Alcohol en la conducción
Durante el fin de semana de Fiestas Patrias fueron detenidas 81 personas manejando bajo los efectos del alcohol y una que lo hacía tras haber consumido drogas. El balance del fin de semana pasado dejó cuatro víctimas fatales, 64 accidentes de tránsito, 707 infracciones viales y 239 infracciones por conducir a exceso de velocidad.
El lamentable balance realizado por Carabineros luego del fin de semana de Fiestas Patrias en La Araucanía -que estuvo marcado por la muerte de cuatro personas en incidentes viales-, dejó en evidencia un problema que debe ser abordado con seriedad, toda vez que demuestra la nula conciencia y escasa responsabilidad de un importante número de conductores.
Se trata del manejo bajo los efectos del alcohol, conducta que quedó al descubierto luego de que durante los cuatro días de festejos por el aniversario patrio fueran detenidas en la Región 81 personas por manejar en estas condiciones (se agrega un conductor detenido por conducir bajo los efectos de drogas). Esta cifra fue el resultado del Plan Ruta Segura y las fiscalizaciones realizadas por Senda en conjunto con Carabineros, que efectuaron 2.690 exámenes respiratorios para la detección de alcohol y narcotest, los que permitieron identificar a estas personas y sacarlas de circulación, evitando con ello más accidentes de tránsito.
Ahora bien, cuesta entender cómo un conductor, sabiendo los riesgos que implica guiar un vehículo bajo los efectos del alcohol, toda vez que para obtener su licencia de conducir debió dar un examen para el que se interiorizó de la normativa vial, emprenda acciones de este tipo.
De ahí que se hace necesario abordar este problema con total seriedad por parte de los organismos involucrados en la prevención de accidentes de tránsito, toda vez que si se busca disminuir la accidentabilidad vial (solo durante el fin de semana de Fiestas Patrias se registraron 64 accidentes de tránsito, 707 infracciones viales y 239 infracciones por conducir a exceso de velocidad), se debe contar con conductores capacitados que comprendan a cabalidad la responsabilidad que les cabe al tomar el volante de un vehículo motorizado.
Una tarea compleja, cuyo abordaje no debe seguir esperando.