Acoso por internet
Si bien hasta 2019 las víctimas de acoso eran de preferencia estudiantes mujeres, en los años siguientes las cifras se equilibraron con los ataques a hombres. El ciberbullying o ciberacoso es un concepto que ya se adoptó en nuestro país y que muestra un alza persistente.
El superintendente de Educación, Cristián O'Ryan, ha señalado que cerca del 70% de las denuncias que recibe la institución tienen que ver con temas de convivencia escolar, por lo que el ciberacoso o ataques por redes sociales o internet es un tema relevante, sobre todo en estos meses de suspensión de clases presenciales por la pandemia.
Si bien hasta 2019 las víctimas de acoso eran de preferencia estudiantes mujeres, en los años siguientes las cifras se equilibraron con los ataques a hombres, porque se ha trasladado el maltrato físico hacia el mundo digital, producto de la suspensión de clases presenciales. Casi la totalidad de los niños y jóvenes tienen celulares, y la inmensa mayoría de ellos también tiene acceso a las redes a través de los computadores. Como contrapartida, se han masificado los ataques entre ellos mismos, especialmente en el ciclo que va de quinto a octavo básico, así como las propuestas con obscenidades que reciben de adultos que se esconden en la red y que llevan a delitos más graves.
El ciberbullying o ciberacoso es un concepto que ya se adoptó en nuestro país y que muestra un alza persistente, ya que da cuenta de los conflictos de relaciones entre los estudiantes, que al no ser resueltos por el colegio, se trasladan a los espacios virtuales, lo que revela que existen necesidades en la formación de los estudiantes y en la solución pacífica de los conflictos.
La Política Nacional de Convivencia Escolar del Ministerio de Educación, sugiere enfrentar el bullying y el ciberacoso cuando hay sobrenombres, burlas o comentarios irónicos reiterados hacia algún estudiante. Desde 2015 la Superintendencia puso a disposición de las comunidades educativas la resolución pacífica de conflictos, para reconstruir la relación de colaboración y confianza que debe existir entre la familia y el colegio. En estos meses de crisis sanitaria, se ha fortalecido el servicio de mediación y gestión colaborativa de conflictos, con un procedimiento online que complementa el servicio presencial. Ante esta realidad y la crueldad con que actúan algunos menores en contra de sus compañeros, es necesario guiar a los escolares acerca del buen uso de las tecnologías y los riesgos y peligros que encierra su utilización indebida.