Institucionalidad Ambiental
Se ha convertido en casi una tradición que cada Presidente se salte, de un modo u otro, la institucionalidad ambiental. Lo hizo Lagos con Alumysa, Bachelet con Hidroaysén, Piñera con Barrancones y ahora lo hace Boric con Dominga. Los casos no son iguales, pero todos tienen en común que no se dejó a las instituciones funcionar libremente, sino que fueron objeto de una orden política desde más arriba.
Este gustito es caro. Y no me refiero a la inversión que deja de entrar al país, sino al deterioro progresivo a las instituciones. Mucho caudal se ha hecho acerca de tecnificar la institucionalidad ambiental. Pero la señal que se da con este tipo de situaciones es justamente la contraria. Para despolitizarla lo primero que se debe hacer es no intervenir en sus procedimientos, reglados por lo demás. El perfeccionamiento del SEIA como un todo -que actualmente se discute- pierde relevancia cuando esto ocurre.
Si aspiramos a un desarrollo sustentable, debemos cuidar las instituciones y dejar que -realmente- funcionen, sin intervención alguna. ¿Será esto posible?
Alejandro Ruiz Fabres
Envejecimiento saludable
El mundo está envejeciendo y las cifras así lo confirman. Solo en Chile y según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en 1992 los adultos de sobre 60 años representaban un 9,5% de la población mientras que, en 2022, este porcentaje aumentó a un 18,1%. Datos que demuestran una realidad preocupante, sobre todo cuando en Chile la calidad de vida de las personas mayores es cada vez más precaria, siendo esta situación uno de los principales desafíos que enfrenta nuestro país a nivel social.
Una inquietud que también se extiende a nivel internacional y que ha sido destacada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El organismo sostiene que existen más de mil millones de personas con 60 años o más los que, en gran parte, provienen de países con bajos o medianos ingresos. En busca de una solución, ha declarado la "Década del Envejecimiento Saludable", entendiendo que es una situación que requiere la atención de todos los sectores de la sociedad.
Dado que el envejecimiento de la población es un fenómeno que no se detendrá, es fundamental que desde el Estado se planifique con antelación la manera en que vamos a hacer frente a esta realidad, porque de lo contrario, lo que hoy es un dato, en el futuro se transformará en una crisis.
Para ello, será relevante crear e impulsar tempranamente medidas sociales, sanitarias y económicas enfocadas a promover y fomentar aquellos hábitos que son potentes factores protectores, como lo son las relaciones sociales, el ejercicio, la alimentación saludable, la espiritualidad, entre otras, permitiendo así disfrutar de una tranquila, sana y plena vejez.
Mildred Mayr, gerente de Desarrollo Sur Grupo Medical
Salud mental en niñez migrante
La ola migratoria que afecta a Chile y el mundo tiene no solo un impacto social evidente, sino que también uno pocas veces visibilizado: el bienestar psicológico de la niñez migrante.
Ese fue precisamente uno de los focos centrales que tuvo el seminario "Miradas sobre la niñez migrante" organizado por el Consejo de la Sociedad Civil de la Niñez, instancia de suyo relevante que permitió una mirada especializada a un fenómeno que, muy probablemente, seguirá afectando a nuestro país.
Los niños y niñas migrantes suelen enfrentarse a múltiples estresores en cada una de las etapas del proceso migratorio. Esta es una materia relevante, que debe invitarnos a reflexionar y accionar, pues la niñez migrante es una población que se expone a situaciones de riesgo, de vulneración de derechos que en muchos casos puede ocasionar depresiones severas con efectos a largo plazo.
Pero, sobre todo, se enfrentan a la percepción de anomia, de no sentirse parte de ningún país, ni del de origen -que tuvieron que abandonar forzosamente- ni del país receptor.
Cuando hablamos de protección de los Derechos del Niño o Niña es esencial, en consecuencia, que el Estado impulse instancias, leyes y herramientas para que los padres y/o cuidadores puedan ejercer una parentalidad protectora y nutritiva desde el punto de vista emocional.
Consejo de la Sociedad Civil de la Niñez
Suma y sigue
Ahora fue el turno de la Cancillería. ¿Hasta cuándo deberemos soportar "desprolijidades"?
Definitivamente restan tres años muy, muy largos...
Rodrigo Hernando Díaz