iniciativas comerciales de 14 comunas emplazadas en las regiones del Biobío y La Araucanía.
Isolina Huenulao de la Viña Wuampuhue y Práxedes Zapata de Cabañas Peumayen Toltén, junto con ser beneficiarias del programa Arriba Todos Juntos, tienen en común haber levantado emprendimientos asociados al turismo fluvial, aprovechando las bondades y características que ofrece cada uno de estos maravillosos lugares.
Una viña frente al río Imperial
Aprovechando un terreno con pendiente, Isolina Huenulao estableció sus vides de la cepa Pinot Noir en el año 2013, creando la Viña Wuampuhue; luego, creó un centro de eventos y construyó dos cabañas equipadas con tinajas de madera, las que gozan de una panorámica que muestra al viñedo que limita con el estero Wuampuhue que comparte espacio con una gran diversidad de árboles nativos y que mira también a un cerro costero.
Viña Wuampuhue es el nombre con el que bautizó Isolina Huenulao a su complejo turístico y viñedo. Se trata de un espumante con personalidad y que recoge los sabores de una tierra alimentada por la brisa del Imperial, y que a fines del año pasado participó en un importante certamen internacional, en el 25º Catad'or Wine Awards con su producto de la Viña Wuampuhue Brut Rosé Pinot Noir 2019, obteniendo 88,67, una puntuación que la dejó muy cerca de la medalla de plata. "Este logro y valoración de mi espumante me motiva y me convence que estoy en la línea correcta".
A los turistas, Isolina, los recibe con un saludo en mapudungúin y les habla en esta lengua, porque Viña Wuampuhe es una viña mapuche, que es parte de la Ruta Fluvial Carahue Navegable, que comprende un recorrido de 30 kilómetros a los largo del río Imperial y que termina en el humedal de Monkul. La Ruta Fluvial Carahue Navegable, es apoyada e impulsada por la municipalidad de Carahue, el Departamento de Acción Social (DAS) del Obispado de Temuco y CMPC.
La Viña Wuampuhue está en el kilómetro 17 de la Ruta Carahue - Nehuentúe, en el paradero San Pedro, desde lugar se sube hacia la viña que está a 1,5 kilómetros.
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Este logro y valoración de mi espumante me motiva y me convence que estoy en la línea correcta".
Isolina Huenulao,, emprendedora