que conforman su ámbito competitivo".

TRANSVERSAL

Las razones que atraen gradualmente más y más personas hacia esta práctica deportiva en la capital regional son múltiples, pero la principal - a todas luces - es que se trata de un deporte que no discrimina.

Así lo explica Cristian Mundaca Muñoz, el emprendedor y administrador de Campo Pádel, club ubicado en Camino Botrolhue 04180, quien cree firmemente que el pádel ha proliferado debido a la pandemia. "Es mi percepción, porque llegó un momento en que no se podía hacer deporte alguno y este fue uno de los primeros que abrió cuando mejoraron las condiciones. Y cómo no, si se juega de a cuatro personas por cancha y no es difícil de aprender. Es una actividad muy amigable para todas las edades; y es para hombres y mujeres. Es decir, no discrimina; aquí solamente varían los niveles de juego".

Nicolás Saure acota que este es un deporte de bajo requerimiento técnico, que no tiene las especificaciones del tenis o del tenis de mesa, y por lo mismo es apto para aquellas personas que desean una actividad de bajo impacto, sobre todo cuando arrastran un historial de lesiones o quieren dejar los deportes que implican un mayor contacto.

Son ideas a las que adhiere Mauricio Lagos, uno de los tres hermanos emprendedores de Patagonia Pádel, la triada de canchas abiertas y tienda emplazadas en Gabriela Mistral esquina Aragón.

"La proliferación del pádel se debe a es que un deporte muy noble y transversal. Lo digo porque para disfrutarlo no requieres ser una atleta ni tener una condición física especial. Esta actividad - comenta - no discrimina género, edad, estado físico, nada. Cualquiera puede jugar y pasarlo bien. El hecho de ser algo transversal explica hoy que el por qué está creciendo rápidamente en Temuco, y es que, además, brinda a muchas personas la posibilidad de continuar con una actividad sin arriesgar su integridad física".

PÚBLICO

El público atraído por este deporte, en general, se sitúa entre los 25 y 45 años de edad, aunque prácticamente todas las edades han pisado alguna de las canchas locales en los últimos tres años, más cuando cada club genera sus propias instancias de capacitación, sean procesos colectivos de inducción o clases para parejas o grupos.

En el caso de Patagonia Pádel, a un año de su apertura, el grueso de los jugadores va de 25 a los 40 años de edad, sin embargo, al estar inserto en un barrio residencial, comercial y universitario, el club ha generado la llegada de un número importante de estudiantes para quienes han creado promociones especiales, y a quienes ha ido formando junto al profesor estrella y figura nacional de pádel, Joaquín Mellado, quien también se ha encargado de preparar un tercer segmento importante de jugadores, el grupo de mayores de 50.

Esta actividad, que se da transversalmente de lunes a domingo, también ha incrementado gradualmente el ingreso y participación de las mujeres. "Al principio venían solo hombres - recuerda Nicolás Saure, de Los Pablos - y en este momento la participación femenina alcanza o supera el 50%".

En Campo Pádel esta historia sigue la misma lógica. "Esta es una actividad a la que están optando muchas mujeres. Primero vienen a tomar clases y luego se lanzan a jugar. Y la gracia de todo esto es que esta práctica combina un componente saludable con uno social. Aquí tenemos jugadores desde los 16 a los 75 años, y diría que somos el primer centro en abrir una escuela de mini pádel para niños, academia que funciona sábado y domingo", precisa Cristian Mundaca.

COMPETENCIA

Así como se da el juego por salud y recreación, el pádel también tiene modalidades de competencia, con distintos niveles de exigencia, y cada club tiene sus propios torneos y programaciones.

"Existen al menos tres modalidades. Hay una liga que se juega por fechas, hay torneos de jueves a domingo, y está el formato exprés, que son los torneos americanos para damas y varones. Con esto vamos incentivando a que la gente lo pase bien. La ventaja en estas competencias es que si no tienes pareja para jugar puedes inscribirte y encontrar una dupla, porque aquí se juega todos contra todos, y la idea es que nadie se quede fuera", explica Mauricio Lagos, de Patagonia Pádel.

En Campo Pádel y Club Los Pablos la competencia no es muy distinta y ambos administradores aseguran que el impacto de los torneos no es menor, porque el interés por participar simplemente va en alza.

EXPANSIÓN

Si bien en la actualidad los propios gestores del movimiento del pádel en Temuco calculan en siete los clubes en funcionamiento, la expansión de la actividad es inminente. Y a raíz del aumento de los jugadores, la infraestructura también está en pleno desarrollo.

Mauricio, Felipe y Sebastián Lagos, los dueños de Patagonia, están en la etapa de construcción de dos nuevas canchas que formarán una suerte de club de campo que estará ubicado en un lugar más retirado del centro urbano, y saben de buena fuente que hay al menos dos más en construcción detrás del barrio Lomas de Mirasur, proyectos que verán la luz "muy a pesar de las barreras de entrada que hace 18 meses no estaban y que hoy encarecen al doble cualquier obra de construcción", comenta Mauricio Lagos.

El Club Campo Pádel también pretende crecer. Dos nuevas canchas techadas y una cafetería complementarán las dos ya existentes, anuncia su dueño.

Esta expansión no podría ser de otra manera, si los elementos en juego se combinan hoy en Temuco para que esta actividad prolifere y requiera un mayor número de canchas para los nuevos interesados e interesadas, y cuando el mercado local también provee el equipamiento para poder jugar, donde lo esencial es contar con una buena pala (que van desde los 50 mil a los 500 mil pesos) y un buen par de zapatillas apropiadas para la cancha de pasto sintético y arena especial que, por lo general, se le levanta sobre un radier de hormigón para dar sustento a estos rectángulos cerrados, abrigados con muros de vidrio polarizado.

Es el presente y posible futuro de este deporte que día tras día atrae a más temuquenses que juegan y arriendan por hora u hora y media estos espacios, que por lo general se activan con fuerza durante la franja de la tarde noche, después del trabajo y que poco a poco se convierte en un deporte apropiado para unir al núcleo familiar.