Correo
11 años del accidente en Juan Fernández
A 11 años del trágico accidente de Juan Fernández, el espíritu de nuestro Fundador Felipe Cubillos y el resto de nuestros compañeros nos acompaña más que nunca. Nos recuerdan que debemos luchar aún con más fuerza, siempre desde la libertad y la alegría, por construir un Chile de más oportunidades y menos polarización.
Recordamos que el emprendimiento y la educación son las mejores herramientas de movilidad social y que no debemos descuidarlas, sino al contrario, debemos seguir impulsándolas con mayor determinación y fuerza, si de verdad queremos nivelar la cancha.
Los honramos también tendiendo día a día esos miles de puentes mágicos de ayuda entre quienes quieren ayudar y quienes necesitan ayuda y quieren salir adelante. Y sobre todo, a 11 años de su partida, se nos hace cada vez más patente, la importancia de colaborar y coordinarse entre lo público y lo privado, otorgando soluciones eficientes y sostenibles a las comunidades de todo nuestro increíble país, sobre todo a aquellas más vulnerables.
Nicolás Birrell, director ejecutivo Desafío Levantemos Chile
40 horas
Importante paso que estamos dando como sociedad. Esta disminución permitirá, entre otras cosas, mejorar la calidad de vida de los trabajadores al permitirles un poco más de tiempo para estar en casa y compartir con su familia.
Sin embargo, lo anterior impone una serie de interrogantes y/o retos como, por ejemplo, de qué manera esta medida impactará la contratación de personal o cómo las empresas podrán mantener o mejorar sus actuales niveles de productividad.
En relación a este último punto, resulta clave que los trabajadores se comprometan a aprovechar a conciencia su tiempo en el lugar de trabajo y evitar comportamientos que los distraigan de sus tareas y funciones diarias. Por el lado de las empresas, en tanto, es crucial que éstas fijen métricas de productividad, revisen los procesos internos, fomenten un buen ambiente de trabajo, establezcan metas y objetivos claros, impulsen la proactividad entre los colaboradores, mejoren la comunicación interna, realicen una buena gestión del tiempo, implementen soluciones tecnológicas para un mejor desempeño, capaciten constantemente al RR.HH., y atraigan a los mejores talentos, entre otras estrategias.
Francisco González
Mijaíl Gorbachov
Para muchos, incluyendo el actual líder ruso, Gorbachov fue una suerte de traidor, dado que facilitó la caída de la Unión Soviética, a finales de 1991.
Estos grupos miran con nostalgia el poder y prestigio soviético, y añoran volver a la época en que EE. UU. y la U.R.S.S. negociaban las grandes decisiones de política internacional.
No obstante, aquellas personas olvidan que la genialidad del último líder soviético recae en su capacidad de abstraerse de la clásica política internacional, esa dictada por el interés nacional y la sobrevivencia del estado.
En contraposición, Gorbachov simplemente se enfocó en tratar de mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos, dejando de lado mezquindades tales como la carrera armamentista y la represión al pueblo soviético.
En resumen, Mijaíl Gorbachov, a pesar de su posición como líder del Partido Comunista de la U.R.S.S., no era un hombre controlado por la ideología, sino que simplemente una persona con un formidable sentido común.
Juan Pablo Sims
Atentado en Contulmo
En relación con el gravísimo atentado cometido por una veintena de terroristas que dispararon a matar contra miembros de la familia Grollmus y que incendiaron el museo y el histórico molino en Contulmo, el subsecretario del Interior demostró insatisfacción con el rol de la Armada en su despliegue operativo en la Región y declaró: "Nos parece indispensable que el Estado de Excepción cumpla el objetivo que tiene, que es prevenir, pero también responder de manera oportuna cuando hay riesgo de la vida de las personas".
A lo imposible nadie está obligado. ¿Cómo podrían haber actuado eficazmente las exiguas fuerzas destinadas a controlar un extenso territorio y cuyas bases estaban ubicadas muy distantes de Contulmo? Y, en el caso de que los marinos hubiesen llegado cuando los terroristas estaban cometiendo o se disponían a cometer dichos actos: ¿qué podrían haber hecho dadas las absurdamente restrictivas reglas de uso de la fuerza (RUF) a las que están sometidos, que prácticamente les impiden utilizar sus armas de fuego?, ¿usar altoparlantes, carros lanzaagua, bombas lacrimógenas, lanzar piedras, o combatir cuerpo a cuerpo con los atacantes?
Las referidas RUF dejan a dichas fuerzas carentes de capacidades disuasivas y represivas, de modo que los terroristas pueden actuar impunemente.
La disuasión se logra mediante la amenaza de un daño que el agresor no está dispuesto a aceptar, para lo cual es preciso que el disuasor cuente con la capacidad material para cumplir la amenaza y con la voluntad para llevarla a cabo.
Adolfo Paúl Latorre