"Nosotros los loncos somos los interlocutores válidos para alcanzar la paz en La Araucanía"
Positiva y esperanzadora fue la impresión que dejó en el Consejo de Loncos del Wallmapu la primera visita a la Región del subsecretario del Interior, Manuel Monsalve.
Así lo explica en esta entrevista el presidente de la entidad ancestral, el lonco de Nueva Imperial, Luis Huincache Panchillo, quien una vez que se jubiló en 2012 del servicio público (el ingeniero en administración de empresas estuvo 15 años en el SII y 20 en la Conadi), logró revitalizar el consejo solo con loncos de linaje bajo la Ley Indígena.
Hoy cuentan con personalidad jurídica y en sus registros hay 260 inscritos, siendo la proyección de Huincache reunir a los 650 loncos que existen en La Araucanía, más los del Biobío con quienes tiene buenas relaciones desde la época de la represa Ralco.
El lonco Huincache asegura que están disponibles para ser interlocutores válidos con el Estado y el empresariado, representando a las 3 mil comunidades de La Araucanía.
- ¿Qué le dijeron al subsecretario?¿Le pidieron algo?
- Le dijimos que estamos disponibles para elaborar un proyecto cuyo norte sea la búsqueda de la paz. Somos los únicos interlocutores válidos para hablar con el Gobierno, ya que al ser autoridades tradicionales permanentes, no vamos a cambiar, y además estamos por sobre la política y la religión.
- ¿Qué opinan del término del Estado de Excepción?
- Estamos de acuerdo porque nunca hemos querido ser sometidos, por eso la mayoría de las comunidades no lo acepta. Para nosotros es muy bueno que este Gobierno esté en terreno conversando con la gente.
- ¿Cómo evalúan el recibimiento a balazos que tuvo la ministra Siches en Temucuicui?
- Lo que pasó es que ahí no hubo protocolo mapuche. Creyeron que todo era muy fácil porque aun piensan que los mapuches son tontos.
- ¿Pero eso justifica los balazos?
- Claro que no. Yo no avalo lo que ocurrió, pero tampoco sabemos quiénes fueron los que dispararon. Mire, yo fui funcionario público, y a mucha gente le interesa que siga el conflicto porque existen pagos por funciones críticas, lo mismo pasa con Carabineros.
- ¿El narcotráfico usa la causa mapuche desde las comunidades más radicalizadas?
- Eso fue un descuido de los gobiernos de turno, por eso entraron narcotraficantes a las comunidades. Pero también la extrema izquierda y la extrema derecha se metieron en el territorio.
- ¿Cuál es la solución a todo esto?
- Es una buena señal el diálogo que comenzó el Gobierno, porque solo entre todos podemos solucionarlo. Esto no se arregla con gente que venga de afuera y que trabaje desde las oficinas, como ha sucedido hasta ahora.
-¿Cómo se dialoga con comunidades radicalizadas?
- En la Región son cerca de tres mil comunidades constituidas de acuerdo a la Ley Indígena y de ellas no son más de 15 las que tienen ese problema. Los más radicalizados quieren autodeterminación, pero cuando empiecen a ver que el Gobierno recupera tierras para los mapuches, se recuperan APR botados y se mejoran los caminos: esto va a mejorar. Se han hecho planes de inversión para mejorar esto, con millones y millones, pero resulta que las comunidades no han sido favorecidas. Aunque no todo ha sido malo porque se construyeron hospitales.
- ¿Qué opina del catastro de tierras que dejó listo para licitar el gobierno saliente?
- Tiene que hacerse con gente que sepa, que conozca los territorios y las tradiciones mapuches. Ocurre que contratan a empresas externas que no tienen idea de lo que pasa en las comunidades, y solo anotan lo que ven. El catastro no puede ser solo números, tiene que ser humano. Digo esto porque cuando se entregan tierras no nos dan ni un lápiz, lo que no pasó cuando llegaron los colonos. Hoy hay más de 500 comunidades con aplicabilidad esperando la compra de tierras.
- ¿Qué le parece que el Gobierno esté disponible para reorganizar el empresariado?
- El empresariado hace lo que quiere, no hay un ordenamiento y ya sabemos que las forestales tienen seca a la Región. Hay que ver si el Gobierno logra ordenarlos y mejorar esta situación, pues muchas veces atentan contra la propia vida de los seres humanos.
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"Fue un descuido de los gobiernos de turno, por eso entraron narcotraficantes a las comunidades. Pero también la extrema izquierda y la extrema derecha se metieron en el territorio".