¿Qué hacer frente al acoso escolar?
Este inicio de año escolar nos ha sorprendido tristemente por los casos de bullying o acoso escolar, los cuales sin duda nos han remecido.
¿Qué podemos hacer frente a ello? Primero, desvalidar toda forma de violencia, pues no podemos ver con naturalidad chistes que atacan a otras personas ni tampoco una respuesta desmedida como la que presenciamos en la entrega de los premios Oscar. También es importante revisar y socializar con nuestros hijos el reglamento de convivencia escolar del establecimiento al que asisten, con ello advertimos que el acoso está sancionado para el agresor y la víctima tiene derecho a recibir ayuda.
Al respecto, se sugiere conversar con los hijos e hijas para generar un espacio de confianza en el que podamos advertir si están en esta situación y, así, iniciar el protocolo descrito en el reglamento. Esta solicitud debe ser siempre por escrito, quedando con nosotros una copia de recepción. Por su parte, el establecimiento educacional tiene la obligación de iniciar el procedimiento de investigación y reaccionar conforme a la gradualidad de las conductas con la sanción impuesta en el reglamento, y en forma paralela acompañar a él o la agresora con objetivo que supere el fondo del problema.
En el caso que la institución no inicie el protocolo o lo haga en forma distinta al regulado, el apoderado tiene la opción de solicitar a la Superintendencia de Educación su intervención, lo que puede derivar en que se sancione con una multa administrativa al establecimiento.
Al mismo tiempo, quienes somos responsables de niños, niñas y/o adolescentes, podemos iniciar acciones penales si de por medio existen hechos constitutivos de delito, y acciones civiles indemnizatorias por la responsabilidad que le corresponde al establecimiento educacional por no aplicar el reglamento de convivencia escolar, esta última vía ha tenido acogida en nuestros tribunales ordenando el pago de la reparación civil, demandas que se han confirmado por la Corte Suprema.
Carolina Araya, Universidad de Las Américas
Psicólogo deportivo, una necesidad
Existen estudios que plantean que el 94, 9% de los entrenadores consideran que el rendimiento de sus atletas es mayor si se llevaba a cabo un entrenamiento de habilidades psicológicas, así como de otorgarle importancia a los aspectos psicológicos en el rendimiento.
Otro estudio que comparó la percepción de esta área en un lapsus de 8 años muestra que se ha modificado en sentido positivo la percepción de la necesidad de incluir un psicólogo del deporte dentro del cuerpo técnico. También se da importancia prioritaria a la formación del psicólogo en la especialidad.
Hay un interés creciente por contar con alguien que acompañe los procesos, ya sea formativo, de alto rendimiento como también desde lo recreativo. Personas que realizan deporte (running, ciclismo, triatlón, Trail running, tenis, golf, etc.) como complemento de otras facetas de la vida y quieren tener una mejor experiencia deportiva o explotar sus fortalezas para lograr su mejor versión en la práctica deportiva. Entre más pequeños aprendamos a reconocer y gestionar las emociones, a evaluar los resultados e incorporar los aprendizajes, a no olvidar el disfrute, el desarrollo de valores y a considerar lo necesario para un adecuado crecimiento cognitivo, social y físico, más robusta se va desarrollando la formación y cultura deportiva y por tanto más probabilidad de contar con más y mejores deportistas.
En la etapa adulta los objetivos se relacionan con el entrenamiento en las habilidades psicodeportivas, en potenciar las fortalezas y mejorar las debilidades y en la alta competencia la búsqueda de rendimiento. Las variables son similares, pero el cómo se trabajan y lo que se busca en cada etapa es lo variable.
Paula Ortiz
La hoja en blanco
A la luz de las encuestas que se van conociendo, todo indicaría que fueron pocos los que en su momento, tomaron muy en serio, o al menos los hizo reflexionar, con lo de "La hoja en blanco" cuando recién se hablaba el tener una nueva Constitución.
Hoy día, políticos de todos los frentes, vigentes y jubilados, expertos constitucionalistas y el "olfato" ciudadano, lo han comprobado, los primeros manifiestan sus dudas y temores ante el desmantelamiento de todo lo que han conocido en sus largas vidas de políticos, los segundos remarcan lo riesgoso que resulta, el crear y crear y crear normas, sin darles un tiempo de cocción adecuado, para encontrar el punto perfecto para un preciso balance y los terceros, las personas que votaron, para tener una nueva Constitución, simplemente tratan de hacer "match" (buscar coincidencias) entre los contenidos, que les ofrecieron que incluiría la Nueva Constitución frente a todos los artículos, que todos los días aparecen aprobados y que formarían parte del texto final. Palabras más, palabras menos, lo de "La hoja en blanco" era en serio, un literal borrón y cuenta nueva, un verdadero "reset", Game over, etcétera...
¿Usted que prefiere, partir de cero, de "La hoja en blanco" o revisar todo lo que se ha escrito, para mantener lo bueno, mejorar lo posible de mejorar y desechar lo realmente malo?
Luis Enrique Soler Milla